El Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) oficializó el reconocimiento como nueva Indicación Geográfica (IG) de Argentina al terroir de «Valles Templados», ubicada en el Sur de la provincia de Jujuy. La medida quedó establecida mediante la Resolución 28/2025, publicada en el Boletín Oficial el 2/9/25. La región se caracteriza por tener clima templado continental, con una altura que oscila entre los 700 y los 1600 msnm. Las condiciones favorecen el cultivo de uvas de baja carga polifenólica que resultan en vinos livianos, frescos, con menos alcohol y notas tropicales.
El 2/9/25 se publicó en el Boletín Oficial de la República Argentina la Resolución 28/2025 del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), que reconoce como Indicación Geográfica (IG) a los “Valles templados” para los vinos elaborados en esa región de la provincia de Jujuy.
La solicitud fue presentada por la Secretaría de Desarrollo Productivo del Ministerio de Desarrollo Económico y Producción de Jujuy, y tras cumplir con todos los requisitos legales y técnicos previstos en la Ley 25.163 y su Decreto Reglamentario Nº 57/2004, obtuvo la aprobación del organismo.
De acuerdo con los estudios realizados, la zona delimitada posee terruños con cualidades distintivas y aptitud para la producción de vinos de calidad, lo que motivó su reconocimiento. Además, no se registraron oposiciones durante el proceso de publicación de edictos en el Boletín Oficial ni en medios de amplia circulación en la región.
Con este reconocimiento, «Valles Templados» se suma al listado de regiones vitivinícolas argentinas con protección oficial, lo que permitirá a los productores de Jujuy identificar sus vinos bajo esta IG, aportando valor agregado y diferenciación en los mercados nacional e internacional.
Características de Valles Templados
La región de Valles Templados se encuentra ubicada geográficamente al sur de la provincia de Jujuy. La principal localidad es Perico, ubicada a los 24° 22´ latitud sur y 65° 07´ longitud oeste. Presenta características diferentes a la Quebrada, que lo hacen único para el cultivo de la vid: clima templado continental (precipitaciones y humedad ambiente medias), una altura sobre el nivel de mar que oscila entre los 700 y los 1600 m; amplitud térmica media (noche-día) entre los 18°C y los 32°C y gran proporción de días nublados durante la maduración de las uvas. Su nivel de precipitación anual oscila entre 700 y 1.200 mm, y los mayores aportes pluviométricos estacionales se encuentran en el período entre septiembre y febrero. Por su ubicación, el sur jujeño se encuentra entre dos cadenas montañosas en dirección noroeste sureste, siendo esta la dirección predominante de los vientos en el Valle.
Las aguas que irrigan el Valle Templado provienen de las contenciones construidas hace aproximadamente 90 años. Los mismos son los Diques La Ciénaga y Las Maderas. Las aguas son conducidas por sistemas de riego en una red organizada de canales y acequias. Los suelos son francos, francoarenosos y francos-arcillosos; en algunos lugares con gran cantidad de cantos rodados por ser un viejo lecho de río. La materia orgánica tiene contenidos que van desde 1,5 a 3% en algunos lugares y de profundidad y textura variable.
Algunas de las ventajas para producir uva para vino en la zona son el bajo riesgo de heladas, la cosecha temprana (enero, febrero), accesibilidad con caminos, mano de obra y maquinaria de la producción tabacalera. Las desventajas son los riesgos de granizo, y aún no se identifica como zona turística.
Las principales variedades plantadas son malbec, cabernet franc, cabernet sauvignon, merlot en tintas y sauvignon blanc, chardonnay y torrontés en blancas. A nivel experimental, se están plantando marselán y pinot noir en tintas y viognier en blancas.
Los vinos presentan una acidez natural que dan una sensación de frescura justa, poseen menos alcohol, y las frutas llegan al final de la maduración, por lo que se dan notas tropicales, haciendo así a estos vino ideales para el consumo en la zona. De a poco, el cultivo de uva para vinos vuelve a ocupar su lugar perdido en el Valle desde los años 1935 al 1940.
Fuentes: cra.org.ar y todojujuy.com














