Con 450 bodegas, una producción de vino de 1.200 millones de litros al año y 756.000 hectáreas de viñedos -3ra. en el ránking de superficie después de España con 961.000 ha y Francia con 797.000-, China acaba de sumarse como miembro pleno de la Organización Internacional de la Vid y el Vino (OIV), con lo que puede participar plenamente en las decisiones a la par de los otros 51 miembros de la organización, que nuclea al 95% de los productores globales de vino. (En la foto principal, Wang Li, vicegobernador de la Región Autónoma de Ningxia y John Barker, director general de la OIV).
El pasado 14 de noviembre de 2024, la Organización Internacional de la Vid y el Vino (OIV) aceptó formalmente la solicitud de adhesión presentada por China. La solicitud había sido remitida por el Ministerio de Agricultura y Asuntos Rurales de la República Popular de China el 14 de mayo de 2024, a través de la Embajada de China en Francia, país donde la OIV tiene su sede. Entonces se inició un periodo de consulta estatutaria de la OIV de 6 meses, que finalizó con éxito. Aunque sólo falta una ratificación formal de las autoridades chinas, los representantes del gran país asiático ya participan plenamente de los trabajos de la OIV.
China, con la tercera mayor superficie de viñedos plantados a nivel mundial, se posiciona como un actor clave en el panorama mundial del vino. Además, es el mayor productor de uva de mesa del mundo y ocupa el 8° lugar en consumo de vino. La adhesión de este país aporta un importante incremento de la representatividad de la OIV, que ahora cuenta con 51 países miembros y abarca el 85% de la superficie de viñedos plantados a nivel mundial.
Este movimiento no sólo refuerza la posición de la OIV como organismo de referencia para el sector, sino que también refleja el creciente interés de China en fortalecer su presencia e influencia en la industria vitivinícola internacional. La incorporación de China abre nuevas perspectivas para la cooperación técnica, la investigación y el desarrollo de políticas que respondan a las dificultades actuales y futuras del sector.
Una potencia vitivinícola mundial
China tiene aproximadamente 450 bodegas que producen 1.200 millones de litros de vino al año. El país se encuentra entre los 10 principales productores de vino del mundo y uno de sus principales mercados.
China tiene 70 regiones vinícolas protegidas con bodegas centenarias, viñedos enormes y proyectos ambiciosos. El país está apostando por el desarrollo del sector del vino y el enoturismo.
En cuanto a la superficie de viñedos, China tiene 756.000 hectáreas, lo que lo coloca en tercer lugar a nivel mundial, después de España y Francia.
China ocupa actualmente el 8° lugar entre los mayores consumidores de vino del mundo (6,3 millones de hectolitros). Se espera que la incorporación de China fomente una mayor colaboración e intercambio de experiencia entre China y otros estados miembros de la OIV, apoyando el desarrollo de normas mundiales sobre vinos y la investigación.
Fundada el 29 de noviembre de 1924 en París, Francia, la OIV es un organismo de referencia en el sector vitivinícola internacional, conocido como el proveedor de normas internacionales. Es una de las organizaciones internacionales reconocidas y publicadas por la ISO, y las normas de la OIV son adoptadas por la Organización Mundial del Comercio (OMC) para asuntos relacionados con el vino.
La organización estudia cuestiones científicas, técnicas y económicas relacionadas con el cultivo de la uva, la producción, el almacenamiento, la venta y el consumo de vino, zumo de uva, uvas de mesa y pasas. Más del 95% de los países productores de vino del mundo participan en la organización, que incluye ahora 51 países miembros, con España, Francia e Italia a la cabeza y destacada participación de Argentina.
Ver nota Enolife del 22/7/24: China se une al club de los grandes del vino: será el miembro 51 de la OIV desde noviembre
Fuentes: OIV, Vinetur y https://vino-joy.com