Este 2021, la tradicional reunión de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar) se muda desde el Hotel Hyatt de la Capital mendocina al INTA Luján de Cuyo, tanto por cuestiones de seguridad sanitaria como porque no habrá apuro en salir a ver el Carrusel que años atrás siempre desfiló por calle Chile, justo enfrente de ese hotel 5 estrellas. Pero lo más importante es que durante el encuentro, el 6 de marzo próximo desde las 9.15 hs de la mañana, se divulgarán los detalles del nuevo Plan Estratégico Vitivinicola 2030 (PEVI 2030), un programa integral para la industria, avalado por una ley del Congreso, desarrollado por todos los actores de la vitivinicultura y con la Coviar como unidad ejecutora.
Por Pedro Straniero
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Ya desde comienzos de febrero se sabía que el clásico Desayuno de la Coviar se mudaría este 2021 desde el Hotel Hyatt de la Capital mendocina, donde se han celebrado las últimas 7 reuniones, al predio del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), ubicado en calle Aráoz entre la Ruta Nacional 40 y calle San Martín de Luján de Cuyo. Allí, si el tiempo lo permite, se haría al aire libre desde las 9.15 de la mañana, pero siempre con menos de las 1.000 personas entre autoridades, dirigentes vitivinícolas, políticos provinciales y nacionales, empresarios y periodistas que concurrieron en 2020. Se habla de que esta vez podrían ser unos 250 invitados, y el resto lo vería y participaría por streaming vía internet.
Pero más allá del protocolo, los barbijos obligatorios y el reconfortante café con leche con medialunas, lo que todos en el planeta vino esperamos con expectativa es el detalle que el presidente de la Coviar, José «Pepe» Zuccardi, brindará sobre el Plan Estratégico Vitivinícola 2030 (PEVI 2030).
Este plan de acción es nada menos que el lineamiento general, las estrategias, acciones concretas, objetivos económicos, proyecciones de exportación y ventas en el mercado externo, regulaciones previstas, normas para la plantación y reconversión de viñedos y muchas otras medidas que la vitivinicultura «oficial» ha diseñado para los próximos 10 años.
Decimos vitivinicultura «oficial» porque los PEVI parten de una ley nacional argentina, la 25.849, sancionada el 4 de diciembre de 2003 y vigente desde el 26 de febrero de 2004, mediante la cual se creó la Corporación Vitivinícola Argentina «como persona jurídica de derecho público no estatal destinada a gestionar y coordinar la implementación del denominado Plan Estratégico Argentina Vitivinícola 2020«, según rezaba la publicación en el Boletín Oficial de aquella época. De hecho, se trata de un proyecto integrador al que se fueron alineando con el tiempo la mayor parte de las organizaciones vitivinícolas, los productores y bodegas. Aunque siempre hubo «rebeldes» que fueron por su lado, distanciados del interés general, alegando razones financieras o políticas.
Ya antes de llegar a su término el PEVI 2020, desde fines de 2018, las entidades del sector involucradas en la construcción del plan se pusieron a trabajar en el diseño del PEVI 2030. Así, el INTA, el INTI, el INV, el Ministerio de Agricultura de la Nación y otros protagonistas evaluaron los resultados del PEVI 2020 y en base a ello comenzaron las consultas para el PEVI 2030.
Durante 2019 y 2020 se realizaron Talleres de Construcción Participativa del PEVI 2030 con más de 1.000 actores de la industria en todo el país, en su mayoría productores. Allí se recogieron críticas, sugerencias y desafíos que conforman el nuevo Plan Estratégico.
A mediados de 2019 arrancaron los denominados Talleres de Construcción Participativa 2030 en todas las regiones vitivinícolas del país. En ellos, más de 1.000 actores del sector hicieron su aporte al nuevo proyecto, sin dejar de analizar las fallas del 2020 y plantear nuevos objetivos.
Siguiendo la línea temporal, en el Desayuno de la Coviar 2020 en el Hotel Hyatt, nuestro respetado amigo, histórico director del INTA en Mendoza, el ingeniero agrónomo Hernán Vila -fallecido el 8 de octubre de 2020 víctima de coronavirus-, enunció una ajustada síntesis de lo realizado por la Coviar y el PEVI hasta ese momento, y planteó con inteligencia los desafíos a futuro.
Los contenidos del PEVI 2030 se fueron conociendo a cuentagotas durante su diseño en toda la primera mitad de 2020. Hasta que la Coviar, el 17 de junio del año pasado, tras una serie de reuniones con dirigentes y funcionarios de los gobiernos de Mendoza y San Juan, del Ministerio de Agricultura de la Nación, el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), difundió un comunicado informando tendencias claves de lo que será el PEVI 2030.
En ese documento se precisaba que la sustentabilidad, la inclusión de productores y el enoturismo serán tres ejes principales del PEVI 2030. El director nacional del INTA, Carlos Parera, destacaba los cambios y novedades que traerá este plan con relación al vigente hasta el año 2020, tales como » la sostenibilidad ambiental, la equidad e inclusión de los productores, el turismo del vino, entre otros aspectos». Y mencionaba el trabajo previo que se hizo desde el INTA en el análisis y puesta en común de más de 15 planes estratégicos vigentes en distintos países para analizar temáticas comunes y su aplicabilidad potencial en la vitivinicultura argentina. «Todos los países vitivinícolas del mundo tienen un plan estratégico y en ese sentido analizamos hacia a dónde están apuntando con sus objetivos», admitía Parera.
La sostenibilidad ambiental, la equidad e inclusión de los productores y el turismo del vino serán ejes del PEVI 2030″.
Carlos Parera, director nacional del INTA, en un adelanto en junio de 2020
Luego de este largo proceso de construcción y diseño, al fin conoceremos los líneamientos precisos del PEVI 2030, que seguramente serán enunciados por el presidente de la Coviar, José Zuccardi, durante el desayuno del próximo 6 de marzo desde las 9.15 de la mañana. Se espera también la difusión del plan completo en un documento digital distribuido entre los protagonistas de la industria y los medios de prensa.
Según anticiparon desde la Coviar y el gobierno mendocino, también durante el Desayuno se rubricarán convenios y acuerdos con organismos del sector. Por ejemplo, con el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), para ampliar la imprescindible conectividad de comunicaciones y energía en las zonas rurales, así como con el Consejo Federal de Inversiones (CFI), para coordinar líneas de financiamiento para la vitivinicultura.