Con voluntad de acero, lucidez y alegría de vivir, Martín Ferrer (23) gana su batalla contra la adversidad de haber nacido con parálisis cerebral. Cada paso y cada logro le exigen poner todo en juego, y nada le impedirá recibirse de ingeniero en Recursos Naturales en la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNCuyo, donde cursa el segundo año. Para bancarse los estudios y comprar el brazo mecatrónico que le brindará autonomía para alimentarse solo, en 2020 fabricó junto a dos amigos máscaras anticovid de plástico reciclado y ahora vende vinos de dos bodegas del Este mendocino. Su fortaleza fue premiada por la comuna de Junín, Mendoza, que lo incluyó en el programa Junín Punto Limpio, donde ahora diseñan su brazo con impresoras 3D y tecnología argentina. Esta es su historia, que merece ser contada, y su emprendimiento, que dan ganas de apoyar.
Por Lorena Mellone (lmellone@enolife.com.ar) y Pedro Straniero (pstraniero@enolife.com.ar)
Hace un mes, conocimos a través de las redes sociales un video en el que Martín Ferrer se presenta y promueve su emprendimiento personal de venta de vinos de las bodegas Tierra de Barros y Santos Lugares, ambas de Junín, Mendoza, con el objetivo de solventar sus estudios. Nos interesó su historia porque vimos que se trata de un joven entusiasta que, pese a sus limitaciones físicas, no para de lanzar y concretar ideas, no sólo por un interés personal sino en beneficio de la comunidad que lo contiene. Un tipo decidido y solidario, cuya fortaleza contagia. Por eso está aquí.
En 2020, antes de comercializar vinos, Martín, junto a sus amigos Marcos Solanilla y Matías Bertona, se puso a fabricar y vender máscaras protectoras de plástico reciclado, hechas con una impresora 3D. En ese momento, su finalidad era juntar fondos para comprarse en el exterior un brazo mecatrónico que le facilitaría, entre otras cosas, alimentarse con autonomía.
Y ese objetivo hoy se está concretando. No porque haya juntado los miles de dólares necesarios para adquirir esa costosa herramienta, sino porque, gracias a la gente de las bodegas que le proveen el vino, pudo contactarse con el programa Junín Punto Limpio, a través del cual hoy le fabrican acá en Mendoza el imprescindible brazo auxiliar.
El encargado de llevar adelante la construcción del brazo mecatrónico de Martín es Matías Martin (33), técnico en impresión 3D y experto en Gestión Ambiental, quien trabaja en el programa de la Municipalidad de Junín desde hace 4 años. Matías y un equipo de colaboradores están fabricando el brazo para donárselo a Martín. Ya en marcha este proyecto, los ingresos que ahora consigue Martín con los vinos son para sostener sus estudios y colaborar en la economía familiar.
Video en el que Martín promueve los vinos que vende:
Así cuenta su historia el propio Martín: «Durante 2020 trabajé para comprar el brazo mecánico para poder llevarme la comida a la altura de la boca… Pero por suerte después Marcos Arboit (de la empresa tecnológica Bonomini del Mercosur SA) y Marcela Moroncelli (de la Bodega Santos Lugares) consiguieron que en Junín lo fabriquen con materiales reciclables. Lo está haciendo Matías Martin desde el programa Junín Punto Limpio».
Como explica Martín en el video, él ofrece los vinos en diferentes packs, para regalos, eventos empresariales y particulares, envueltos en las cajas de madera confeccionadas por su amigo Damián, de la empresa Drevo SA (packaging en madera).
Según detalla el joven, los vinos vienen en cajas de madera (Chiz Malbec, de Zamora Wines y El Herrero Cabernet Franc, de Bodega Santos Lugares).
Para comprar los vinos se puede contactar a Martín a través de su Instagram: martin_ferrer_ok o al teléfonos +54 9 261 335 2290, o bien hacer el pedido a través del siguiente LINK
Estas son las fichas técnicas de algunos de sus vinos:
Malbec 2020
Origen viñedo: Uvas provenientes de Junín, Mendoza.
Altura viñedo: 690 msnm.
Cosecha: Manual.
Elaboración: Clásica.
Madera: 30% roble francés, durante 8 meses.
Notas de cata
Color: Rojo intenso, con reflejos violáceos.
Aroma: Frutos rojos y delicados toques de madera francesa.
Boca: Ciruela fresca, suave toque de vainilla por el aporte de la madera. Untuoso, largo, de taninos dulces y amables y de gran recuerdo.
Temperatura recomendada de servido: 16° a 18 °C
Maridaje: típicas comidas argentinas como empanadas, humita y nuestro clásico asado como también platos internacionales, pastas, pizzas, tamales o sushi.
Precio: Por caja de 6 $2.200 – Por unidad $400
Cabernet franc 2020
Origen viñedo: Uvas provenientes de Junín, Mendoza.
Altura viñedo: 690 msnm.
Cosecha: Manual.
Elaboración: Clásica.
Madera: Roble francés.
Notas de cata
Color: Rojo rubí intenso.
Aroma: Frutos rojos como cerezas y especias dulces que incluye la pimienta negra y notas delicadas de vainilla aportadas por la madera francesa.
Boca: Buen volumen, equilibrio y de taninos suaves con sabores que recuerdan a pimientos rojos y especias.
Temperatura recomendada de servido: 16° a 18 °C
Maridaje: Carnes rojas, pastas, quesos y sobremesas con chocolate semiamargo.
Precio: Por caja de 6 $2.100 – Por unidad $400
Cabernet sauvignon 2020
Origen viñedo: Uvas provenientes de Junín, Mendoza.
Altura viñedo: 690 msnm.
Cosecha: Manual.
Elaboración: Clásica.
Madera: Roble francés.
Notas de cata
Color: Intenso con tonos rojo rubí.
Aroma: Frutado con notas de pimienta y suave vainilla aportada por la madera.
Boca: Buen cuerpo, concentrado y de taninos amables. Final largo y persistente.
Temperatura recomendada de servido: 16° a 18 °C
Maridaje: Ideal para acompañar pastas con mariscos o salsa de tomates y platos a base de carnes rojas.
Precio: Por caja de 6 $2.200 – Por unidad $400
Qué es el programa Junín Punto Limpio
Junín Punto Limpio es una planta de recolección y reciclaje de plásticos para la elaboración de productos sustentables, como ladrillos, tejas, postes, mangueras, impresión 3D, luminarias led y paneles solares.
Desde 2012 al último conteo de este año, la planta Junín Punto Limpio ha reciclado 90.030.753 de envases plásticos, a los cuales han convertido en 250.000 ladrillos pet, 3.000 tejas aislantes, 8.000 palos de viña y 1.500 útiles escolares.
Para conocer más sobre este proyecto, conversamos con el técnico en impresión Matías Martin (33).
«Junín tiene el 97% de superficie cultivada -fundamenta Matías-, y los cauces de riego se tapan con los envases plásticos; ahora, esas botellas tienen un espacio para reciclaje creado por la Municipalidad local. En un principio, se prensaban y se hacían juegos didácticos para niños, para colocar en las plazas, pero después, a través de un proyecto de Daniel Azcurra, que es el jefe de planta actual, se empezó a triturar y hoy se hacen ladrillos para construccón de viviendas que son gratis para los habitantes de la comuna, a cambio de recolectar las botellas de plástico en contenedores y sumarse al programa Junín Punto Limpio».
«El proyecto fue creciendo –explica Matías- y hoy se reconvierten luces de sodio a led y se abrió el área donde yo trabajo, que es la de impresión 3D para innovación de productos: allí comenzamos a fabricar prótesis de brazos y piernas sin costo para los vecinos que lo necesitan, luego empezaron a llegar consultas para casos especiales de personas con discapacidad con una enfermedad muy particular, casos específicos, que no conseguían herramientas que los pudieran ayudar a manejarse«.
Según prosigue narrando Matías, Martín Ferrer llegó a Junín Punto Limpio de la mano de la Bodega Santos Lugares, cuyos propietarios le dieron sus vinos para vender, para que tuviese una salida laboral y así poder pagar sus estudios.
«Como esta empresa de vinos también es de Junín -aclara el técnico-, sus propietarios nos pusieron en contacto con él, para ver si podíamos ayudarlo de alguna manera; esto fue hace 15 o 20 días, y encaramos este proyecto del brazo, que ahora está en etapa de desarrollo; es algo que en Europa ya existe, pero que es muy caro de importar… Nosotros lo podemos hacer similar y con componentes locales, eso quiere decir que si el día de mañana se rompe algo, en cualquier ferretería se pueden conseguir los repuestos, y esto a largo plazo tiene mucho más valor que importarlo«.
«La mayor parte de los materiales -continúa Matías- es plástico en impresión 3 D, otros materiales, la parte eléctrica y electrónica, hay que comprarla. Programamos todo nosotros y después se procesa con láser, pero se diseña previamente en nuestra área, donde también nos acompañan un diseñador industrial e ingenieros mecatrónicos. Tenemos un equipo que desarrolla estos productos… La clave es hacerlo con los elementos que tenemos en Argentina.
Finalmente, Matías destacó que el programa Junín Punto Limpio fue creado por el ex intendente de Junín Mario Abed -hoy vice gobernador de Mendoza- y que está apadrinado por el gobierno provincial.