Según un reciente informe del Observatorio Vitivinícola Argentino (OVA), con datos propios y del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), crecieron las ventas de los establecimientos elaboradores, pero un alto porcentaje de esas botellas sigue en las góndolas de supermercados y vinerías porque los consumidores finales aún no los adquieren al mismo ritmo que en 2021. Es clave para interpretar estos datos que en ese período interanual los precios del vino aumentaron un 70%.
Las compras de vino directas en góndola reflejaron un descenso durante el primer trimestre de 2022 aunque el vino que salió de las bodegas para los centros de distribución creció y su precio escaló un 70%. A continuación replicamos el informe publicado el 19/5 por el Observatorio Vitivinícola Argentino.
El OVA obtuvo datos de la consultora Scentia sobre los números de consumo en el mercado interno argentino, en este caso, del canal tradicional (unos 18.000 locales entre los que se destacan los comúnmente llamados «chinos», supermercados y demás autoservicios; es decir, no están contemplados los almacenes y quioscos) y para las categorías vinos finos, comunes y espumantes.
Aunque los datos de esta consultora son derivados de una muestra de alrededor del 40% del mercado (y que no contempla el canal HoReCa: Hoteles, Restaurantes y Caterings, ni tampoco las vinerías), es decir que no nos dan el total del consumo, son un aporte fundamental para ver cómo se comportan las ventas de la categoría. El hecho de que haya contraste entre los despachos y el consumo concreto significa que el vino llegó a los centros de consumo y está disponible para ser vendido pero aún no ha sido comprado.
El precio promedio que mostró este trimestre fue de unos $400 por litro, un 70% mayor al del primer trimestre del año pasado, que fue de unos $235 por litro.
Rangos de precios
El consumo total del primer este trimestre, en precios reales expresados en pesos de marzo del 2022, se ha concentrado en el rango de los 100 y 200 pesos por litro en un 27%, mientras que el 84% del consumo estuvo en el rango de los 100 a 600 pesos por litro.
Para realizar una comparación sobre los rangos de precios, fueron deflactados los precios y se los puso en términos reales expresados en marzo de 2022, para que esta variable no se vea afectada por inflación. Entonces, para consumir un litro de vino, a los precios de marzo de 2022, se necesitaban $400, mientras que para marzo de 2021 se hubieran necesitado $365.
Si profundizamos por la categoría con mayor consumo, que fueron los vinos finos con 70% del total de la muestra, obtenemos que las compras se concentraron mayormente en el rango de los 300 y 200 pesos por litro, siendo este de un 27,3%, mientras que el 75% del consumo se concentró en el rango de los 100 y 600 pesos por litro.
Variedades
El malbec fue el vino varietal más consumido, con un 22,9% de participación en el relevamiento que arroja la consultora Scentia, lo que representó unos 45 millones de litros para este trimestre y unos 2,8 millones de litros menos que lo consumido el año anterior de este varietal.
Respecto del rango de precios (reales en pesos de marzo de 2022) en el que el vino malbec fue consumido, resultó ser el de los 400 a 500 pesos por litro a marzo, con 22,6%, mientras que el 76% del consumo de este vino varietal estuvo concentrado en el rango de los 200 a 700 pesos el litro. Lo llamativo es que si bien el consumo pareciera ubicarse en torno a los 400 y 500 pesos por litro, el 13,4% se concentró en vinos mayores a los $900.
Para resumir, podríamos decir que el vino consumido disminuyó un 5,9% respecto del primer trimestre del año pasado en el mercado argentino, mientras que su precio aumentó 70% respecto del mismo periodo. El grueso del consumo se ubicó en el rango de los 100 y 600 pesos por litro. La categoría más consumida fue la de los vinos finos con un 70% de la muestra, mientras que el varietal más consumido fue el malbec, donde su consumo se concentró entre los 200 y 700 pesos por litro.
Fuente: Observatorio Vitivinícola Argentina (OVA)