La idea homenajea a los búhos que «trabajan» en los viñedos de la bodega Companhia das Lezírias, protegiéndolos de plagas y bichos comedores de uvas. Vino, arte y biodiversidad unidos en un original emprendimiento que diseñadores mendocinos planean replicar como aporte al salvataje de especies amenazadas.
Para algunos, todas las marcas de vino tienen el mismo sabor, y es algo que funciona al menos con las etiquetas baratas. Si te gusta el buen vino, seguro que conocés bien las diferencias entre una botella y otra.
En este caso, no se trata sólo del vino en sí mismo, ni siquiera de la botella, sino de la caja donde viene guardada, porque podés usarla como una casita para pájaros cuando hayas terminado de tomártela.
La bodega portuguesa Companhia das Lezírias produce el vino «Tyto Alba», que presenta una cabeza de búho en la etiqueta de la botella.
Cuando está dentro de la caja de vino, la imagen del búho en la etiqueta parece que está saliendo del agujero en la madera, configurando una pajarera simbólica que luego se puede convertir en real. Eso sí, sin rejas ni crueldades, como pasa con las jaulas que aún muchas personas «amantes de la naturaleza» tienen con pajaritos en sus patios.
La bodega de Portugal utiliza una gran cantidad de búhos en sus viñedos para proteger sus cultivos de las plagas que atacan las vides. La iniciativa forma parte de un programa de preservación de la naturaleza y de vitivinicultura sustentable, que entre otras acciones incluye favorecer la presencia de aves y otros animales entre las viñas.
Un estudio de diseño se encargó de la combinación de la etiqueta del vino y la caja de pájaros. La casita de madera, como se ve en las fotos, viene con un agujero pretaladrado para que las aves entren y salgan fácilmente, junto con un pequeño agujero debajo donde se puede poner un palito para que las aves se posen.
En Mendoza, según nos contó nuestro amigo el biólogo y ornitólogo conservacionista Heber Sosa (un capo total en lo suyo, miembro de Wetlands International LAC / Fundación Humedales, entre otras organizaciones ambientalistas globales), un grupo de jóvenes productores de vino del Valle de Uco, junto a diseñadores con la misma onda ecologista, están preparando un lanzamiento local con el mismo espíritu que el portugués.
La caja es demasiado pequeña para que los búhos reales se escondan dentro, pero las aves más pequeñas se pueden sentir como en el nido dentro del estuche acondicionado.
Eso sí: si tenés el patio lleno de cajas de «Tyto Alba», significa que además de amante de los pájaros estás enamorado del vino. Y vas a tener que pensar cómo les explicás a los amigos que te visiten tanta casita de pájaros, tanto amor a la naturaleza.
Fuente: marcianos.com