En el marco de la celebración de la Fiesta Nacional de la Vendimia 2025 en Mendoza, el sábado 8 de marzo se realizó una nueva edición del clásico Desayuno de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar), ante un auditorio de unas 1.000 personas en el Hotel Hyatt de esta ciudad. Los esperados discursos de los líderes de la industria tuvieron un tono general conciliatorio, colaboracionista y esperanzado. Mario González, el presidente de Coviar, hizo un llamado a esforzarse por incorporar nuevas tecnologías, lo que consideró clave para ser rentables. Y expresó la necesidad de tener un sistema financiero adaptado a las condiciones biológicas de los cultivos, con créditos a 3 o 4 años de gracia y 10 años de plazo mínimo. Por su parte, el gobernador Alfredo Cornejo pidió por la unión del sector, y consideró que el Estado no debe intervenir en la formación de precios.
Este sábado 8 de marzo, desde las 10 hs, y con transmisión en vivo por televisión abierta, radios y streaming, el hotel Park Hyatt Mendoza fue el anfitrión para el desayuno que la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar) realiza cada año en el marco de los festejos vendimiales. Junto a unos 1.000 invitados, el encuentro fue encabezado por el presidente de la entidad, Mario H. González, y el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo; también estuvieron Carlos Sadir, gobernador de Jujuy; Sergio Iraeta, secretario de Agricultura de la Nación; y el vicejefe de Gabinete de la Nación, Lisandro Catalán.
Alcanzar la rentabilidad tan anhelada
El viticultor riojano Mario González, presidente de la Coviar, arrancó su discurso poniendo de manifiesto que “somos la cadena agroalimentaria que mayor valor agregado genera en Argentina y nos enorgullece decirlo. La vitivinicultura es una actividad económica de mano de obra intensiva, que genera arraigo en el campo argentino”.
González subrayó la necesidad de fortalecer la competitividad de la industria vitivinícola para consolidar su posición en los mercados internacionales. Para eso propuso estabilizar la economía, reducir costos logísticos y establecer acuerdos comerciales favorables. También hizo hincapié en la importancia de un sistema financiero que se adapte a la naturaleza del sector, con créditos accesibles y plazos adecuados para los productores.
«El consumidor es quien nos elige y hace que todo el circuito funcione y es aquí donde estamos haciendo todos los esfuerzos. Sabemos que debemos enfocarnos en soluciones. Representamos eslabones diversos pero valiosos y necesitamos eficiencia en cada eslabón. En el sector primario, los productores deben avanzar hacia tecnologías que brinden eficiencia hídrica y energética, como así también en los cambios varietales que demande el mercado. Y para esto es clave ser rentables y tener un sistema financiero adaptado a las condiciones biológicas de nuestros cultivos con créditos a 3 o 4 años de gracia y 10 años de plazo mínimo. Esa debe ser nuestra meta, así la economía va a fluir y circular y no tan solo eso, si no que lograremos bajar costos, ser más eficientes y alcanzar la rentabilidad tan anhelada por cada empresario”, enfatizó.
El titular de la Coviar resaltó la diversidad del sector, que incluye desde vinos de alta gama hasta productos derivados, como el jugo de uva concentrado y las pasas de uva, los cuales generan valor agregado y empleo en distintas regiones del país.
La sostenibilidad no quedó fuera de sus premisas. La Coviar es la encargada de la gestión del Plan Estratégico Vitivinícola a largo plazo, cuyo enfoque está precisamente en la sostenibilidad y el desarrollo del turismo del vino como motor de crecimiento. “La vitivinicultura es una actividad económica de alto valor agregado y generación de empleo genuino. Es fundamental que trabajemos con visión de futuro para fortalecer cada uno de sus eslabones”, remarcó.
Finalmente, González agradeció el respaldo de las provincias vitivinícolas, en particular de Mendoza y San Juan, que concentran la mayor parte de la producción. También reconoció el apoyo de organismos como el Banco Interamericano de Desarrollo y el Consejo Federal de Inversiones, así como el compromiso de las entidades agropecuarias y el sector privado. Reafirmó la necesidad de un trabajo conjunto para enfrentar los desafíos del sector promoviendo políticas que fortalezcan su desarrollo y posicionamiento en el mercado global.
Que sea posible producir en paz
Sergio Iraeta, secretario de Agricultura de la Nación señaló a su turno: “Nuestra estrategia de gobierno es simplificar, desregular y facilitar para que sea posible producir en paz. Por eso es necesario liberar. Desde la Secretaría de Agricultura, dentro de nuestro ámbito, estamos haciendo todo lo posible para facilitar la producción. Sabemos que necesitamos inversión. La inversión trae trabajo, el trabajo genera comercio, el comercio impulsa la exportación y esto lleva al progreso. Mendoza es un ejemplo de que todo esto funciona y trae progreso”.
Alfredo Cornejo: «No hay múltiples vitiviniculturas, hay una sola»
El discurso del gobernador de la provincia fue conciliador, tanto a nivel político con el gobierno nacional como con las institucionalidad de la vitivinicultura: «El tiempo de transición paulatinamente está comenzando a ordenarse. La macroeconomía da una buena señal para nuestra economía local, existe una fuerte diversificación de la matriz productiva. Para que esto siga pasando necesitamos previsibilidad y condiciones estables que permitan desarrollar”.
“Mendoza ofrece su mejor vocación colaborativa con la Nación –agregó Cornejo-, ya que compartimos el rumbo general en relación a la baja de la inflación y al equilibrio fiscal. Estos son pasos muy importantes para transitar el camino del orden. Las economías virtuosas descansan siempre sobre una institucionalidad sólida a la que debemos ir”.
En su discurso enfatizó la necesidad de consolidar la competitividad de la industria, fortalecer la infraestructura, avanzar en la apertura de nuevos mercados internacionales y abordar problemáticas estructurales del sector productivo. De esta manera anunció que el Gobierno provincial está trabajando junto con la Cancillería para ampliar los cupos existentes y negociar aranceles en mercados emergentes. También ponderó que se han acordado tasas de prefinanciación de exportaciones en dólares, que rondan entre el 2,5% y el 3%, a través del Banco de la Nación Argentina. Asimismo, Cornejo reiteró la necesidad de fortalecer el esfuerzo conjunto entre el Estado y el sector privado para recuperar los mercados internacionales y estimular el consumo interno.
Por otra parte, destacó el rol institucional de Coviar como herramienta de articulación para el desarrollo: «Muy pocas provincias pueden darse el lujo de contar con casi todos sus ex gobernadores presentes en esta institucionalidad que es Coviar». Y pidió la unión del sector vitivinícola, expresando: “No hay múltiples vitiviniculturas, hay una sola, y debemos avanzar en conjunto para potenciar nuestra reputación y nuestras oportunidades de negocio”.
También se refirió a la formación de precios del sector: “El Estado no debe intervenir en la formación de precios, sino generar un entorno propicio para la producción. Cuando ha intentado regular los valores de mercado, sólo ha provocado anomalías que han impactado negativamente en la actividad”.
Vinexpo Explorer 2025
Tras su viaje por París y su presencia en la Feria Wine Paris, Cornejo adelantó que Mendoza será sede en 2025 de Vinexpo Explorer, un encuentro que prevé reunir a 80 compradores internacionales y a 150 bodegas locales, que será realizado por primera vez en el Hemisferio Sur. En referencia a esto, durante su discurso en el desayuno de la Coviar, el mandatario dijo que Mendoza es hoy un “laboratorio de soluciones para el país”.
Esta ronda de negocios inversa estará organizada por Vinexposium, ProMendoza y el gobierno provincial, y será un espacio de negociación que incluirá catas, reuniones B2B (business-to-business o bilaterales) y visitas a establecimientos vitivinícolas. Cornejo destacó que la feria representa una oportunidad estratégica para posicionar la producción mendocina en mercados clave, consolidando así su presencia en destinos tradicionales y abriendo nuevas oportunidades en países como India y Emiratos Árabes Unidos.
Un Centro de Desarrollo vitícola para Jujuy
En el marco del evento, la Coviar y el INTA firmaron un acuerdo con el Gobierno de Jujuy para la creación de un Centro de Desarrollo Vitivinícola (CDR) en la provincia norteña que permitirá la transferencia de tecnología y capacitación técnica y gerencial a productores y bodegas. Con esta nueva creación, la cifra total llega a 14 centros de transferencia tecnológica para el sector en todo el país.
En este sentido Carlos Sadir, gobernador de Jujuy, aseguró que «la vitivinicultura ha encontrado en Jujuy un lugar ideal para la producción de vinos de excelencia, los cuales han sido distinguidos con altas puntuaciones por reconocidos críticos y especialistas internacionales, así como en evaluaciones nacionales. Nuestra provincia ofrece óptimas condiciones de suelo, clima, altura y amplitud térmica para la producción de uvas y vinos de alta calidad”.
Convenios que fomentan el desarrollo de la industria del vino
Durante el Desayuno de la Coviar se firmaron importantes convenios públicos y privados que consolidan el interés de los actores en llevar adelante acciones conjuntas para el desarrollo de la vitivinicultura en Argentina y la sostenibilidad del sector:
Apoyo a productores y bodegas para la internacionalización: Con el Consejo Federal de Inversiones (CFI) bajo la premisa de coordinar e implementar actividades conjuntas tendientes al desarrollo y fortalecimiento del sector vitivinícola argentino, se brindará apoyo a productores y bodegas de todo el país para promover la internacionalización de este sector.
Promoción de la “Caracterización de las principales regiones vitivinícolas argentinas”: También con el Consejo Federal de Inversiones (CFI) y sumando al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), se fortalecerá la promoción nacional e internacional del sector tomando como base el documento “Caracterización de las principales regiones vitivinícolas argentinas”, a través de webs oficiales, medios digitales y redes institucionales.
La finalidad del documento, fue disponer, de forma libre y accesible, de información estratégica, relevada, estudiada y sistematizada de manera homogénea sobre geología, geomorfología, edafología, clima y paisaje de toda la superficie cultivada con vid de Argentina. Los detalles pueden encontrarse AQUÍ
Cooperación con la Sociedad Rural Argentina (SRA) para la productividad: Junto a la Sociedad Rural Argentina definieron un acuerdo de cooperación institucional para establecer las pautas y condiciones de cooperación entre ambas instituciones y el establecimiento de lazos estratégicos para el desarrollo de acciones conjuntas que potencien las actividades productivas en Argentina. Se participará en las diferentes ediciones de la Exposición Rural, para poner en valor la cadena vitivinícola.
La industria vitivinícola en números
Con 199.946 hectáreas de viñedos distribuidas en 18 provincias y 856 bodegas elaboradoras activas, Argentina se posiciona como un actor clave en la vitivinicultura mundial: es el 8° productor, el 9° mayor consumidor y el 11° exportador global de vinos en volumen. Con exportaciones que alcanzan los U$S 933 millones en 2024, el vino no sólo impulsa la economía regional, sino que también es parte de la cultura argentina, fortaleciendo su identidad y proyección internacional.
En este sentido, el sector vitivinícola argentino cerró un 2024 con sólidos indicadores de crecimiento. Según datos del Observatorio Vitivinícola Argentino (OVA), las exportaciones totales se incrementaron un 15,3% respecto al 2023. El vino fraccionado lideró el volumen de envíos, mientras que el jugo concentrado de uva y las pasas registraron los mayores incrementos interanuales, con subas del 75% y 82,3% respectivamente.
La uva fue protagonista del año. En todo el 2024 Argentina exportó 43.515 toneladas de pasas de uva, lo que marca un crecimiento del 70% en relación con las 25.656 toneladas de 2023. En valor se vendieron al exterior en 2024 un total de U$S 81,8 millones en pasas de uva, casi el doble de los U$S 44,9 millones registrados en 2023.