La Asociación de Viñateros de Mendoza (AVM) participó de la Asamblea Regional de Viñateros que se realizó el pasado 22 de noviembre en Media Agua, San Juan, con el fin de buscar soluciones y combatir lo que calificaron como «situación terminal» de la vitivinicultura argentina.
Desde inicios de 2019 es interés de las entidades de ambas provincias nuclearse y tratar temas comunes que afectan a la vitivinicultura del país. Los miembros de la Asociación de Viñateros de Mendoza (AVM) presentaron en la mencionada reunión un diagnóstico del escenario actual y un panorama específicos de la denominada «Quinta Zona» vitivinícola de Mendoza, castigada recientemente por fuertes tormentas de granizo.
Una preocupación común de los productores mendocinos expuesta en la asamblea fue la escasa rentabilidad en la venta del vino. Los productores se encuentran en una situación que llamaron «terminal». A esta difícil situación se suma la actual crisis hídrica que repercute de manera directa en las fincas de Mendoza.
Ante el presente escenario, desde la AVM se propusieron alternativas para mitigar efectos negativos y aunar la lucha entre las provincias productoras más importantes del país.
Como temas comunes de análisis se abordaron los desajustes en la cadena de valor de la vitivinicultura, los contratos de venta de uvas dolarizados y el precio insuficiente. Otras de las ideas se dirigieron a la conformación de un pool de ventas de uvas blancas.
La entidad anfitriona, la Mesa Vitivinícola de San Juan, estuvo acompañada por otras fuertes instituciones vitivinícolas de esa provincia, como la Cámara de la Producción, Empaque y Comercio Frutihortícola de San Juan, la Asociación de Viñateros de Angaco, la Asociación Civil de Viñateros Autoconvocados, la Sociedad de Chacareros Temporarios de San Juan y el Consorcio de Cooperación.
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