Cada año a principios de setiembre se corre en la famosa zona vitivinícola de Burdeos, Francia, un maratón entre viñedos y castillos medievales que se caracteriza por su espíritu festivo y la posibilidad de probar algunos de los mejores vinos del mundo. A lo largo del recorrido de 42,195 km -la clásica distancia de maratón- se emplazan puestos con vinos, espumantes y exquiciteces locales como ostras, quesos trufados y foie gras. Los únicos requisitos para participar son inscribirse a tiempo, pagar los 90 euros de inscripción, tener un certificado médico de aptitud física y usar disfraces originales. Llegar a la meta en estado de sobriedad no es obligatorio. Es más, hay premios para los más borrachos.
El Maratón de Médoc es mucho más que una carrera famosa entre las carreras del mundo. Es una celebración única que combina deporte, gastronomía y enología en el corazón de los prestigiosos viñedos de Burdeos, Francia. Cada setiembre, miles de corredores de todo el mundo se reúnen en este evento festivo y amistoso. Para correr, previa inscripción o como colado corriendo al costado del camino a la par de los paticipantes, sólo hacen falta zapatillas y un disfraz obligatorio, el más loco que se te ocurra, desde sólo unos bigotazos a un traje de Superman.
El Maratón de Médoc combina deporte, gastronomía y enología en los viñedos de Burdeos. Este evento único ofrece:
-Una ruta de 42,195 km a través de 30 los viñedos y castillos más famosos del mundo.
-Un ambiente festivo con disfraces obligatorios y espectáculos musicales.
-23 stands de cata de vinos y especialidades locales.
-Un compromiso solidario y ecorresponsable.
El finde para agendar es del viernes 5 al domingo 7 de setiembre de 2025, y el tema de este año para disfraces es «El mar». El maratón en sí comenzará el 6 de setiembre de 2025 a las 9.30 horas.
Entre viñedos y castillos antiguos
El Maraton de Médoc se realiza sobre la clásica distancia de 42.195 km, pero esa es la única semejanza con un maratón tradicional. El sendero serpentea a través de más de 30 bodegas y castillos de renombre de la zona del Médoc, ofreciendo a los participantes un entorno excepcional.
La carrera surgió en 1984 por iniciativa de un grupo de amigos, la mayoría médicos, que organizó su primera edición en las rutas y caminos de tierra que tenían los viñedos de Burdeos como paisaje principal. Entre ellos, los increíbles chateaux, fincas y bodegas de la zona daban la pincelada final en este espectacular trayecto. El primer maratón contó con unos 500 participantes, una cifra muy respetable para esa época.
Ya en los siguientes años la prueba experimentó un cambio interesante, lo que hoy es lo que aporta la singularidad a esta prueba. Por iniciativa de los propios viticultores locales, la gente que salía a ver la carrera empezó a ofrecerles a los corredores el producto estrella de su tierra: el vino.
La gente que conoce Burdeos o que conoce un poco sobre vinos, sabe que esta región tiene algunos de los mejores vinos del mundo. Es justamente allí, entre los pueblos de Pauillac, Saint Estephe y Saint Julien, donde desde 1984 se celebra este evento; una mezcla entre deporte, fiesta, ocio y enoturismo donde el principal objetivo es pasarlo bien. Son 42.195 metros de recorrido, que obviamente no se hacen todos de golpe, es más, hay un plazo de 9 horas para completarlo, lo que permite parar a degustar en todos los puestos
Año tras año, el maratón se fue superando y ganando reconocimiento nacional e internacional. Hoy hay corredores de todas las partes de mundo, desde Japón, Gran Bretaña, Estados Unidos, España, Brasil, Argentina, Chile y otros países de América Latina. En la última edición de 2024 hubo corredores de 66 países. Es el segundo mayor maratón de Francia, con un cupo máximo de 8.500 corredores, pero que se amplía a 10.000 o más con los acompañantes colados. Sólo es superado en número de participantes por el de París.
El ambiente festivo es la consigna de esta carrera. El vestuario con disfraces es obligatorio, y un tema diferente se elige cada año, dando lugar a disfraces cada vez más originales y creativos.
A lo largo del trayecto, alrededor de 50 grupos musicales animan la carrera, creando un ambiente alegre y amistoso. Es un verdadero festival callejero que atraviesa los viñedos.
Un maratón para las papilas gustativas
Si el Maratón du Médoc es tan popular, es en gran medida gracias a sus 23 puestos de cata de vinos repartidos a lo largo del trayecto. Es una oportunidad única para degustar los grandes vinos de Burdeos mientras se corre, si es que te «da el cuero». Por supuesto, la moderación es apropiada, pero el objetivo aquí no es romper récords de velocidad, sino más bien llegar medianamente cuerdo a la meta, no importa cuánto tardés.
Además de los vinos, los corredores pueden saborear las especialidades gastronómicas locales. Se suelen disfrutar ostras de la zona, específicamente las ostras de Arcachon Cap Ferret, conocidas por su sabor característico y su cultivo tradicional. Estas ostras planas, a menudo llamadas «gravette», tienen una larga historia en la región y son una de las especialidades gastronómicas que se ofrecen a los corredores.
Además de las ostras, los participantes también pueden degustar otras delicias locales como foie gras, entrecot, quesos trufados y, en algunas ediciones, helado.
Información práctica para la carrera más loca del mundo
Si estás interesado en la aventura, aquí va una información esencial:
- Registro: Suelen abrirse en marzo y las plazas son muy limitadas y demandas. Es esencial hacerlo pronto. El precio de la inscripción, que incluye la camiseta con el número de participantes y las degustaciones, es de 90 euros.
- Condiciones de participación: Un certificado médico es obligatorio, así como un disfraz de acuerdo con el tema del año. El plazo para finalizar la carrera se fija a las 6.30 pm, lo que da tiempo suficiente para disfrutar de las degustaciones, porque son 9 horas desde que se larga a las 9.30 am.
- Alojamiento y transporte: Se recomienda reservar alojamiento (hotel, camping, Airbnb) con mucha antelación. Hay estacionamientos disponibles en algunos hotele y servicios de transporte privado y público.
Para aquellos que prefieren no hacerse cargo de la logística, es posible contratar todo el servicio con una agencia de viajes especializada, que organizará todo.
Un evento solidario y ecorresponsable
Más allá de su característica festiva, el Maratón del Medoc también apuesta por la solidaridad y las acciones medioambientales:
- Apoyo a organizaciones benéficas: Parte de los beneficios se donan a varias asociaciones. Es una gran manera de correr por una buena causa.
- Amabilidad ambiental: La organización establece medidas para limitar el impacto ambiental del evento, como la prohibición de acompañar en bicicleta o el uso de vasos reutilizables.
Las reglas e inscripciones: www-marathondumedoc-com
Fuentes: Vinalogos, Turismo de Burdeos y web oficial del Maratón del Médoc
