En los últimos tiempos, por intereses contrapuestos de otras bebidas como la cerveza y las gaseosas, principalmente en Europa pero también en América, distintas organizaciones, incluso oficiales de gobierno, han exagerado los presuntos riesgos del consumo de vino, una bebida cuyos efectos benéficos están comprobados en la medida en que no se ingiera en exceso o en condiciones no recomendables como antes de conducir, por menores o embarazadas. Ante esta situación, que incluye la propuesta de incluir en las etiquetas de las botellas de vino advertencias sobre el peligro del consumo de alcohol, como se hace en las etiquetas de cigarrillos, la Organización Internacional de la Vid y el Vino (OIV) recordó que ha emitido Resoluciones claras al respecto, fáciles de consultar en forma libre en su web.
La protección de la salud de los consumidores es una de las principales prioridades de la Organización Internacional de la Vid y el Vino (OIV). La comunicación responsable sobre el consumo de vino es fundamental. En este sentido, resulta de interés conocer las principales recomendaciones formuladas por la OIV en la Resolución OIV-SECSAN 679-2022.
La Resolución OIV-SECSAN 679-2022 “Recomendaciones en materia de difusión de información sobre el consumo de vino” se aprobó en la Asamblea General del 43.o Congreso Mundial de la OIV, celebrado en México en 2022. En ella se subraya la necesidad de seguir investigando sobre la relación entre el vino y la salud, y sobre cómo percibe el consumidor dicha relación en el contexto de una dieta saludable. Asimismo, contiene recomendaciones dirigidas a los Estados miembros y otras partes interesadas para garantizar que la comunicación en materia de consumo de vino sea equilibrada y tenga una base científica. El objetivo es proteger la salud de los consumidores y permitir la toma de decisiones con conocimiento de causa.
El compromiso de la OIV
La Resolución OIV-SECSAN 679-2022 refleja el férreo compromiso de la OIV de informar a los Estados miembros y las partes interesadas sobre medidas para proteger la salud de los consumidores y garantizar la inocuidad alimentaria. En la resolución también se subraya la importancia de recabar, analizar y divulgar información precisa teniendo en cuenta los riesgos del consumo intensivo y la influencia de los patrones de consumo.
«Las presentes recomendaciones reflejan los resultados de revisiones sistemáticas y metaanálisis y tienen por objeto favorecer la toma de decisiones con conocimiento de causa en relación con el consumo de vino. El objetivo es informar a los consumidores de vino de que es conveniente consumirlo con las comidas y con arreglo a las recomendaciones nacionales en materia de consumo de alcohol, y abstenerse de tomar bebidas alcohólicas en determinadas circunstancias (por ejemplo, que no tenga la edad mínima legal para el consumo de alcohol, cuando se conduce o durante el embarazo)», dice la resolución en cuanto a sus objetivos.
La OIV trabaja en colaboración con los Estados miembros para elaborar y comunicar información basada en investigaciones científicas sobre los aspectos sanitarios y nutricionales del vino y otros productos vitivinícolas en distintos contextos sociales de consumo. En este sentido, resulta esencial hacer un seguimiento de los principales trabajos de investigación en los que se analizan la relación entre el vino, las uvas y la salud, los efectos de los compuestos fenólicos, las estrategias para reducir los riesgos asociados al consumo nocivo de alcohol, los hábitos de consumo y la evaluación y divulgación de datos científicos. Este asunto también se aborda en el Plan Estratégico 2025-2030 de la OIV, en el que se hace hincapié en la necesidad de conocer la relación entre el consumo de productos vitivinícolas y la salud.
En la Resolución OIV-SECSAN 679-2022 se recomienda que la comunicación dirigida a los consumidores de vino incluya:
- información sobre los riesgos asociados al consumo nocivo de alcohol, más allá de las directrices nacionales en materia de consumo de bebidas alcohólicas,
- información específica para grupos de riesgo, como las mujeres embarazadas o en período de lactancia.
- consejos prácticos para reducir los riesgos, como, por ejemplo, restringir el consumo a las comidas y alternarlo con agua,
- información relativa a los límites de consumo según las recomendaciones nacionales en materia de consumo de alcohol.
En la sección “Normas y documentos técnicos” del sitio web de la OIV los lectores podrán encontrar más información sobre los riesgos asociados al consumo nocivo de alcohol, revisiones científicas, resoluciones relacionadas con aspectos sanitarios, así como un listado de directrices nacionales en materia de consumo de bebidas alcohólicas. Para ello, deberán seleccionar la pestaña “Comisión Seguridad y Salud” en el menú “Adoptado por”.
Fuente: Organización Internacional de la Vid y el Vino (OIV)