En los últimos años, gracias al apoyo del Estado provincial, al asesoramiento de enólogos y agrónomos en su mayoría mendocinos y a inversiones privadas, la vitivinicultura en La Pampa pegó un salto cuantitativo y cualitativo que hoy se traduce en una cosecha 2021 récord, la construcción de bodegas y el desarrollo de rutas del vino para enoturismo. En este marco, a comienzos de marzo pasado, el gobernador Sergio Zilioto anunció una importante inversión estatal para levantar un establecimiento en la zona de Casa de Piedra -al sur de la provincia, cerca del límite con Neuquén- que en principio elaborará 300.000 litros de vino al año y a mediano plazo 1.000.000 de litros.
Está previsto que la construcción de la bodega en Casa de Piedra comience entre noviembre y diciembre de este año. Los planos y los fondos ya están disponibles y sólo falta el okey final del gobernador Sergio Zilioto y su aprobación legislativa. La idea es que la producción de uvas de la provincia pueda ser elaborada en su mayor porcentaje en el territorio, en lugar de enviarse a vinificar a Mendoza o Neuquén, como ocurre actualmente. Así, con elaboración propia, el Instituto Nacional de Vitivinicultura categorizará a la mayor parte de los vinos pampeanos dentro de la denominación Patagonia, lo que es un dato ventajoso incluso a la hora de exportar.
Según sintetizó Enolife en una nota del 2/10/2020 «La Pampa diseña una Ruta del Vino y alista bodegas para recibir visitantes tras la pandemia», la provincia contaba para esa fecha con 335 hectáreas de viñedos, 25 bodegas en actividad o en construcción y una producción en la cosecha 2020 de 2 millones de kilos de uva, de los cuales en las bodegas locales se elaboraron 944.747 kilos y el resto en Mendoza, según datos del INV.
Hoy la situación productiva está cambiando gracias al progreso tecnológico, las inversiones de grandes bodegas como Catena Zapata y una cosecha récord prevista para este 2021, que según algunos viñateros duplicará la de 2020.
Según confirmó al Diario de La Pampa el vicepresidente el Ente Provincial del Río Colorado (EPRC), Roberto Bigorito, ya están en el Ministerio de Obras Públicas de La Pampa los planos de la bodega que se construirá en Casa de Piedra. «Estará sobre una barda, en la ruta 34, a pocos metros del cruce con la nacional 152; tendrá vista al lago y a la represa», precisó el funcionario.
La construcción de la bodega está motivada en dos factores. Uno es el costo, porque se deben alquilar bodegas fuera de la provincia o alejadas, se paga un doble flete. Para llevar y después para trasladar la producción a los lugares de elaboración».
Roberto Bigorito, vicepresidente del Entre Provincial del Río Colorado
Por otro lado, Bigorito señaló que es de interés de las bodegas inversoras en la zona -Catena Zapata y Cassone- que la producción y los vinos no pierdan el sello «Patagonia» que ya tiene la región. «Si la uva sale de la zona, pierden el sello Patagonia, que es muy valioso», explicó el vice del EPRC.
Y detalló: «Este martes (por el martes 50/3) tuvimos una reunión con representantes del Ministerio de Obras Públicas y entregamos los planos. Todo es de acero inoxidable».
En el asesoramiento para el diseño agronómico, tecnológico y arquitectónico de la bodega participó el enólogo mendocino Enzo Mugnani, también funcionario del EPRC. La construcción de la bodega será licitada, tendrá una obra civil y otra parte de compra del instrumental y equipamiento de la bodega propiamente dicha. «Está todo definido, el tipo de material de techo, paredes y piso», señaló Bigorito.
La bodega ya tiene su lugar de emplazamiento: será en la ruta 34 -la que conduce a 25 de Mayo-, a unos 600 metros del cruce con la nacional 152. Estará sobre una barda, tendrá vista al lago y la Villa Casa de Piedra, con un enorme ventanal.
Además, el lugar fue pensado para el acceso de los camiones y del turismo. «Allí habrá degustación», detalló Bigorito.
En cuanto a la capacidad de almacenamiento de la bodega, el máximo se logrará en tres etapas. En la fase inicial, el límite será de 350.000 litros; en la siguiente llegará a los 700.000, y finalmente arribará a 1 millón de litros, con el objetivo de procesar toda la uva que se produzca en la región.
En 5 hectáreas, 22 variedades de cepas
Los números de la vendimia del EPRC también alientan el rumbo. «Con el pinot noir, los números fueron altos. El chardonnay dio 19.000 kilos por hectárea de promedio. El malbec, 18.000 kilos; el bonarda, unos 30.000 kilos. Todas las variedades duplicaron y hasta triplicaron la producción del año pasado», detalló Bigorito.
«Esto es un equipo: desde el personal que toma el agua y la envía a los viñedos hasta el personal del Ente que toma el agua. Es un excelente equipo para que los insumos lleguen en tiempo y forma», destacó el funcionario. Y agregó: «Todo esto, sumado al trabajo del enólogo Enzo Mugnani y a la calidad de la tierra y del agua, hacen que la cantidad de uva que está saliendo de Casa de Piedra esté sorprendiendo».
El objetivo del EPRC es demostrar que todas las variedades seleccionadas «funcionan» en las 5 hectáreas de viñedo del lugar. «Ya hay 11 variedades que funcionaron. Ahora agregamos otras 11 que fueron implantadas el año pasado», concluyó Bigorito.