El ex tenista argentino Juan Martín Del Potro (35), quien en su extensa y exitosa carrera, finalizada hace dos años, llegó a estar 3ro. en el ránking mundial, estuvo en Mendoza para involucrarse de manera directa en la actividad vitivinícola porque en breve lanzará su propio vino: «Juan Martín Del Potro Resiliencia». En esta nota exclusiva de nuestro colaborador Oscar Pinco -creador del programa «Pasión por el vino» que se emite todos los sábados por Canal 7 de Mendoza y le significó ganar el premio Martín Fierro Federal-, «Delpo» cuenta por qué el nombre de «Resiliencia» y que significa para él este nuevo desafío en su vida, que tiene por escenario a Mendoza y su industria vitivinícola.
Por Oscar Pinco
Delpo, de 35 años, hace dos temporadas dejó la práctica activa del tenis profesional, donde ganó el US Open, la Copa Davis y una medalla en los Juegos Olímpicos -entre otros grandes lauros- y ahora en esta nueva etapa de su vida decidió encarar nuevos desafíos y vincularse a la actividad empresarial, asociándose con Andes Growers para concretar la producción de su vino.
-Contanos sobre tu reciente visita a Mendoza…
-Estuve en Mendoza para ver la evolución de mi vino «Juan Martín del Potro – Resiliencia», que pronto voy a poder compartir con ustedes. La idea del vino surgió hace tiempo. El motivo por el cual no lo hice antes fue por el tenis, porque no tenía suficiente tiempo para involucrarme tan de lleno como lo estoy haciendo ahora. Así que creo que es un momento ideal de mi vida para poder dar este nuevo paso, esta nueva aventura en mi vida, incursionar en todo lo que es el vino, y, por supuesto, también disfrutar de todo este mundo que es algo nuevo para mí, pero que lo estoy haciendo con mucha pasión.
-¿Por qué te asociaste para este proyecto con la empresa Andes Growers?
-Hay una asociatividad con la gente de Andes Growers porque ellos manejan muy bien este mundo, y son los que me empujaron a que este proyecto se pudiese hacer realidad, ellos son los que me fueron inculcando cosas nuevas acerca del mundo del vino, y fueron muy importantes para tomar la decisión de poder encarar esta etapa y este desafío… Así que estuve en Mendoza aprendiendo y conociendo, aprendiendo sobre todo, y con muchas ganas de que esto se haga realidad y que salga de Argentina para el mundo. La gente de Andes Growers me invitó y me convocó a este proyecto, a este desafío, algo que veníamos hablando ya hace mucho tiempo, Así que estamos muy entusiasmados e ilusionados de poder hacer algo que sea argentino y que vaya a recorrer el mundo.
-Hay muchos famosos o ex deportistas que de pronto encargan un vino y le ponen su nombre… Pero vos te involucraste personalmente en el proyecto, conociendo cada detalle…
-Sí, así es… Estuve con la gente de los corchos, con la gente de las cápsulas, con los de los insumos secos, con los diseñadores de la etiqueta… Y en la Bodega Puerta de los Andes estuvimos definiendo los cortes junto al enólogo Rolando Lazzarotti. Para mí, estar en Mendoza y participar de cada una de las actividades que te permite ver al final del día el producto terminado, fue lindo, fue algo totalmente nuevo y me lleve una experiencia genial. Porque uno ve siempre la botella de vino y no piensa todo el trabajo que hay detrás y el mínimo detalle que hay en cada una de las cosas, y eso es un poco lo que aprendí en este viaje. Entonces creo que le voy a dar muchísimo más valor a poder realizar mi propio vino y poder contar esta experiencia, también para que la gente que le interese incursionar en todo este mundo lo pueda hacer y que sepa que no es sólo ver un vino terminado, una botella y ya, sino que hay todo un mundo detrás que vale la pena descubrir.
-Contanos sobre cada uno de esos pasos para llegar al vino deseado…
-Estuvimos en Diam y elegimos un tapón Diam 30, que es el que va a ir en mi vino. Me dieron una gran charla, aprendí mucho de lo que es todo el proceso del corcho, hasta tener el tapón que va en la botella, y vale la pena aprender sobre eso.
Después continuamos en la planta de la empresa Altieri, que tengo entendido que son los mejores en cápsulas, y también ese es un mundo que me sorprendió, que no imaginaba que era así, que hay miles de procesos y detalles muy chiquitos que hacen que después al final del día tengas tu cápsula a tu gusto, pero que no es nada sencillo.
Y por último estuvimos en la imprenta de Palero -Label Solutions-, definiendo la etiqueta, los colores, los tonos, la tipografía. Y también, algo que creía que era bastante sencillo, después tiene todo su mundo detrás, porque cada colorcito, su tono o su tamaño de tipografía o esas cosas pueden variar en el producto terminado. Fueron jornadas de mucho trabajo, pero trabajo lindo porque lo disfruté.
-¿Y cómo fue el trabajo en la bodega para definir el corte?
-Compartimos toda una jornada trabajando con el enólogo Rolando Lanzarotti, para definir el corte del vino, avanzamos mucho, así que creo que estamos muy cerca de poder lanzarlo al mercado y compartirlo con los consumidores.
-¿Por qué el nombre del vino, «Juan Martín del Potro – Resiliencia». ¿Tiene que ver con que tuviste lesiones, te recuperaste, volviste y competiste varias veces…?
-Creo que al nombre se llegó con esta palabra que me identifica bastante, que es «resiliencia», y ha sido una buena combinación acompañando mi nombre, y creo que puede impactar, porque fue algo que realmente me pasó durante toda mi carrera, que es un poco la vida misma, con obstáculos, piedras que van apareciendo en el camino y hay que sortear; se puede caer, levantarse, volver a caer y levantarse y continuar… Y creo que encontramos muchas cosas en común entre la palabra resiliencia, mi nombre, mi carrera, todo lo que fue el mundo del tenis para mí y la idea es poder reflejarlo en el vino.
-Hablanos sobre tu carrera, sobre todo lo que te dio el tenis, porque a los 17 años te metiste en el top 80 y a partir de ahí fue un crecimiento notable… Fuiste el tercer argentino que gana un Grand Slam, tu medalla en loscomo haber sido uno de los pocos argentinos, el tercero que gana un Grand Slam, tu medalla en los Juegos Olímpicos, el liderazgo del equipo de Argentina que ganó la Copa Davis. ¿Cómo lo resumirías?
-Es difícil hacer un resumen de toda mi carrera, pero creo que más allá de algunos altibajos físicos, más que nada soy un privilegiado de haber hecho la carrera que hice, también de haber jugado desde mi primer torneo hasta el último alrededor de Federer, de Djokovic, de Nadal y de los grandes tenistas de la historia. Para mí fue un honor compartir mi carrera con ellos, aprendí muchísimo y sobre todo veo que esos logros importantes fueron la mayoría en finales contra ellos, es como un plus para mi carrera. Y bueno, como todo, las cosas lindas también tienen su final, terminan, vienen cosas nuevas y en este momento de mi vida estoy muy abierto a explorar nuevos caminos y desafíos como es esto del vino.
-Pero lograste algo que para la gente del tenis de Argentina fue una bisagra:ganar la Copa Davis, que era tan esquiva para nuestro país. Contanos qué significó para vos…
-Sí, sí, ganar la Copa Davis fue súper especial, más que nada por el deseo y el anhelo que había en el país y en el público argentino, era algo que se negaba siempre y no se podía ganar, y todos lo intentaban y siempre se perdía en las finales o cerquita, así que fue como un premio a mucho esfuerzo, a poder haber creado un gran equipo de trabajo, grandes compañeros… Y bueno, el resultado final fue ser campeón, pero para llegar a eso hubo que pasar por muchas cosas y también creo que soy un agradecido de que mis compañeros me hayan ayudado a poder lograr algo tan lindo que fue para mí y para el país como la Copa Davis, y que yo también los haya acompañado a ellos, para juntos haber inscripto nuestros nombres en la historia del tenis argentino.
-¿Y ganar el US Open?
-Ganar el US Open es otro sentimiento, son otras emociones, yo era muy chico, tenía 20 años y cuando empecé a jugar al tenis siempre soñaba ganar el US Open, entonces haber cumplido mi sueño de chico, sin dudas que fue algo único, al día de hoy lo siento como si hubiera sido ayer, lo sigo recordando muchísimo, y cada vez que voy al torneo me hacen sentir un campeón y eso va a perdurar para toda la vida, así que es algo que pude lograr y que me hace muy feliz.
-Saliste de Tandil, una ciudad del interior de la provincia de Buenos Aires. De allí salieron y llegaron muy alto muy buenos tenistas…
-En la escuela de Tandil yo siento que teníamos un gran maestro, un gran formador, que fue Marcelo Gómez, que nos agarró a la mayoría de todos nosotros, que le ponía mucha dedicación y mucha pasión a poder agarrar chicos y enseñarles a jugar al tenis y eso es lo que nos permitió a nosotros crecer y después cada uno empezar a hacer su carrera. Pero bueno, hoy en día Tandil sigue siendo como una cuna del tenis a nivel nacional y para mí es un orgullo porque yo amo mi ciudad, siento que la llevo por el mundo lo mejor posible y siempre es lindo cuando mencionan Tandil en cualquier ámbito de la vida.
-En esta nueva etapa donde dejaste de ser deportista profesional, encarás otras actividades, y dentro de esas actividades el mundo empresarial y el tema del vino. ¿Contanos qué significa el vino en esta nueva etapa de tu vida?
-El vino es un camino que estoy abriendo en este momento de mi vida. No sólo estoy viendo el vino en sí, sino que trato de ver un poquito más allá de lo que es este mundo. Creo que puede abrir muchísimas puertas y oportunidades a las cuales estoy súper dispuesto a poder explorarlas. Y gracias al vino pude volver a Mendoza después de cómo más de 10 años que no venía (Juan Martín Del Potro jugó con el chileno Fernando González un partido exhibición en el Arena Maipú en diciembre de 2012 con triunfo para el tandilense por 7-6 y 6-4), y siempre tengo los mejores recuerdos porque acá venía a jugar muchísimo cuando era chico. Andaba por el Mendoza Lawn Tennis, por el Club Andino, ir recorriendo la ciudad, y venía, venía y venía y después no pude regresar. Así que para mí tengo la excusa perfecta ahora con el vino de poder venir a disfrutar de esta gran provincia, de esta gran ciudad y sobre todo la gente mendocina que es muy cálida y súper cariñosa.
-¿Cuál es tu pasión por el vino?
-Mi pasión por el vino en esta nueva etapa es poder replicar todo lo que hice en mi carrera en una botella muy linda de vino y que ustedes las puedan compartir y que se sientan identificados conmigo. Y espero que la disfruten y pronto la van a tener en sus manos. ¡Salud!