En el mes de abril se celebró en el mundo entero la cepa emblemática del vino argentino, el malbec. En esta nota del periodista Manuel Recabarren, publicada originalmente en el blog de la Asociación Argentina de Sommeliers, cuatro reconocidos enólogos mendocinos de otras tantas bodegas exportadoras de larga trayectoria cuentan cuáles fueron las características de esta vendimia 2025 y qué vinos nos depararán las uvas de la cepa estrella.
El varietal malbec tiene su día, su semana y su mes. Porque las razones para festejar a nuestra cepa de bandera sobran y una efeméride sola se queda cortísima. Y claro, estamos hablando de una variedad que representa el 25,5% de la superficie vitícola de Argentina -42%, si nos quedamos sólo con las tintas.
Dieciocho provincias argentinas tienen viñedos de malbec, casi la totalidad de las provincias del país. Mendoza claramente lidera el ránking de mayor superficie implantada y mayor producción de vino de ese varietal, seguida muy de lejos por San Juan, Salta, La Rioja, Neuquén, Catamarca y Río Negro.
Pero más allá de hablar de números que todos en la industria conocen, decidimos preguntarle a algunos reconocidos enólogos mendocinos cómo fue esta vendimia para nuestro varietal nacional.
Germán Di Cesare – Bodega Trivento
«Afortunadamente, el invierno fue benévolo, sin heladas ni granizo generalizados, lo que nos permitió trabajar con precisión en el momento óptimo de cosecha. En un contexto de cambio climático, reafirmamos la necesidad de adaptarnos a ciclos cada vez más tempranos; para esto, desde lo operativo, respondimos con diálogo, eficiencia, flexibilidad y una fuerte coordinación de nuestros equipos. Continuamos profundizando prácticas sustentables, priorizando la gestión de residuos y el uso responsable de los recursos. Esta vendimia no sólo nos deja malbecs prometedores, sino también la reafirmación de nuestro compromiso con la calidad, la sostenibilidad y la innovación.»
Javier Lo Forte – Pulenta Estate
«Tuvimos una cosecha con mucha sanidad. No tuvimos muchas precipitaciones, aunque sí fue un poquito más cálida que años anteriores. De hecho se adelantó tanto en Agrelo (Luján, Mendoza) como en Valle de Uco (que incluye los departamentos de Tupungato, Tunuyán y San Carlos), aproximadamente una semana, tanto en blancas como en tintas. Luego, a mitad de la cosecha, se frenó y creemos que es producto de las olas de calor: la planta se sintió un poquito agobiada y frenó principalmente la producción de azúcar.
«El 8 de abril dimos por concluida la vendimia 2025, que comenzó de forma anticipada el 20 de enero debido a las condiciones climáticas cálidas. Estábamos frente a un año que indicaba que debíamos cosechar muy rápido. Esta premisa se mantuvo hasta la primera semana de marzo, cuando algunas lluvias y la entrada de un frente fresco cambiaron la dirección de la cosecha. A partir de ese momento, la madurez se equiparó con la de un año normal y continuamos con mayor tranquilidad. Tuvimos dos escenarios climáticos en una misma vendimia: al principio cálido y seco y luego fresco y con algunas lluvias. Esta fue una interesante añada con distintas expresiones bien marcadas, por las dos caras climáticas de esta cosecha.
«Por suerte la madurez polifenólica avanzó y la verdad es que logramos obtener un malbec con una concentración impresionante y con buena sanidad. Y producto de este freno que tuvo la madurez en términos de azúcar, vamos a tener malbecs con un poquito menos de grado alcohólico. Siempre hemos tenido un rango entre 14,2 y 14,7 grados, pero este año seguramente vamos a estar alrededor de los 14 grados e inclusive menos.
«Buscando un poco frescura, tipicidad, aromas primarios más relacionados con fruta y con flores típicas del malbec, cosechamos un poco antes pero con una buena concentración polifenólica y con un grado alcohólico más bajo.
«En términos de terroir, los malbec de Agrelo fueron un poquito más suaves, más florales, más de lilas y violetas; y los dl Valle de Uco con una concentración impresionante, más de frutos negros, estructura, cuerpo, concentración, y más tánico. Lo vamos a resolver con la crianza.
«Y quizás la frutillita del postre es que también los cabernet sauvignon y los cabernet franc han salido impresionantes, también con un poquito menos de alcohol, pero con una fruta y unas especias maravillosas.
«En términos de producción, si bien pensábamos que iba a ser mucho más productiva esta cosecha, sólo hemos tenido alrededor de entre un 7 y un 9% más de producción, no mucho más que el año pasado. Pero aún así hubo una sanidad increíble”.
Gonzalo Tamagnini – Desquiciado Wines
“En nuestros tintos hay mucha heterogeneidad según el terroir, porque hubo partes donde se sufrió mucho más las olas de calor y el clima un poco más seco, mientras en otros predominó la lluvia.
«Por suerte en Desquiciado pudimos cosechar a tiempo, un poco más temprano de lo normal. En nuestros malbecs hay varios puntos de madurez: era un año para hacer varias cosechas diferenciadas. Nosotros levantamos algunos terroirs que son para líneas medias un poco antes, casi unos quince a dieciocho días antes de los ciclos anteriores, lo cual terminamos con alcoholes en 13 o 12,8 grados, lo cual está bueno porque la tendencia del mercado también nos obliga a tener bajo alcohol, así que para nosotros fue óptimo. Hubo mucha frescura, algunos verdes en la boca, pero después de las fermentaciones malolácticas se suavizaron.
«Si nos dirigimos desde el sur del Valle Uco hacia el norte y hacia la montaña (La Consulta, Altamira, por ejemplo) pudimos cosechar uvas con madurez polifenólica y colores muy buenos. El balance acidez-pH-polifenoles estuvo bien, no se pudo trabajar con racimo entero así que casi todo fue despalillado. En las líneas top, que esperamos un poco más, arriesgándonos pero buscando más madurez fisiológica, notamos pérdida de acidez pero no aumento de los azúcares, por lo que decidimos levantar.
«Rescato las bocas profundas y la tanicidad alta que esta vendimia le ha dado al malbec. Intuyo que los taninos estaban un poco verdes, porque cosechamos bastante antes. Habrá que esperar a la barrica para ver si podemos polimerizar y ablandar un poco los vinos. Serán ejemplares de mucha boca, de cualquier manera. Mucha estructura y color.
«En general elaboramos un 40% menos que otros años, lo cual nos permitió también hacer más investigaciones, más micro vinificaciones y tener más tiempo. Nuestros vinos naturales y de baja intervención salieron con una muy alta calidad”.
Andrea Ferreyra – Finca La Celia
“La vendimia 2025 de malbec en la zona sur del Valle de Uco se caracterizó por un anticipo en la madurez de azúcares: diecisiete días en comparación con la temporada anterior y catorce días, si comparamos con el promedio de las últimas 6 temporadas (2019-2024) siendo la fecha más temprana en estos últimos años, según nuestros registros.
«Los vinos resultaron con marcada fluidez, con perfiles aromáticos de fruta roja y negra, buen balance polifenólico y acidez moderada”.
Fuente: Asociación Argentina de Sommeliers, por Manuel Recabarren (especialista en gastronomía y Ciencias de Alimentos)