Según los datos de aduanas, analizados por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv), el comercio mundial de vino subió un ligero 1,6% en volumen durante el primer semestre de 2024 (respecto 2023) hasta alcanzar los 49 millones de hectolitros, pero cayó un 3,5% en valor para quedarse en € 17.117 millones. De los € 620 millones de diferencia entre 2023 y 2024, € 590 millones corresponden a las pérdidas registradas por Francia. Los precios medios han disminuido un 5% marcado por la caída de la facturación de vinos envasados, espumosos y Bag in Box, y el crecimiento del granel.
El comercio mundial de vino en el primer semestre del 2024 presenta un ligero aumento del volumen del 1,6% pero con caída del valor (-3,5%) debido principalmente a la mala marcha de las exportaciones de Francia (-9,7%). De los 620 millones de euros que se perdieron en el semestre, 590 millones corresponden a la pérdida que registra Francia, que no llega a ser compensada por las ligeras subidas de Italia, España, Chile y, con mucha más fuerza, de Australia.
Lo que se ha perdido, por lo tanto, en este periodo es sobre todo valor de ventas. Los precios medios han disminuido un -5%, pasando de 3,67 €/l en el primer semestre del 2023 a los 3,49€/l del primer semestre del 2024. Pérdidas en valor que se explican, tanto por quienes pierden (sobre todo Francia, que es quien exporta vinos de mayor valor), como por las tipologías de vino que presentan diferentes evoluciones, con caídas importantes en la facturación de vinos envasados, espumosos y BiB, mientras crecieron las ventas de vinos a granel.
Los 11 principales exportadores mundiales muestran una evolución ligeramente positiva en volumen, pero más negativa en valor. Como ya se mencionó, Francia en términos absolutos es quien lidera las pérdidas. Italia, España y Chile mejoraron levemente; y Australia que, a raíz del fin de sus dificultades en China, muestra un notable crecimiento que contrasta con las cifras negativas anteriores, mientras que o Nueva Zelanda, Alemania y Argentina disminuyen sus exportaciones.
Un primer semestre de comercio mundial del vino ¿bueno o malo?
Que en el primer semestre del año 2024 se hayan vendido mundialmente 49 millones de hectolitros por valor de 17.117 millones de euros supone una caída en valor y ligero crecimiento del volumen con respecto al mismo periodo del año anterior. Pero en comparación con los primeros semestres de otros años, en términos de valor, el dato de este primer semestre significa que llevamos ya dos años de pérdidas en igual período, tras la remontada espectacular del 2021 y 2022, que siguió al hundimiento del 2020.
Ahora bien, visto en perspectiva, son datos de seis meses todavía superiores a los registrados antes de la pandemia. En volumen, las ventas en el primer semestre de cada año son más erráticas y rondando los 50 millones de hectolitros, por lo que la línea parece mucho más estable de lo visto en valor. A medio plazo, por lo tanto y si hiciéramos caso omiso tanto de la crisis de la Covid, como de su posterior recuperación, lo que surge es la misma tendencia que ya se venía observando anteriormente: estabilidad del comercio mundial en volumen y crecimiento paulatino en valor. Lo que durante un tiempo se llamó tendencia a la “premiumización” del vino y que luego ha sido también afectada por la inflación de los años 2021 y 2022.
Por tipo de vino
Las exportaciones mundiales de vino en este primer semestre del 2024 se componen, en volumen, de un 51,2% de vinos envasados (envases hasta 2 litros de capacidad no espumosos), algo más de un tercio de vinos a granel (34,3%), apenas un 10% de vinos espumosos y muy pequeños porcentajes de vinos en bag-in-box y mostos (3,8% y 0,9% respectivamente del volumen total). Las proporciones cambian de forma importante en valor, por los diferentes precios medios a los que se vende cada categoría de vinos. En euros, los vinos envasados superan los dos tercios del total (68,3%), casi el 22% son vinos espumosos (que doblan su cuota en litros) y apenas un 7,5% supone la facturación de vinos a granel.
Es el vino espumoso el que más pierde en valor, con caída de un 8,3% y pérdida de casi 340 millones de euros en seis meses. Pero son los vinos envasados no espumosos los que lideran las pérdidas en litros, con caída de 32 millones (-1,3%) y cae también el BiB que se mantenía muy estable o en ligero crecimiento estos últimos años.
Por el contrario, la subida de ventas de vinos a granel, en un 5,6% en volumen y más de 88,6 millones de litros compensa sobradamente las caídas de otros productos en volumen, aunque no en valor, los 112 millones de euros que se facturan de más en esta categoría de vinos a granel no logran equilibrar las pérdidas de más de 300 millones registradas tanto en espumosos como en envasados.
Evolución muy destacable en términos relativos ha tenido en este periodo el mosto, que ha más que doblado sus ventas en el semestre e incluso aumentado un 30% la facturación pese a la pérdida de valor unitario; y ello debido principalmente a las fuertes ventas de mosto español a Italia.
Por países proveedores
Pierden ventas Francia, Alemania y Argentina, con fuerte subida de Chile, pero a precios inferiores
Los 11 principales proveedores representan el 86,4% de la exportación mundial de vino en valor y en volumen. Y son los mismos en ambas clasificaciones con la excepción de Canadá, que se cuela entre los mayores exportadores mundiales en volumen, por delante de EEUU y Argentina, pero muy especialmente enfocada hacia ventas de muy bajo valor a los propios EEUU.
En este primer semestre del 2024 cayeron las ventas en valor de cuatro de ellos (Francia, Nueva Zelanda, Alemania y Argentina) pero aumentaron las de los 7 restantes, destacando muy especialmente el fuerte crecimiento registrado por Australia en euros (+27,5%), la buena marcha de EEUU y Sudáfrica (+6,8% y +5,3% en el semestre) y las cifras positivas, pero más suaves de Italia, España, Chile y Portugal (entre el 1% y el 3%).
En volumen son tres los productores que reducen sus ventas: Francia, Alemania y Argentina, con Nueva Zelanda consiguiendo una ligera subida, a precios sensiblemente inferiores en euros (-7,7%). En este caso, en litros, es Chile quien destaca respecto de los demás, con una subida en el semestre del 14,1%, por encima de Portugal y EEUU (sobre el +8%) y bien por encima de los crecimientos más suaves del resto de países exportadores.
Las diferencias entre evolución en valor y en volumen reflejan los cambios que se producen en los precios medios. En el semestre, la caída global del precio medio de las exportaciones mundiales de vino es del 5%, pero la supera lo ocurrido en Francia (-7,4%) y en Chile (-10,5%). Caen también los precios medios de las ventas de Nueva Zelanda, EEUU y Portugal –entre los 11 primeros exportadores mundiales–, se mantiene los precios de Alemania en los 3,19 €/l y suben, sin embargo, los precios medios de Italia y España (menos del 1%) y muy fuertes los de Australia en euros (+21,8%).
Francia se desploma mientras Italia y España se mantienen
Los tres principales proveedores mundiales de vino, Francia, Italia y España, suponen el 55,8% de todas las exportaciones mundiales en volumen y el 63% de la facturación total.
Solo Francia es casi un tercio de esta facturación, y es la que tuvo mayor caída, en solo seis meses perdió 589 millones de euros, para quedarse en unas ventas de 5.475 millones, dejándose un 9,7% en el camino. Más suave es su caída de exportaciones en volumen, donde pierde cerca de 17 millones de litros (-2,6%) para quedarse en 639 millones en el semestre. Su menor facturación no se explica tanto por perder ventas, como por la baja de precios medios, cayendo 7.4% hasta situarse en 8,56€/l, que es más del doble del precio de cualquiera de sus seguidores, pero notablemente inferior a los más de 9€/l que había alcanzado en 2023.
Nada que ver tienen en este semestre las evoluciones de Italia y España con la de Francia. Ambos crecieron moderadamente en este periodo, un 3,2% y 2,2% respectivamente en valor y un 2,4% y 2,1% en volumen. Con precios medios que en ambos casos se mantiene muy estables, Italia los sube un ligero 0,8% y España apenas el 0,1%, manteniéndose en niveles muy diferentes, de 3,67€/l en el caso italiano y de 1,43€/l en el español.
En términos absolutos, Francia se sitúa en los 5.475 millones de euros en el semestre, seguido de Italia con 3.886 millones y España con 1.512 millones. Los tres muy lejos del cuarto en la clasificación, Australia – que supera en el semestre a Chile – con 756 millones de euros tras la gran subida que registra en este periodo. En volumen, empatan Italia y España con 10,6 millones de hectolitros cada uno, muy por delante de Francia que apenas alcanza los 6,4 millones y de Australia que se sitúa en 3,1 Mhl. Portugal, Sudáfrica, Nueva Zelanda, Canadá y EEUU superan todos el millón de hectolitros vendidos en seis meses, con argentina cerrando los primeros lugares con 0,8 millones.
Por tipo de vino y país proveedor
Francia y sus satélites sufren una fuerte caída de ventas de espumosos
Dentro del vino espumoso destaca la caída de las ventas francesas. La categoría pierde un 8,3% en valor pese a mantener sus ventas en volumen (-0,1%) y esto se debe a la caída de sus precios medios (-8,2%). En términos absolutos, las ventas de vinos espumosos mundiales en los seis primeros meses del año se han mantenido en los 483 millones de litros, con una leve baja, pero sus precios cayeron de 8,45€/l a 7,76€/l en comparación con el primer semestre del año pasado, generando una caída de la facturación de 30 millones de euros, para situarse en 3.743 millones.
Y dentro de esta evolución general de la categoría de vinos envasados, Francia es la líder indiscutible; por su posición en el ranking de ventas, como también por protagonizar la fuerte caída de este periodo. De los 339 millones de euros que se pierden en estos seis primeros meses del año, 328 M€ corresponden a la pérdida de ventas francesas, imposible de ser compensada con las subidas de 70 millones de euros de Italia o la mucho menor de apenas 1,5 M€ de espumosos españoles. Francia pierde un 15% de su facturación en espumosos en seis meses y cae de la barrera de 4.000 millones de euros en el semestre a 3.743 M€.
Italia con un fuerte crecimiento del 6,9% se consolida bien por encima de los 1.000 millones de euros en el semestre (1.079 M€) y España se mantiene sobre los 232 millones en seis meses. Muy lejos quedan los 170 millones de euros que factura Singapur, mayoritariamente con Champagne francés vendido sobre todo a Japón, pero que también caen un 5%, así como las fuertes pérdidas que registran Bélgica, Letonia, Reino Unido y Lituania, todos ellos también en gran medida por reexportación. Es decir, caen las ventas de espumosos franceses, tanto las enviadas directamente desde Francia como las de sus satélites.
Pérdida de ventas que también se da para Francia en términos de volumen, aunque de forma mucho más suave y, en este caso, acompañada también de España. En litros y botellas, los espumosos franceses cayeron un 8,3% hasta los 88 millones de litros, mientras que las ventas de espumosos españoles caen un 7,4%, para quedar en 71,4 millones.
También en volumen destacan las caídas de Letonia y Lituania, Singapur y Alemania. Frente a todos ellos, crecen saludablemente las exportaciones italianas de vinos espumosos un 10,6% para alejarse más en el indiscutible liderazgo de la categoría y situarse en 252 millones de litros en seis meses, con lo que casi triplica las ventas de espumosos franceses. Muy lejos de los primeros puestos, Australia también aumenta sus ventas de vinos espumosos, un contundente 15% en el semestre, para alcanzar los 5,4 millones de litros.
Francia y España pierden ventas de vino envasado frente al leve crecimiento de Italia
Vino envasado: También en esta categoría es Francia quien lidera la pérdida de exportaciones durante el primer semestre del año. De los 32 millones de litros que pierde la categoría, Francia se deja 17,2 millones. Pero, más grave aún, es la pérdida que deja en valor, de los 388 millones de euros que se pierden de ventas de vinos envasados en total, Francia perdió 261 millones. En esta ocasión España acompaña a Francia en las pérdidas, aunque de forma más suavizada, cayendo un 1,5% en valor y un 1,4% en volumen (14 millones de euros y 4,5 millones de litros).
Bajan también las ventas de Nueva Zelanda (-13% en euros) y más suavemente las de Alemania y Argentina. Caídas, todas ellas, que no logran ser compensadas en este caso por la buena marcha de Italia (+2,1% en valor y +2,4% en volumen), ni la de Chile, ni la fuerte subida que registra en este periodo Australia, que aumenta su facturación un extraordinario 40% en euros y sus ventas en volumen un 15,3%, con revalorización importante del precio medio, todo ello gracias a la reapertura del mercado chino para los vinos australianos a partir de marzo de este año.
Contrariamente a lo que ocurre en las categorías de más valor, en BiB son las ventas francesas y españolas las que crecen frente a caída italiana
Bag-in-box: Al contrario que en las dos categorías anteriores, en el formato bag-in-box (o en envases de entre 2 y 10 litros de capacidad) suben las ventas de Francia y España y caen las italianas. España ha pasado a liderar con claridad la categoría en volumen, con ventas de 35 millones de litros en el semestre, se sitúa muy por encima de los 25,6 millones de Francia o los 22,8 millones de Italia. No así en valor, donde los 77,7 millones de euros facturados por Francia y los 53,2 millones de Italia todavía superan con nitidez los 45,5 millones de euros facturados por España.
En el semestre, Francia mantiene su facturación (+0,9%) pese a subir con fuerza sus ventas en litros (+6,7%) lo que implica un menor costo por unidad. España sube en la misma proporción que Francia en volumen (6,7%) pero consigue facturar más (+7,2%) gracias a una ligera mejora de su precio. Por el contrato, Italia reduce su facturación un 10,4% y sus ventas en volumen un 5%.
Destacan también las pérdidas que registran en este formato las ventas de Alemania (por encima del 10% tanto en valor como en volumen) y las mucho más abultadas de Australia, EEUU y, sobre todo Nueva Zelanda, que pierde un 74% de sus ventas en BiB y le suponen una caída del 75% en su valor. Esta evolución tan distinta entre productores transmite la sensación de que el mercado del BiB se estuviera concentrando, con unos apostando claramente por la categoría mientras otros casi la abandonan. Una categoría, por otra parte, en la que la subida de ventas españolas viene produciéndose desde el inicio de su identificación estadística en 2017, posiblemente como proceso de desintermediación de las ventas que anteriormente realizaba Alemania con vino re-exportado.
España se reafirma como líder del vino a granel, pero son Chile y Nueva Zelanda quienes más crecen
Granel: en este primer semestre del 2024 se ha vendido más granel, pero, sobre todo, más caro. La categoría ha crecido en un 5,6% en volumen hasta los 16,8 millones de hectolitros en seis meses, pero se ha revalorizado un 9,6%, hasta los 1.280 millones de euros. En términos absolutos ha aumentado en 88 millones de litros y en casi 112 millones de euros, por el crecimiento de sus precios medios (+3,8%). Entre los mayores productores mundiales son España, Chile y Nueva Zelanda los que tiraron del carro en este período. España, mayor exportador mundial de vinos a granel, tanto en valor como en volumen, aumenta sus exportaciones apenas un 0,7% en litros, pero un 9,3% en euros. Suma 24,9 millones de euros a su facturación para alcanzar los 291,3 M€ en seis meses.
Le sigue Nueva Zelanda, con 168,7 M€ que sobrepasa a Italia, gracias a un notable crecimiento del 35,8% en su facturación, frente 4,7% de los italianos. Este incremento se debe a su precios medios que estuvieron por encima de los 2,60€/l, pero también a un extraordinario crecimiento del 43,6% en volumen. Con estas variaciones, Nueva Zelanda no sólo se convierte en uno de los principales actores del vino a granel mundial, sino que el granel pasa a suponer una parte esencial de sus exportaciones, alcanzando el 47% de su volumen.
Chile también aumenta sus exportaciones de vino a granel con más fuerza en volumen que en valor, pero hasta el punto de que, en litros, sube un 20,1% (casi 4 millones de litros, hasta situarse en 159 millones en seis meses), mientras que disminuye su facturación un 3,9%, lo que indica una notable reducción de su precio medio de venta. Posiblemente en este caso, el fuerte retroceso de las exportaciones chilenas de vino en 2023 haya generado una necesidad de sacar mucho vino por esta vía, incluso a costa de precios sensiblemente inferiores.
Italia, por su parte, mantiene también en esta categoría una evolución más moderada y estable, con una ganancia en euros del 4,7% hasta los 156,2 millones, pese a sufrir un ligero retroceso en volumen del -5,4%. En este caso, vende menos, pero lo vende mas caro, como pudiera derivarse razonablemente de una cosecha del 2023 muy escasa y, por lo tanto, al contrario que en el caso de Chile, con menos vino disponible.
Canadá mantiene sus exportaciones de granel más o menos constantes, pero a menores precios, Sudáfrica las aumenta ligeramente y Francia también crece en litros, pero facturando menos. Entre los vendedores de menor tamaño, son notables los crecimientos que experimentan EEUU, del 31% en volumen y del 43% en valor, y Portugal, que incrementa sus exportaciones de granel un extraordinario 45,5% en litros, aunque solo un 14,6% en euros. Fuertes variaciones, en muchos casos que dependen, en esta categoría, no solo de cómo evolucione la demanda, sino también de las disponibilidades de vino de cada país productor y la necesidad o no de sacar inventarios.
España y Francia duplican en este semestre sus exportaciones de mosto
Mosto: capítulo especial merece la evolución del mosto y jugos de uva. Se trata de una categoría que participa con apenas el 0,3% de la facturación total y el 0,9% del volumen. Pero se ha más que dupli- cado en el primer semestre en volumen (+129%) y ha crecido un 30% su facturación, por lo que suponen un nicho de negocio de gran interés para quienes operan en él. En el semestre, la exportación de mostos y jugos de uva ha pasado de 20 a 45,4 millones de litros y de 43 a 56,1 millones de euros. Y este crecimiento se ha debido, en gran medida a las exportaciones de España –particularmente a Italia este año– y en menor medida de Francia.
España ha más que duplicado sus ventas de mosto con crecimientos del 120% en valor y del 226% en volumen: de 34,3 a 75.6 millones de euros y de 25 a 81,6 millones de litros, con pérdida por lo tanto de su precio medio. Francia, por su parte, tercer mayor exportador mundial tras Italia, también ha más que duplicado: de 5,3 a 13,8 millones de euros en seis meses y de 2,4 a 5,4 millones de litros. Pese a ello, Francia queda aún lejos de las exportaciones italianas que, pese a sufrir una caída del 27,6% en su volumen, aún ostentan la segunda plaza de la clasificación con 13,7 millones de litros. Como también la sigue ostentando en términos de valor, pese a una caída del 21,4% en el semestre que le lleva a facturar 30,7 millones de euros (menos de la mitad de España). Mucho más lejos de los principales productores y exportadores mundiales se sitúan otros países como Hungría, Chile, Países Bajos, o Portugal de los que, Hungría y Chile sufren pérdidas notables en el semestre, mientras que Portugal y Grecia multiplican sus escasas ventas de mosto.