Según datos de la aduana china, analizados por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV), China redujo sus importaciones de vino un -20,6% en volumen y un -11,1% en valor en 2022, hasta los 336,8 millones de litros y los 9.692,6 millones de yuanes. Es el 5to. año consecutivo con caídas, tras batir récords en 2017, con 751 millones de litros y 18.850 millones de yuanes. El precio medio subió un 11,9% hasta los 28,78 yuanes/litro, el segundo más alto hasta la fecha, tras el de 2020.
El vino chileno consolida su liderazgo en el mercado chino, ocupando el 1er lugar en volumen y el 2do en valor. En cuanto a Argentina, lejos quedó de su record en volumen del año 2020 (38 millones de litros) y de valor en 2021 (241,7 millones de yuanes), en 2022 la caída con respecto a 2021 fue del -41,8% en valor y -78% en volumen, a pesar de haber subido su precio medio en un 164,50%.
China redujo sus importaciones de vino en 2022 más del 20% en volumen y el 10% en valor en 2022, hasta los 337 millones de litros y los 9.693 millones de yuanes. Tras batir récords en 2017 y crecer a un ritmo verdaderamente espectacular hasta entonces, las importaciones chinas enlazaron tres años pésimos (2018-2020). En 2021 se frenó la caída en volumen (pese a la desaparición de los vinos australianos tras los aranceles) y vimos un atisbo de recuperación; sin embargo, la gran incertidumbre comercial de 2022 ha provocado de nuevo una fuerte caída de las compras.
Si realizamos la equivalencia yuan-euro según el tipo de cambio actual, China importó vino en 2022 por valor de 1.318 millones de euros, a un precio medio de 3,91 €/litro.
Tomando como referencia el año 2000, China ha sido uno de los mercados mundiales que más ha incrementado sus importaciones de vino: con un crecimiento anual medio (CAGR, por sus siglas en inglés) del 10,9% en volumen y del 18,5% en valor, sus compras han pasado en estos 22 años de menos de 35 a más de 335 millones de litros, y de 233 a 9.693 millones de yuanes; sin embargo, si realizamos el cálculo desde el récord de 2017, las importaciones han caído en estos últimos 5 años a una media anual del 14,8% en litros y del 12,5% en yuanes.
Factores como la caída del consumo interno de vino en China, la subida de aranceles a la importación de vinos australianos en el país, la pandemia de Covid-19 o la gran incertidumbre comercial de 2022 han provocado esta fortísima caída de las compras en los años más recientes.
Todos los vinos cayeron de forma notable respecto a 2021, siendo el granel el que menos lo hizo y el único que creció en valor. Todos subieron bastante de precio. El vino tranquilo envasado pierde cuota como primer vino adquirido, aunque su liderato es claro, con alrededor del 65% del volumen y el 85% del valor total. En lo que va de siglo, las importaciones chinas han pasado del granel a los envasados y espumosos.
Por tipo de vino
China redujo alrededor del 25% el volumen importado de vino tranquilo envasado, vino espumoso y bag-in-box, con descenso del 12,2% para el granel, única categoría que creció en valor.
Vino tranquilo envasado: Pierde cuota como primero adquirido, aunque su liderato es claro con 218 millones de litros -24%) y 8.270 millones de yuanes (-12%), alrededor del 65% del volumen y del 85% del valor total. Son las menores compras de vino envasado en más de 10 años. Su precio medio subió un 15,6% hasta rozar los 38 yuanes/litro, máximo histórico.
Vino a granel y espumoso: El vino a granel cayó un 12,2% en volumen hasta los 107 millones de litros, ganando cuota como segundo vino adquirido, seguido muy de lejos por los 8,3 millones del espumoso (-26,5%), que registró su peor dato desde 2012. El granel superó 2 años después al espumoso como segundo vino importado en valor, al crecer un 10% hasta los 762 millones de yuanes, por un descenso de casi el 20% para el espumoso, hasta los 587 millones (comparamos con un 2021 de récord). Ambos subieron de precio, mucho más el granel (+25% hasta los 7,11 yuanes/litro) que el espumoso (+9,2% hasta los 71,16 yuanes). Por último, las compras de bag-in-box cayeron un 23,3% en volumen y un 6% en valor, hasta los 3,4 millones de litros y los 73 millones de yuanes, a un precio medio de 21,24 yuanes/l. (+24%).
En lo que llevamos de siglo, el gran desarrollo de las importaciones chinas de vino se ha producido gracias a la mejor evolución de los vinos con mayor valor añadido: en el año 2000, el granel (incluye bag- in-box) representó el 93,6% del volumen total importado en China, lejos del 32,8% que ocupa en la actualidad; en cambio, el envasado ha pasado del 5,7% al 64,7% del total, y el espumoso, del 0,7% al 2,4%.
Por países proveedores
El vino chileno consolida su liderazgo en el mercado chino.
China importó vino desde un total de 58 proveedores mundiales en 2022, aunque los 10 primeros representaron más del 96% del total. Chile rompió con la caída global y gana cuota como principal proveedor en volumen con 134,8 millones de litros (+6%), su mejor dato desde 2019, seguido de los 90,6 millones de Francia (-21,2%), peor cifra desde 2010.
El 40% del vino que importó China en 2022 procedió de Chile, lejos del 27% que supuso Francia. Sin embargo, Francia representó más del 46% del gasto total, con 4.491 millones de yuanes (-7,5%), muy lejos de los 2.193 millones de Chile (+2,4%), que supuso el 22,6%. Esta diferencia de cuota radica en los precios medios: Francia rozó los 50 yuanes/litro (+17,4%), mientras que Chile registró el más bajo entre los 15 países analizados, con 16,27 yuanes (-32,4%), único que bajó junto al de Alemania y Australia.
España cayó un 37% en volumen hasta los 40,4 millones de litros, cifra similar a la de 2020. Repite como tercer proveedor, seguido de lejos por los 26 millones de Italia (-18,9%). Sin embargo, Italia sigue por delante en valor, con 915 millones de yuanes (-14,2%), lejos de los 687 millones de España (-27%), al registrar un precio medio de 35,10 yuanes/l. (+5,8%), frente a los 16,98 yuanes del vino España (+16%), que fue, no obstante, el más alto hasta la fecha. España representó el 12% del volumen y el 7% del valor total de vino importado en China durante 2022.
Sudáfrica (-7%) superó a Argentina (-78%) como quinto proveedor en volumen, ambos con fortísimas caídas; la de Sudáfrica se produjo tras el gran aumento de 2021, si bien Argentina cayó de forma notable por segundo año consecutivo, después del récord de 2020. Tras ellos aparece Estados Unidos (-14,8%), que sin embargo es el quinto vendedor en valor (+23,7%), al registrar el precio más alto entre los 10 primeros, con 83,19 yuanes/l. Nueva Zelanda (+15,2%) y Alemania (+0,2%) superaron a Argentina (-42%) y a Sudáfrica (-37,6%).
El caso de Argentina
Después de un crecimiento sostenido año tras año desde el 2015, y un salto cuantitativo en 2020 y 2021, durante el año 2022 China redujo sus importaciones de vino argentino en un -41,8% en valor, con 140,8 millones de yuanes vs 241,7 del 2021. En cuanto al volumen, en 2022 Argentina le vendió al país asiático 6,40 millones de litros, -78% que en 2021 (29,20 millones de litros). Sin embargo el precio medio aumentó un 164,50% pasando de 8,27 yuanes el litro en 2021 a 21,88 yuanes el litro en 2022.
En cuanto al ránking entre los 11 principales países proveedores, en valor Argentina quedó en el puesto 8, y en volumen en el puesto 6.
Los vinos australianos han desaparecido del mercado chino
Mención aparte merece la evolución de Australia: en apenas 2 años, ese país ha pasado de liderar las importaciones chinas, con 104 millones de litros y 4.915 millones de yuanes (2020), a apenas tener relevancia, con 2 millones de litros y 40 millones de yuanes (2022). Esta desaparición casi total de los vinos australianos en el mercado chino se debe a la subida de aranceles de hasta el 200% impuesta por Pekín a los vinos de Australia, en vigor desde noviembre de 2020 y derivada de acusaciones de dumping a varias empresas australianas.
Por tipo de vino y país proveedor
Caída generalizada de los principales proveedores de vino espumoso. Italia y Francia pierden más que España
La suma de Italia, Francia y España representó el 93% del volumen y casi el 97% del valor total de vino espumoso importado en China durante 2022. Los tres registraron fuertes pérdidas respecto a un buen 2021. Italia repite como primer proveedor en volumen con 4,5 millones de litros (-21,4%), el 54% del total, seguido de Francia (-36%) y España (-18,5%), cada uno con 1,6 millones. Sin embargo, Francia representó el 72% del valor total, con 423 millones de yuanes (-20,6%), muy lejos de los 112 millones de Italia (-14,9%) y de los 33 millones de España (-13%), al registrar un precio medio de más de 260 yuanes/litro (+24,3%), inalcanzable para Italia, con algo más de 25 yuanes (+8,3%), y para España, con cerca de 21 yuanes (+6,6%). Alemania y Australia pierden cuota como cuarto y quinto proveedor, con fortísimas caídas.
En lo que va de siglo, el vino espumoso español ha sido el que más ha crecido en China, en términos relativos. España ha pasado de no tener apenas relevancia en el año 2000, a representar el 19,2% del volumen total importado en 2022. Italia también ha cobrado relevancia (del 41,6% al 54%), a diferencia de rancia (del 40% al 19,7%) y Alemania (del 10,3% al 2,4%). Francia sí ha cobrado importancia en valor, al haber subido de precio más que ningún otro proveedor analizado.
Alemania y Georgia, únicos proveedores de vino envasado que crecieron en volumen entre los 15 primeros en 2022.
Entre los 15 principales proveedores de vino envasado, que abarcan casi el 100% de las importaciones chinas, sólo Alemania y Georgia crecieron en volumen respecto a 2021, con subida generalizada de precios. Francia pierde cuota como primer proveedor en volumen al caer un 26,3% hasta los 74,4 millones de litros, su peor dato desde 2010. Sin embargo, cayó la mitad que la media en valor, hasta los 3.934 millones de yuanes (-6,9%), al subir de precio un 26,4% hasta los 52,89 yuanes/litro, el más alto de su historia. Chile cayó mucho menos que la media y gana cuota como segundo proveedor, con 60,4 millones e litros (-8,9%) y 1.683 millones de yuanes (-2,5%). España cayó un 38% en volumen, hasta bajar 9 años después de los 30 millones de litros, aunque repite como tercer proveedor, seguido de los algo menos de 20 millones de Italia (-20,4%).
Sin embargo, Italia repite tercer puesto en valor, con 781 millones de yuanes (-14,7%), lejos de los 570 millones de España (-33%), al registrar un precio medio que duplicó al del envasado español (39,67 frente a 19,04 yuanes/litro). Pese a la fuerte caída de 2022, España ha crecido por encima de sus competidores directos en lo que llevamos de siglo. España registró el segundo precio más bajo entre los 15 primeros, tras Moldavia.
Respecto a otros proveedores, China redujo de forma notable sus importaciones de vino envasado de Sudáfrica, Argentina, Portugal o Moldavia. Estados Unidos y Nueva Zelanda crecieron a muy buen ritmo en valor, por precios mucho más altos. Respecto a Australia, cerró 2022 en el puesto 17 en el ranking de volumen y 18 en el de valor, con apenas 325.000 litros y 8,6 millones de dólares. Es decir, las importaciones de vino envasado australiano prácticamente han desaparecido del mercado chino: en 2019, Australia era el primer vendedor en valor (4.638 millones de dólares) de forma muy clara, y el segundo en volumen (121 millones de litros). La entrada en vigor de los aranceles contra los vinos de este país explica esta caída.
Estados Unidos domina el mercado chino de bag-in-box, pese a caer un 25% respecto a un 2021 excepcional
EEUU marcó en gran medida el descenso de las importaciones chinas de bag-in-box, al caer alrededor el 25% respecto a un 2021 excepcional. Repite como primer proveedor de forma clara con 2,6 millones de litros y 31,3 millones de yuanes, el 75% del volumen y el 43% del valor total, a un precio medio de 12,18 yuanes/litro, muy inferior al de los siguientes proveedores. Sudáfrica cerró el año como segundo vendedor en volumen (+3,1%), seguido de Italia (-9,3%) y Francia (+7,4%). Sin embargo, Francia consolida su segundo puesto en valor (+3,7%), a un precio superior al resto. Australia se va recuperando y creció a triple dígito, aunque sus cifras siguen lejos de las de años atrás. Chile y España cayeron alrededor del 60% en volumen y pierden numerosas posiciones.
Los graneles de Chile y Francia no entienden de crisis en China. El español sube de precio un 147%
Chile se consolida como principal proveedor de vino a granel a China, al aumentar sus ventas por encima del 20% respecto a un 2021 que ya fue extraordinario. Representó cerca del 70% del total importado, con 74,3 millones de litros y 503 millones de yuanes, a un precio medio estable, tras subir bastante en 2021. Francia pasa de cuarto a segundo proveedor en volumen, al crecer un 27,3% hasta los 14,4 millones de litros, mientras que consolida su segundo puesto en valor, con 118 millones de yuanes (+46%). También comparamos con un 2021 que ya fue muy bueno. El granel francés subió de precio un 14,8%.
Como también confirman los datos de las aduanas españolas, el vino a granel de España se encareció en China un 147%, hasta los 9,28 yuanes/litro, lo que provocó una caída de España del 35,7% en volumen, pero un excelente crecimiento del 59% en valor. España cerró el año como tercer proveedor, con 8,8 millones de litros y 81,8 millones de yuanes. Las compras de granel argentino se desplomaron por segundo año consecutivo y han pasado en apenas 2 años de 34,5 a 2,6 millones de litros, y de 82,4 a 7,4 millones de yuanes. Fuerte caída un año más de Australia, así como de Sudáfrica, aunque en este caso tras un 2021 excepcional. Buen año, en cambio, para Italia, mientras que Malasia irrumpe como octavo proveedor, cuando no exportó granel a China en 2021.