El Grupo Altasur Sudamérica -de origen mendocino y con plantas en Luján de Cuyo, Mendoza, y en Quilicura, Santiago de Chile- puso en escena recientemente su nuevo sitio web http://grupoaltasur.com/, de fácil navegación y con información completa sobre los productos de las empresas globales que representa en todo el continente: Diam (tapones), Seguin Moreau (barricas), Vivelys y Boisé (alternativos de madera). En esta nota recorremos brevemente el sitio y detallamos una de las últimas innovaciónes de Diam: la utilización de CO² supercrítico para extraer del corcho los compuestos responsables de las desviaciones sensoriales en el vino.
El Grupo Altasur, de fuerte presencia con sus productos en la mayoría de las bodegas argentinas y sudamericanas, nació a principios de la década del 2000 a partir del trabajo de Alejandro Karnincic como agente comercial directo de DIAM, y luego se comenzó a crear un equipo de trabajo con Amelia Bianchi y Leandro Benedetti. Al cabo de algunos años se incorporó el enólogo Aurelio Sesto, y con él Altasur Argentina SA fue expandiendose cada vez más. Con la representación de los tapones DIAM, uno de sus productos más reconocidos y demandados, hoy llegan a Brasil, Uruguay, Bolivia, Perú y Ecuador.
Así como Altasur expande sus horizontes geográficos, también amplia su oferta de productos y servicios enológicos con las marcas Seguin Moreau, Vivelys y Boisé.
En la nueva web, en la pestaña «Soluciones enológicas», Altasur describe en detalle cada uno de los productos de sus cuatro empresas globales representadas, explicitando sus funciones, disponibilidad y otros datos de interés para el posible cliente.
La renovada y amigable web también incorpora la pestaña «Noticias», con novedades tecnológicas de sus productos e interesantes notas con contenidos generales de interés para el enólogo y el empresario.
Lo nuevo de DIAM: un invento antiguo perfeccionado con tecnología
Con el procedimiento «Diamant®», DIAM inventó el tapón de corcho sin sabor a tapón hace 20 años. En la actualidad, mediante investigaciones, nuevos desarrollos y, sobre todo, mejorando y adaptando los tapones de acuerdo a las evolución de los mercados y la demanda del consumidor, la empresa sintoniza con los desafíos del mañana. Las exigencias se orientan a nuevas prestaciones de fabricación, soluciones de taponado cada vez más responsables y una adecuación a la demanda.
Probado y aprobado por numerosos laboratorios internacionales, DIAM es un tapón innovador que conjuga la tradición de un obturador de corcho con la seguridad mecánica y organoléptica de un taponado tecnológico. Se fabrica con diferentes niveles de permeabilidad disponibles en función de las necesidades de oxígeno de cada vino.
Etapas de fabricación
Extracción de corcho: El corcho, principal materia de los tapones DIAM, le proporciona al producto la elasticidad necesaria. Para fabricar estos tapones, cada año se extraen tradicionalmente a mano 35.000 toneladas de corcho.
Maturación, triturado y tamizado: Después de 6 a 12 meses de secado, el corcho bruto se lava con agua hirviendo, se tritura y se criba mediante densimetría. Sólo se conserva la flor de corcho, la parte más noble de la corteza (suberina).
Procedimiento Diamant: Este procedimiento patentado y respetuoso con el medio ambiente utiliza el CO² supercrítico para extraer del corcho los compuestos responsables de las desviaciones sensoriales, y entre ellas el famoso sabor a tapón (TCA).
Moldeado: Para garantizar una perfecta homogeneidad y el control del envejecimiento de los tapones, se añaden microesferas exclusivas. Completada con agua y un aglomerante, la mezcla se moldea y se cuece en un horno.
Mecanizado y marcado: Una pulidora ajusta el diámetro, una cortadora la recorta a la longitud deseada creando los biseles. Los tapones se satinan, y luego las cabezas y los cuerpos se personalizan para cada cliente mediante un marcado a fuego o láser.
Controles: Cada lote de tapones se somete a controles de calidad rigurosos al salir de la fábrica, al llegar a cada uno de los centros de acabado y después del marcado y el tratamiento de superficie. Las muestras se almacenan en el laboratorio.
Logística: El flujo de fabricación, junto con la red de distribuidores, permite a la empresa madre y sus distribuidores en todo el mundo estar lo más cerca posible de sus clientes. En la actualidad, estos productos se distribuyen en 67 países.
Los tapones DIAM se fabrican según un plan de controles estricto, basado en análisis de laboratorio con un sistema de gestión inspirado en la norma ISO 9001.
Dos plantas en España
Situada en el centro neurálgico del corcho, en San Vicente de Alcántara (Badajoz, España), Diam Corchos fue fundada en el año 1986, formando parte de un grupo con gran tradición en la actividad corchera. Su apuesta constante por la innovación ha desembocado en la ampliación de una segunda planta, denominada Diamante 2, dotada de los mayores avances tecnológicos conocidos en España. La inversión total, entre las dos plantas, ha sido superior a los 30 millones de euros.
El tapón tratado con la patente de la tecnología Diamant® que utiliza CO2 en estado supercrítico en su proceso de tratamiento de extracción de aromas del corcho para producir el tapón DIAM, ha sido ya probado mundialmente en una cifra cercana a los 1.000.000.000 de unidades en las bodegas y regiones vitícolas más importantes del todo el mundo.
Gracias a esta innovadora tecnología, los tapones DIAM reúnen todos los requisitos de calidad, seguridad alimentaria y ayuda en el desarrollo del bouquet final del vino: se destaca por hacer desaparecer totalmente los niveles de TCA (*TCA cedible al límite de cuantificación 0,5 ng/l), así como otras 150 moléculas que pueden enmascarar el aroma de los caldos.
Además, también se destaca por mantener un comportamiento homogéneo en todos los tapones, garantizando una calidad constante y un preciso control de la permeabilidad del aire, para que la evolución del vino se ajuste a las características definidas por los enólogos. Y todo ello en un producto natural y ecológico, respetuoso con el medio ambiente.
Balance de carbono
La compañía dispone durante la producción de un balance de carbono muy favorable respecto a otros tipos de tapones, llegando incluso a utilizar el propio polvo de corcho como combustible. Diam Corchos produce 3 millones de tapones diarios para vinos tranquilos y el granulado necesario para fabricar los tapones para vinos espumosos y espirituosos en otra planta del grupo. Además, la empresa cuenta con numerosas plantas de terminación donde se les realiza la personalización del cliente y el tratamiento superficial en los principales países productores de vino.
Tecnología de avanzada
De cara al futuro, el objetivo de la compañía es centrarse sobre todo en el estudio de las permeabilidades y la oxigenación, ofreciendo a los enólogos distintas modalidades y formulaciones que se puedan utilizar en los diferentes tipos de vinos que han de ofertar al mercado eso si con total garantía y seguridad enológica. Las plantas que fabrican los tapones Diam cuentan con la certificación FSSC 22000, cumpliendo con los estándares de las normas de higiene HACCP. La totalidad de los componentes de los productos Diam responden a todas las normas de calidad y seguridad alimentaria europeas y americanas (FDA).
Cómo controlar a la larga la contribución de oxígeno del tapón y sus efectos sobre el envejecimiento del vino? Este es un terreno de investigaciones e innovaciones en las que los equipos I+D de DIAM participan muy activamente desde hace muchos años. Para eso, Diam Bouchage está asociado en trabajos con los principales centros mundiales de investigación en enología.
Según si el vino se bebe en 6 meses o después de 30 años, ya sea tinto, rosado o blanco, según sea más o menos sensible a la oxidación, los enólogos disponen de toda la información para realizar su elección. Los aportes de oxígeno durante los primeros meses (OIR = Oxygen Initial Release) y a largo plazo (OTR = Oxygen Transfert Rate) son cuantificados para cada receta de tapón. Una vez tomada la decisión, la permeabilidad será homogénea en todas las botellas de ese lote.
La limpieza con CO2 supercrítico ya era conocida para otras aplicaciones industriales (descafeinización, extracción de la nicotina del tabaco, etcétera), pero tuvieron que pasar 7 años de investigaciones para aplicarla al corcho y dar paso en 2004 a la tecnología Diamant®. Sin disolventes ni productos químicos, este procedimiento de desaromatización del corcho funciona en circuito cerrado respetando el medio ambiente. Permite eliminar hasta 150 moléculas que provocan desviaciones sensoriales que pueden afectar al vino embotellado. Liberados los tapones de los compuestos volátiles y de las moléculas de riesgo, están garantizados por unidad sin TCA liberable (< 0,3 ng/l).
- La harina de corcho se introduce en el autoclave para un ciclo de alrededor de 6 horas.
- Se introduce CO2 en estado gaseoso en el circuito.
- Por compresión y aumento de la temperatura, el CO2 alcanza un estado «supercrítico», entre gaseoso y líquido.
- Luego, es inyectado por la parte inferior del autoclave y sube a través del corcho.
- El CO2 arrastra consigo más de 150 moléculas que pueden alterar el sabor del vino, y sobre todo el tricloroanisol (TCA), responsable del «sabor a tapón».
- El corcho purificado se recupera y se utiliza para la fabricación de nuestros tapones.
- Por descompresión, el CO2 vuelve a pasar al estado gaseoso y se pone a temperatura ambiente para ser almacenado.
- El CO2, utilizado en circuito cerrado, es filtrado y reintroducido para el ciclo de limpieza siguiente.
- Las moléculas extraídas en forma de líquido espeso se reciclan como activo para el sector cosmético.
Diam, Origine by Diam, Mytik Diam así como Setop Diam, son los tapones dedicados respectivamente a los vinos tranquilos, vinos espumosos y bebidas espirituosas, que garantizan la neutralidad sensorial y el respeto de los aromas, año tras año y botella tras botella. Desde el inicio de la década de 2000, estos tapones han demostrado su eficacia, protegiendo a miles de millones de botellas en todo el mundo y proporcionando tranquilidad a los viticultores que confían en este sistema.