Este sábado 2 de marzo se realizará el acto central de la Fiesta Nacional de la Vendimia 2024 en Mendoza, en el anfiteatro Frank Romero Day de la capital provincial. El espectáculo, que se repetirá el domingo 3 y el lunes 4 en el mismo lugar, consiste en la puesta en escena de la obra titulada «Coronados de historia y futuro», con dirección de Pablo Perri y guion de Silvia Graciela Moyano. En esta nota, producida por el equipo de expertos comunicadores de la Subsecretaría de Comunicación Social, Prensa y Protocolo del Gobierno de Mendoza, se resume la historia que se desarrollará sobre el escenario. Una guía útil para espectadores curiosos que quieran disfrutar más conociendo la epopeya de Pedro, el personaje principal.
La base argumental está precedida por una breve historia audiovisual que evoca la infancia de Pedro, el personaje central. Según describe la autora del guion, Silvia Graciela Moyano, «Coronados de historia y futuro» es «una invitación para reflexionar acerca de algunos interrogantes en torno a elementos esenciales de nuestra identidad. Para ello el espectáculo se vale de un orfebre, quien desde pequeño ha sido llamado a cumplir un destino muy particular: será desafiado a construir un objeto que represente a su pueblo».
Pedro emprenderá un viaje hacia el pasado y el futuro en busca de los elementos necesarios para concretar su obra. Profundizará en sus raíces vendimiales y en las posibilidades infinitas de su gente. En su recorrido, será acompañado por ciertos personajes, quienes lo interpelarán sobre de la necesidad de perseverar frente a las dificultades y acerca de la vigencia de los valores populares. Es allí cuando se produce el quiebre: la aparición de un nuevo personaje, que simboliza la desesperanza y la oscuridad, le hará creer a Pedro que sus intentos son vanos. Finalmente, el protagonista de esta historia recupera la fe y las fuerzas necesarias para terminar su trabajo.
«Somos coronados por un pasado que nos identifica y nos da sustento, un presente que nos define y un fututo al que aspiramos y creemos merecer», reflexiona la guionista.
Los ejes conceptuales
Continúa la descripción de Moyano: «Todos somos un poco orfebres: tenemos en nuestras manos la posibilidad de construir la obra más bella, que es nuestra propia vida y la de los que comparten nuestro camino. Podemos elegir los materiales para hacerlo, los más nobles, deslumbrantes en belleza, inigualables en valor».
Al igual que el orfebre de la historia -revela la escritora-, los espectadores serán invadidos por momentos de incertidumbre, desesperanza y cruel insomnio. Pero, al mismo tiempo, una voz plena de fuerza y esperanza guiará a Pedro a cumplir con su destino. Una voz que persevera en su espíritu, diciéndole que sí, que se puede lograr. «La voz de la inspiración nos hace invencibles», es el mensaje.
«Un verdadero orfebre tiene la mirada puesta en el pasado, en el presente y en el futuro. Sabe de dónde viene y a dónde quiere ir. Su tarea a veces es solitaria, sin embargo, necesita de otras miradas y otras manos. Nuestros hombres y mujeres, orfebres de la viña, conocen la belleza que existe en las manos laboriosas, en la fe que los anima, en la tarea compartida hombro a hombro. Todos poseemos alguna de las infinitas formas de la belleza. Todos somos dignos de ser ‘Coronados de historia y futuro'», concluye la guionista.
Cuadro por cuadro
“Coronados de historia y futuro” está compuesto por 11 cuadros, distribuidos en 4 actos que son:
Acto 1, presentación
Preludio: Anuncia la grandeza de Mendoza mediante imágenes proyectadas y el texto que acompaña.
Cuadro I. La desesperación. Presenta el personaje principal: un orfebre llamado Pedro. En una breve precuela, una historia audiovisual, se lo ve de niño dando indicios de su destino como artista. Ya adulto, el pueblo le ha encomendado la inmensa tarea de crear un objeto que lo represente. Realiza varios intentos fallidos y ello lo sumerge en una profunda desesperación.
Cuadro II. Los tres mandatos. En este momento aparecen tres personajes: el insomnio, la incertidumbre y la inspiración. Cada uno de ellos se presenta con sus peculiaridades e idiosincrasia. Todos forman parte indiscutible de la vida. Luego, interactúan sorprendiendo a Pedro. Lo animarán a buscar los materiales esenciales para su obra y a trabajar en conjunto con otros.
Acto 2, El pasado
Cuadro III. El agua inspiradora. Está presente el agua, con todo lo que ella significa y representa para la vida: alimento del paisaje, del cuerpo y del alma.
Cuadro IV. La semilla fundadora. Los pueblos originarios hacen su ofrenda a Pedro para su obra: semilla y agua, el origen indiscutible de la cultura del trabajo.
Cuadro V. La montaña de la Libertad. Se produce un encuentro con el General San Martín, quien se pone al servicio de La Gran Obra con su vasta experiencia en liderazgo y la humildad que solo los verdaderos héroes pueden esgrimir.
Cuadro VI. Las viñas de la identidad. Pedro recuerda su infancia y a sus padres en la viña. Se ve a sí mismo recolectando racimo a racimo la uva. Una añoranza feliz lo invade y lo traslada a una atmósfera mágica. Se suceden imágenes de festividades en el pasado. Los trabajadores culminando su tarea, eligiendo a la muchacha más guapa, el baile, la alegría del vino nuevo.
Acto 3, el presente
Cuadro VII. El vino del presente. Pedro vuelve de su viaje al pasado y se encuentra con una Mendoza nueva y pujante. Se hace referencia a todos los habitantes de nuestro suelo, de buena voluntad y deseosos de trabajar, quienes hicieron posible el progreso.
Cuadro VIII. El vino y el turismo. La noche. El tango. La pasión, que ponemos de manifiesto en cada una de las acciones cotidianas. La fuerza y la esperanza puesta en los niños y en los jóvenes.
Cuadro IX. El desaliento. Este oscuro personaje provoca el momento del quiebre: amenaza con la ausencia de la vid, del vino y de la alegría. Amenaza con destruir los sueños de la vendimia, con la piedra y la helada. Pedro cae en un desánimo total. Los tres personajes que lo acompañan siempre lo animan a seguir su camino con perseverancia.
Cuadro X. La fe puesta en la esperanza. Se pone en valor la fe del pueblo como una tradición identitaria. Aparece la Virgen del Carmen de Cuyo, Patrona de los Viñedos, que todo lo puede.
Acto 4, el futuro
Cuadro XI. La coronación del futuro. Pedro culmina su obra: una corona. Y con ella designa al Pueblo, verdadero soberano de esta tierra.
Equipo artístico y técnico
- Autora del guion: Silvia Moyano
- Dirección General y Puesta en escena: Pablo Mariano Perri
- Producción Ejecutiva: Walter Ulloa
- Dirección Musical: Julio “Paito” Figueroa
- Dirección orquestal: Alicia Pouzo
- Dirección coreográfica: Carlos Ulloa
- Dirección actoral: Javier “Griego” Falcón
- Dirección audiovisual: Gustavo Lenarduzzi
- Diseño escenográfico: María Claudina Gomensoro
- Jefe técnico: Marcelo Pablo Garay
- Cajas lumínicas: Sergio Aranguez Benegas
- Jefa de vestuario: Elsa Blanco
- Jefe de traspunte: Sergio Ávila
- Jefe de utilería mayor y menor: Lucas Grasso
- Efectos especiales: Guillermo Rodríguez
- Asistente coreográfica folclore 1: Jessica Arancibia
- Asistente coreográfico folclore 2: Juan Eduardo Teves
- Asistente coreográfica contemporánea: Graciela Ruiz
- Asistente en sonido: Emanuel Acuña
- Asistente en iluminación: Enrique Poblete
- Asistente de vestuario: María Cristina Gómez
- Asistencia de audiovisual: Walter Sastre
- Asistente de dirección: Cristian Arce
- Asistencia de puesta en escena: Stella Vera
- Maquillaje: Salvador Romano
- Vestuario especial: Sergio Sotelo Montolla
- Asistencia de escenografía: Víctor Carrión
- Asesoría y coordinación de producción: Mariano Morales
- Monitores Folclóricos: Federico Esper Eder, Liz Santander, Gisela Sanita Guiñazú y Agustín Morales
- Monitor de folclore de adultos: Benito González
- Monitora de folclore con discapacidad: Adriana Videla
- Monitores de contemporáneo: Daniela Moscardelli, Florencia Aguirre y Matías Ortiz
- Monitor de teatro con discapacidad: Gustavo Muñoz
- Monitores de teatro: Paula San Martín, Mariela Svachca, Lorena Membrives y Lucas Chacarrias
Fuente: Gobierno de Mendoza