El último invierno cayó menos nieve y, respecto a un año promedio, hay un 30% menos de agua. Aun así, el Departamento General de Irrigación comunicó que no afectará la provisión de agua para el agro, para potabilizar y para otros usos. Sin embargo, no explica cómo repartirá menos agua para la misma cantidad de tierras y usuarios.
Durante la semana entre el 6 y el 12 de enero, el superintendente de Irrigación, Sergio Marinelli, encabezó diversas reuniones técnicas con funcionarios y personal en las Subdelegaciones de Aguas (que son las encargadas de manejar los embalses) con el objetivo de tomar medidas ante la crisis hídrica que afecta a Mendoza. En cada caso específico, se consideró la situación del área evaluada y de los cauces que de ella dependen, para, según el comunicado de Irrigación, «llegar lo mejor posible a la primavera».
“El embalse Potrerillos, que se encuentra a un 60%, es el que mejor está en su nivel de agua. Pero el alto porcentaje de demanda de agua para el uso poblacional es muy preocupante. En el río Mendoza, que abastece al Área Metropolitana, el agua potable se está llevando casi el 40% del total del volumen del río y ésto genera que se haya considerado aplicar restricciones en otros usos, como el agro», afirmó Marinelli.
Ayer, 20 de enero, el Departamento General de Irrigación emitió un comunicado donde anuncia que, frente a la escasez de agua, el organismo «evalúa» de qué manera hacerle frente a esta crítica situación, pero descarta que se restrinja más de lo que se está restringiendo en este momento el agua para el agro. Ni para el agro, ni para ninguno de los otros usos.
Tras la divulgación del comunicado de Irrigación del 20 de enero, asegurando que no se restringiría el agua, se conoció que las autoridades del organismo regulador del agua están reunidos de urgencia hoy 21/01 con los Inspectores de Cauce del río Mendoza para decidir cómo redistribuir el agua del dique Potrerillos. Este dato de la reconsideración de posibles medidas para remediar la situación, así como otros de interés sobre el tema, fueron divulgados y analizados hoy en una nota de mendozapost.com, firmada por su director periodístico, Ricardo Montacuto.
Distribución del agua en Mendoza
Situación en cada río
«Hay un treinta por ciento menos de agua»
“Estamos más complicados de lo que creímos en octubre de 2019, cuando anunciamos el pronóstico de caudales de los ríos; hay un treinta por ciento menos de agua…. Los caudales no han subido, y cuando lo han hecho, ha sido muy poco. Hoy estamos con caudales similares a los de noviembre. La situación de los embalses es bastante crítica”, aseguró a su turno el director de Gestión Hídrica de Irrigación, Rubén Villodas.
“Estamos en una situación extrema. No hay registros similares a estos caudales en la historia de registros que tenemos. El pronóstico que hacemos desde Irrigación es algo estadístico, y no hay estadística de estos niveles, ni del volumen de nieve, que son los datos en los que se basa el pronóstico. Esto explica que se puedan tener errores mayores a los que se tenían históricamente. Cuando se pronostica un año normal, el error va de un 5% a un 10%. Ahora, el margen de error es el doble, un 20%”, explicó el funcionario.
El registro de datos de los ríos que administra Irrigación varía según el río. En el río Atuel, por ejemplo, el registro empezó en 1907, mientras que en el río Mendoza, en 1957. En cada río se empezó a trabajar desde la Secretaría de Recursos Hídricos de la Nación o desde Irrigación, en distintas épocas.
“Ahora nos encontramos con que lo que habíamos previsto, que era malo, ahora es peor. En cualquier año medianamente normal, a fines de noviembre los caudales aumentan y se equiparan los ingresos de los embalses con las salidas”, dijo también Villodas.
“Se riega desde agosto hasta noviembre, cuando el nivel de los embalses baja. Nuevamente, a fines de ese mismo mes, empiezan a subir los caudales y los embalses a recuperarse. No obstante, en 2019 eso no sucedió. En diciembre levantaron un poco y bajaron de vuelta. En enero, lo mismo. No hay nieve. No creo que vuelvan a subir significativamente”, aseguró Villodas, ampliando este panorama poco alentador que muestran los embalses.
Fuente: Departamento General de Irrigación