El 24 de octubre pasado, arqueólogos de la Universidad de Udine y sus pares de la Dirección de Antigüedades de Dohuk, en el Kurdistán iraquí, anunciaron el descubrimiento de una fábrica de vino a gran escala, con al menos 2.700 años de antigüedad, al norte del actual territorio de Irak, más precisamente en el sitio arqueológico de Khini. El hallazgo incluye 14 instalaciones para prensar las uvas, bajorrelieves esculpidos y un canal de riego de 9 kilómetros de largo.
Apenas un mes después de la difusión del descubrimiento de una fábrica de vino de 1.500 años de antigüedad en Israel, sale ahora a la luz otra, casi el doble de antigua, al norte de Irak, en el sitio arqueológico de Khini.
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Arqueólogos italianos y kurdos que estaban investigando el sitio encontraron unos enormes cuencos de piedra, esculpidos en roca blanca que, según el profesor de arqueología en la Universidad de Udine (Italia) Daniele Morandi Bonacossi, pertenecían a una especie de fábrica de vino industrial.
El especialista explicó que se encontraron 14 instalaciones que eran utilizadas para prensar las uvas y extraer el jugo para luego procesar el vino.
Irak representa la cuna de las civilizaciones de Sumeria, Acadia, Babilonia y Asiria, inventoras de los primeros tipos de escritura y asiento de las primeras ciudades sedentarias.
De acuerdo a las evidencias del hallazgo en Duhok, los artefactos encontrados datan del siglo VIII o principios del VII antes de Cristo y eran utilizados en la producción comercial de vino durante el dominio del rey asirio Senaquerib.
Además de este descubrimiento, que es el primero de este tipo en el país, se hallaron enormes bajorrelieves tallados en las paredes de roca de un canal de riego de casi 9 kilómetros de largo en Faida, también al norte de Irak.
Estos bajorrelieves datan de los reinados de Sargón II (721 a 705 antes de Cristo) y su hijo Senaquerib, y constan de 12 paneles de 5 metros de largo y 2 de altura decorados con técnicas escultóricas en donde se pueden contemplar dioses, reyes y animales sagrados que representan las 7 divinidades más importantes del panteón asirio. Según explicó Daniele Morandi Bonacossi, cada uno de ellos «representa al rey asirio rezando delante de los dioses».
Cabe destacar que si bien existen otros lugares con relieves en roca en Irak, especialmente en Kurdistán, según Bonacossi no llegan a ser tan grandes y monumentales como éste.
De los magníficos palacios y templos del reino de Sargón II, se conservaron varias esculturas de toros o frescos mostrados en el museo de Bagdad, pero también en el Louvre en París o en otros museos occidentales.
Fuente: AFP