Desde la declaración del coronavirus (Covid-19) como pandemia por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada país del mundo adopta paquetes de acciones preventivas para que el virus no circule. La medida en común es la cuarentena, que obliga a la población a permanecer en sus hogares. Esto paraliza la actividad económica y golpea a los mercados con diferentes magnitudes.
Por Lorena Mellone (lmellone@enolife.com.ar)
La vitivinicultura, como todas las industrias, se verá afectada, tanto en el comercio exterior como en el consumo interno, ya que los eventos festivos privados se suspenden y cierran bares, restaurantes y bodegas. El enoturismo es el canal más perjudicado, justo cuando se mostraba un crecimiento vertiginoso, con bodegas que realizaron grandes inversiones en los últimos años y ahora sufren el impacto repentino.
El enólogo Karim Mussi, propietario de las bodegas Alto Cedro, Abras (Salta, Cafayate) y Alandes , contó a Enolife: «A nosotros la suspensión de la feria ProWein (en Düsseldorf, Alemania) nos afecta y mucho, sobre todo porque no se realizará hasta 2021… Pero el daño más grande en lo inmediato es la caída del turismo, justo cuando estamos en tiempo de cosecha y no vemos que el gobierno tome medidas paleativas al respecto, por lo menos para sacarnos presión fiscal».
También te pueden interesar las notas publicadas por Enolife el 7/10/2019 y el 29/2/2020 respectivamente: El número de bodegas abiertas al turismo en Argentina creció un 100% en la última década y La OMT prevé una pérdida de U$S 22.700 millones en el turismo por la psicosis del coronavirus
Precisamente, como cuenta Mussi, un perjuicio importante para la vitivinicultura es la suspensión o aplazamiento de ferias, que por ahora afecta a aquellas que estaban planificadas para los meses de marzo y abril de 2020, y ahora están analizando posponer también las de mayo. Esto constituye un golpe al comercio mundial de vinos, teniendo en cuenta que las ferias, expos y encuentros de negocios son las vidrieras en las que vendedores y compradores coinciden y concretan transacciones internacionales.
Para el dirigente y productor Mario Pulenta, presidente Cámara Bodeguera de San Juan, «las ferias, el turismo, la logística internacional, todo nos va a afectar indefectiblemente. Es que no elaboramos productos de primera necesidad. Pero es necesario respetar las medidas que se adopten para frenar el virus. Es la prioridad absoluta. Mientras tanto, deberemos trabajar con los gobiernos para tratar de atemperar los efectos económicos».
Pérdida de puestos de trabajo
Entre los empresarios, una de las grandes preocupaciones es el consecuente desempleo. En Mendoza, solamente el turismo genera 45.000 puestos de trabajo.
En cuanto al enoturismo en particular, existen en el país actualmente 245 bodegas abiertas a los visitantes, que emplean en sus departamentos de turismo a 872 personas en forma permanente, 351 en forma transitoria y 715 en forma indirecta (según los últimos datos disponibles, elaborados por el Observatorio de Enoturismo de Mendoza a fines de 2018).
La mitad de los empleados son personas del lugar donde está la bodega o el establecimiento vitivinícola, y de ese total el 80% de los puestos son ocupados por mujeres. De las 245 bodegas turísticas del país, 146 están en Mendoza. En el año 2018 Mendoza recibió 1.150.000 turistas, los cuales, en promedio, gastaron U$S 45 por día, quedándose en la provincia un promedio de 4,5 noches, lo que da un total de U$S 232.875.000 al año.
Bodegas de Argentina, la cámara empresaria que reúne a unas 250 bodegas del país, se reunió hace días con referentes de las áreas de turismo para analizar la situación. En ese encuentro se decidió, por unanimidad, cerrar las áreas de turismo en las bodegas hasta el 31 de marzo, haciendo un seguimiento de la situación para evaluar cómo seguir en una próxima reunión a realizarse el 26 de marzo.
A su turno, el profesor de Economía y consultor Gabriel Fidel, especialista en enoturismo, sumó su mirada en charla con Enolife: «La pandemia va a impactar fuertemente este año en la economía mundial, que inevitablemente va a una fuerte recesión, de la cual aún no conocemos su magnitud final. La economía mundial va a sufrir una baja, el desempleo va a aumentar y va a haber menos dinero en poder de los consumidores.»
«Teniendo en cuenta que el vino es un bien elástico, no un bien de primera necesidad -advirtió Fidel-, la caída del ingreso va a afectar mucho el consumo tanto en volumen como así también en el precio que estarán dispuestos a pagar los clientes. Si tu ingreso baja, optás por comprar leche u otros productos de la canasta básica y el vino queda a un lado, o bien se compran vinos mas baratos. Por eso estamos muy preocupados por el impacto y en consecuencia debemos ser muy creativos en nuevas formas para llegar al consumidor nacional y a los mercados mundiales».
Para Fidel, un problema grave es la baja prácticamente a cero del ítem turístico de la industria: «Ni hablar del enoturismo, pues la brusca caída ha llevado al cierre de las áreas de turismo de las bodegas y las afecta no sólo a estas sino a toda la cadena de valor de esta área, que es muy importante. Y el impacto sobre las bodegas más pequeñas será aùn mayor, porque dependen mucho más de las ventas directas en bodega a los visitantes, que son un porcentaje mucho mayor sobre las ventas totales, comparadas con las bodegas más grandes. Este duro panorama lamentablemente ya está generando desempleo».
El economista Fidel reflexionó sobre lo que vendrá: «Ojalá que la pandemia sea superada con relativa rapidez, para que podamos comenzar la recuperación lo antes posible. La etapa que viene, en el escenario más optimista (aclaremos que no hay escenario fácil a esta altura, pues ya se habla de caídas cercanas al 3% del PBI mundial), exigirá una enorme respuesta fiscal, porque la probabilidad de escapar a una recesión a esta altura es casi inexistente. Frente a la crisis sanitaria global más grave del último siglo, hará falta una fuerte acción y una respuesta contundente tanto de los estados nacionales como así también de los organismos multilaterales, con el fin de evitar que el escenario de recesión pueda terminar en una enorme depresión».
Menos venta directa y más venta digital
Desde el sector, se presta especial atención al comportamiento de los mercados, al consumo interno afectado por el cierre de locales gastronómicos y al comercio internacional, ahora acotado para quienes necesiten abrirse a nuevos clientes.
Ricardo Stradella Bianchi, empresario de Bodegas Bianchi, se manifestó al respecto: «En el mercado interno creemos que el efecto del coronavirus obviamente va a disminuir las ventas, y digo ‘creemos’ porque nosotros vendemos a distribuidores, no a los canales directos, y hay que pensar que un 50 por ciento de la población trabaja con estos últimos. Lo que está aumentando a gran velocidad son las ventas digitales de supermercados». Y continuó: «También la industria se va a ver perjudicada porque se se cierran bares y restaurantes y no sólo en Argentina, en muchos estados de EEUU tomaron la misma medida «.
Stradella finalizó asegurando: «Definitivamente sí va a ser perjudicial; la industria ya venía muy golpeada y esto es otro golpe que tendremos que afrontar».
De la misma empresa, con bodegas en San Rafael y Tunuyán, Raúl Bianchi agregó, en la misma sintonía que Stradella: «Indiscutiblemente la suspensión de las ferias trae pérdidas, ya que si se trabaja para incrementar la producción, obviamente necesito incrementar mercados y eso se consigue en las ferias internacionales; abrir nuevos mercados es acompañar al crecimiento de la compañía, frenarlos, forma parte de un deterioro porque si uno se preparó para crecer, compró más uva, hizo más almacenamiento de tanques y después no va a poder colocarlos, finalmente se afecta la cadena de pagos». Y sentenció: «Pero lo más importante es incrementar el cuidado de nuestra salud y evitar los factores de riesgo.»
Por su parte, José «Pepe» Zuccardi, presidente de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar) y titular de la Bodega Zuccardi, se mostró cauteloso y, en cierta forma, esperanzado: «Me parece prematuro evaluar los efectos de la pandemia; indudablemente impactará en todas las actividades pero habrá que esperar un poco para evaluar con seriedad».
Las ferias suspendidas y su importancia en el comercio internacional
ProWein 2020, Alemania Düsseldorf
Planificada para el 15 al 17 de marzo, se pospone para los días 21 al 23 de marzo del 2021.
La edición 2019 de esta Feria arrojó resultados muy positivos. Participaron 6.900 proveedores de vinos y licores. Los expositores llegaron desde 64 países y se agruparon por países y regiones de cultivo, repartidos en diez pabellones. La ProWein 2019 recibió en total 61.500 visitantes profesionales del sector del comercio y la gastronomía. Y el 80% de los visitantes tenían capacidad de decisión para compras directas. Los países expositores con mayor relevancia en la ProWein 2019 fueron Italia (1.654 expositores) y Francia (1.576), seguidos de Alemania (978), países de América, España (661), África y Asia (600), Portugal (387) y Austria (335). Asimismo, también participaron aproximadamente 400 proveedores de licores.
Feria de Alimentos y Bebidas de Tang Jiu Hui de China
Programada para el 26 al 28 de marzo en la localidad de Chengdu, aún no tiene nueva fecha prevista.
Es la feria de bebidas más antigua de China. Atrae a 3.000 expositores y 300.000 compradores. En la edición 2020 edición se esperaba generar más de 2.000 millones de dólares en negocios acuerdos comerciales.
Foodex en Japón
Esta Feria, planificada para el 10 al 13 marzo, aún no da información acerca de su reprogramación.
Foodex es la mayor feria agroalimentaria que tiene lugar en la zona Asia Pacífico, incluyendo Oceanía. Está considerada la tercera más grande del mundo, constituyendo un importante sitio para las empresas interesadas en introducirse en el mercado japonés y asiático en general y/o consolidar su presencia en los mismos.
Los números de su edición 2019 fueron: 3.316 expositores (1.244 japoneses, 2.072 extranjeros) 80.426 visitantes (9,9% más que en la pasada edición), 68 pabellones. Contó con la presencia de 2.072 expositores internacionales (62%) de 86 países de los 5 continentes. En total, la edición 2019 de Foodex tuvo una asistencia de más de 85.000 compradores profesionales, de los cuales 69.426 fueron japoneses y 10.970 fueron extranjeros (un 10% y un 9,5% más que en la edición 2018, respectivamente) .
Vinitaly, Italia, Verona
La nueva fecha del evento que reúne a visitantes de más de 60 países ha sido reprogramada del 14 al 17 de junio. Según la organización, es el mejor período para asegurar a expositores y visitantes el más alto nivel de calidad del negocio.
La edición 2019 de Vinitaly alcanzó cifras muy relevantes de participación, tanto por número de expositores como por número de visitantes. En concreto, la Feria contó con la presencia de 4.600 empresas (130 más que el 2018), la exposición de 18.243 vinos y 99 eventos. Con 100.000 m2 de superficie expositiva, tuvo un aumento de casi el 10% respecto a los 92.476 m2 utilizados en la edición del 2018. En este espacio se alojaban más de 12 pabellones divididos por regiones y sectores. Más de 125.000 visitantes de 145 naciones diferentes, de los cuales 33.000 eran compradores internacionales, lo que supone un aumento del 3% respecto a la edición anterior. Las empresas extranjeras que participaron fueron 350 de los cuales el 10% eran argentinas.
Hostelco
Organizada para los días 20 al 23 de abril fue pospuesta para los días 14 al 17 septiembre de 2020.
La edición anterior contó con más de 4.500 firmas expositoras, un 27% de las cuales son internacionales, procedentes de 70 países. Por otra parte, recibieron más de 150.000 visitantes profesionales, de los que cerca de un 30% fueron extranjeros y 1.400 compradores clave invitados. Se presentaron más de 300 innovaciones, 120 conferencias y actividades congresuales y la participación de 35 chefs con 45 estrellas Michelin.
En mayo, sin definición
Para la agenda ferial de mayo aún no hay determinaciones; las mismas se irán dando en virtud de las medidas que se sigan tomando con respecto a la prevención de contagio de virus. Una de las más importantes es:
London Wine Fair
El 2 de marzo emitieron un comunicado en el cual sostienen: «El nivel de riesgo de coronavirus en el Reino Unido ha aumentado de bajo a moderado. Sin embargo, el riesgo para las personas no ha cambiado y sigue siendo bajo. En este momento, London Wine Fair 2020 seguirá adelante según lo previsto. La seguridad de los visitantes y expositores está a la vanguardia de todo lo que hacemos. Estamos trabajando estrechamente con el lugar, Olympia, y continuaremos siguiendo los consejos del Gobierno, el Departamento de Salud y Asistencia Social y Salud Pública de Inglaterra». Así las cosas, la fecha establecida del 18 al 20 de mayo aún sigue en pie.