En Settecano, en la región vitivinícola de Emilia-Romagna, una falla en el sistema de cañerías de la bodega Cantina Settecani provocó, el 4 de marzo, que en lugar de canalizar el agua hacia la planta de embotellado, el vino comenzara a fluir en dirección opuesta, hacia las casas del pueblo.
En tiempos de cuarentena, litros de vino en la canilla de casa no vienen nada mal, sobre todo cuando no necesitamos un «conductor designado». Así amanecieron los habitantes de Settecano cuando al lavarse la cara en la mañana degustaron el inconfundible sabor del Lambrusco Grasparossa Castelvetro Premium.
La bodega local, Cantina Settecani, está conectada a la red pública de agua potable de la localidad, y el desperfecto de una de sus válvulas provocó el desvío del sagrado líquido de la bodega a las cañerías de los hogares.
El error fue detectado tan sólo una hora después, tiempo suficiente para disfrutar una «canilla libre» de un vino de $1.500 la botella. Nada menos que unos 1.000 litros fueron los que a los ojos de los lugareños se convirtieron en vino, como el milagro atribuido a Jesús hace más de 2.000 años.
El municipio local emitió una disculpa en Facebook por el «incidente». Pero ningún vecino se mostró molesto por lo ocurrido. Por el contrario, casi todos lo «tomaron» de manera festiva.
También la Bodega emitió su comunicado a través de las redes:
Por parte de la empresa responsable, Fabrizio Amorotti, gerente comercial de la bodega, afirmó que «no hubo impacto en la salud de las personas. Pedimos disculpas por las molestias, aunque mucha gente lo ha disfrutado», compartiendo por Twitter un video que se convirtió en el mejor testimonio de este original y gustoso suceso.
Y a pesar de la pérdida que este incidente pudo significar para esta «cantina», ellos mismos tomaron con humor el evento y lo utilizaron para una publicidad muy creativa:
Las redes sociales también hicieron eco del hecho: «Ahora, a ver que pueden hacer con los panes y los peces» o «¡Jefe, hoy no voy a trabajar que estoy embotellando vino en casa!» fueron algunos de los muchos mensajes de los usuarios en las redes.
Fuentes: Vinetur, Cantina Settecani y Comuna de Settecano.
