La Bodega del Este mendocino de la familia Carbonero comenzó hace apenas un año a comercializar sus vinos fraccionados, porque hasta 2023 sólo elaboraba y comercializaba a granel. Con vinos de calidad de exportación y varios mercados conquistados, el paso al fraccionamiento ha dado buenos resultados a la empresa. En la actualidad la bodega exporta a Brasil, Perú y México y cuenta con las certificaciones BPM, HACCP, Vegan, Orgánico y Sustentabilidad Vitivinícola. Obtuvo 5 medallas en el concurso Vinus 2024, y el crítico inglés Tim Atkin reconoció 3 de sus vinos con 90, 91 y 92 puntos. En los próximos 3 años proyectan elaborar 1 millón de botellas anuales de vino y comercializarlas a precios entre U$S 2,5 y U$S 10 la unidad.
Para la familia Carbonero, la vitivinicultura está arraigada en su espíritu desde hace cuatro generaciones, cuando los pioneros -bisabuelos de los actuales propietarios- llegaron desde Italia a trabajar como contratistas de la finca de Don Miguel Escorihuela Gascón. Desde 1905, la empresa familiar radicada en el departamento de Rivadavia, Mendoza, se enfoca en la elaboración de vinos a granel de alta calidad enológica y desde hace un año están incursionando además en los vinos embotellados. Bajo el paraguas de Carbonero Wines, comercializan las marcas Wagyu, Familia Carbonero, Antuan y Ético.
Desde hace 11 años, la bodega está gerenciada por Emmanuel Carbonero (38), quien ha iniciado un proceso de profesionalización y certificaciones de calidad que les ha permitido expandirse y competir en los mercados más exigentes, exportando vino a granel a EEUU, Canadá, México, Gran Bretaña, Suiza, Holanda, Francia y China; y ahora también los embotellados a Brasil, México y Perú.
«Desde hace varios años estamos atravesando un proceso de profesionalización y de generación de valor. Nos especializamos, empezamos un proceso muy grande de certificaciones de normas de calidad, nos convertimos en exportadores de vino a granel, y desde hace un año comenzamos con el proyecto de vinos embotellados», indicó Carbonero.
Según contó el empresario, este proceso ha requerido de importantes inversiones en tecnología e infraestructura, y consideró que están en el momento justo para reinversión y reconversión del grupo. Un ejemplo de esto es la adquisición de una línea de embotellado italiana para fortalecer su capacidad de producción y la compra de la bodega Gargantini en 2017, con un ambicioso plan maestro a 10 años.
«Empezamos a trabajar en Gargantini en el 2017 y en 2024 pusimos en marcha la primera etapa, con la producción de 5 millones de litros de vino -contó el joven bodeguero-; allí tenemos una alianza estratégica con Bodegas Norton, a quienes le brindamos un servicio de guarda, y con quienes tenemos el compromiso de ampliar la capacidad todos los años, en un proyecto escalonado que incluye la elaboración de vinos orgánicos y convencionales, y con el objetivo de brindar servicios a otras bodegas».
La base de operaciones de la bodega está en la calle Urquiza en Santa María de Oro, Rivadavia, donde tienen una capacidad para la producción anual de otros 6 millones de litros, es decir que entre las dos bodegas pueden elaborar y guardar 11 millones de litros, con el objetivo de llegar a los 15 millones para 2028. «Proyectamos embotellar 1 millón de botellas anuales dentro de los próximos 3 años, vinos desde U$S 2,5 a U$S 10 por botella«.
Allí tienen además el viñedo orgánico que, según Carbonero, es el producto que les está sosteniendo las exportaciones: «Es un gran nicho de mercado, la producción orgánica crece mucho año tras año, y estamos poniendo mucho foco allí.»
Certificación de normas
Tanto para sus vinos a granel como los embotellados, la bodega, a sólo un año de los inicios de su línea de fraccionados, cuenta con 5 certificaciones diferentes:
–Buenas Prácticas de Manufactura (BPM): Garantiza la calidad de los alimentos a lo largo de la cadena de producción, distribución y comercialización.
–HACCP, sigla de Hazard Analysis and Critical Control Points, que en español significa Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control: Es un sistema de gestión de la inocuidad alimentaria cuyo objetivo es evitar peligros microbiológicos, o de cualquier otro tipo, que pongan en riesgo la salud del consumidor. El análisis y control va desde la producción de la materia prima hasta el consumo del producto terminado.
– Vegan Argentina: Es un esquema de certificación de productos para alimentos y cosméticos Veganos, por intermedio del cual Liaf Control evalúa la conformidad del origen de las materias primas, aditivos y coadyuvantes utilizados en la elaboración de los productos, para verificar que los mismos no provienen de origen animal o derivados de animales.
–Orgánicos: Certificaron para Argentina, Brasil, EE.UU, Canadá y Unión Europea. La certificación orgánica asegura la trazabilidad y diferenciación de los productos.
-Protocolo de Autoevaluación de Sustentabilidad Vitivinícola de Bodegas de Argentina: El Programa de Sustentabilidad para la industria vitivinícola argentina tiene como objetivo fortalecer la sustentabilidad ambiental, social y económica y la competitividad de la industria vitivinícola argentina en el largo plazo.
«Somos una de las pocas bodegas del país que tiene estas 5 certificaciones, nos sentimos muy orgullosos, somos un equipo de 80 personas que trabajamos en el mismo sentido», sostiene Carbonero.
Reconocimiento de Tim Atkin
La visita de Tim Atkin en febrero de 2025 a la Argentina trajo un gran reconocimiento para la familia Carbonero; el crítico inglés que publica anualmente los vinos a los que le otorga más de 90 puntos incluyó en su prestigiosa lista a los vinos Familia Carbonero Malbec Reserva Orgánico que alcanzó 91 puntos, y Wagyu Gran Corte con 92 puntos. Y en 2024 su Blend de Blancas cosecha 2022 había obtenido 90 puntos.
«Este es un hito muy significativo en el desafiante y apasionante mundo del vino embotellado, en el que estamos dando pasos firmes e ingresando en la elite de las bodegas premiadas y reconocidas a nivel mundial. Y no quiero dejar de reconocer especialmente a Juan Pablo Curadelli, responsable de enología, y Hugo Zamora (enólogo asesor), por sus valiosos y sabios aportes. Detrás de cada logro hay esfuerzo y sacrificio que merecen ser celebrados.» consignó un comunicado de la bodega tras el logro.
Además de este reconocimiento, también han obtenido 5 medallas en el Concurso Internacional Vinus 2024 para sus vinos:
Antuan Late Harvest 2023 – Doble Medalla de Oro – 95
Familia Carbonero Reserva Orgánico 2022 – Medalla de Oro – 93
Familia Carbonero Estate Blend de Blancas 2023 – Medalla de Oro – 91
Wagyu Reserva Gran Corte 2022 – Medalla de Oro – 90
Familia Carbonero Estate Cabernet Franc 2023 – Medalla de Plata – 89
Y por otro lado, la Asociación Profesionales de Salud y Alimentos de Argentina les entregó un premio en la categoría orgánicos a la producción y exportación de sus vinos Malbec.