Para esta época del año, la ciudad y toda la provincia se visten de fiesta para recibir a decenas de miles de turistas y lugareños que llenan las calles y admiran el agua de las fuentes teñidas de borravino. Con este breve recorrido esperamos despertar el deseo de disfrutar el paisaje y tomar los buenos vinos y espumantes que aquí nacen.
Si bien el Malbec es el vino emblema mendocino, hay otros varietales, sabores, colores y aromas que crecen con fuerza en diversos rincones. Se destacan el vino Bonarda en el Este provincial, los espumantes de Guaymallén y el Malbec del Pueblo del Vino, la Consulta, en San Carlos, Valle de Uco. Las distintas variedades de uvas encontraron en sus aires, sus cielos y su sol un entorno perfecto para crecer y desarrollarse.
“Un rumor de acequias va arrullando a la ciudad, que prestó también su colorido a mi cantar”, reza la marcha de la Vendimia, que habla de las acequias, estas verdaderas venas que surcan la provincia y riegan los vergeles donde crecen las viñas.

Mendoza, en el centro-oeste de Argentina, es una de las provincias más importantes del país, la cuarta en población, con 2 millones de habitantes, después de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe. Cuenta con 18 departamentos -o partidos- con características particulares, diversos ritmos de vida, diferentes paisajes, pero un mismo leitmotiv: los canales de riego creados por los pueblos originarios de la región.
A la vez, cada departamento cuenta con su idiosincrasia y sus formas particulares de crear vino. Así, por ejemplo, el Bonarda avanza con fuerza desde San Martín y los espumantes hacen historia en Guaymallén. Hasta hay un Pueblo del Vino, La Consulta. Y todo es gracias al agua que recorre cada rincón de Mendoza, por el legado de los huarpes: las acequias.
Tierra del Bonarda
Su color bordó con matices violáceos y sus aromas a frutas rojas frescas, flores violetas, laurel y anís revelan sus taninos suaves y aterciopelados. Quiso crecer y en el departamento General San Martín. En el Este de Mendoza encontró su sitio perfecto. Por eso esta región se convirtió en la mayor productora de uva bonarda a nivel nacional.
Esta variedad es considerada la segunda cepa de uva tinta más importante en la Argentina, y en Mendoza se concentra 84% de todas las hectáreas implantadas, con 17.712 hectáreas. La mayor superficie se encuentra en San Martín, con 3.758 hectáreas cultivadas.
San Martín, tierra que lleva el nombre del Libertador de Chile, Argentina y Perú y está íntimamente ligada a su historia, es considerada como el mayor productor nacional de esta uva y con el tiempo se ha instalado la idea de que es la Capital Internacional del Bonarda.
Las burbujas nacen en Guaymallén
En el Gran Mendoza se encuentra el departamento más poblado de la provincia, que conjuga tanto los fenómenos rurales como los urbanos. Es tierra de pueblos originarios, que supieron dominar el agua que les regalaba la Cordillera de los Andes.
Guaymallén es sede de más de 15 establecimientos elaboradores de espumantes, con una producción de 10 millones de botellas al año. Además, es líder en la región de Cuyo y forma parte del segundo cinturón verde del país en la producción de verduras y hortalizas.
El primer espumante de la Argentina fue elaborado en 1902 en este departamento, precisamente en la Bodega Santa Ana y gracias al espíritu creativo del inmigrante alemán Carlos Kalles y del italiano Luigi Tirasso.
El vino espumante forma parte de la historia de Guaymallén. En este sitio, en 1890, se radicó este inmigrante alemán, quien se instaló en la conocida Bodega Santa Ana. Dos años después comenzó a explorar la producción de espumante y consiguió desarrollarlo diez años más tarde. En 1902, hizo su presentación en la Capital Federal. Desde ese entonces, en Argentina tenemos la posibilidad de consumir, aparte del champagne o espumante francés, el espumante argentino.
El Pueblo del Vino
La Consulta ofrece atardeceres silenciosos, de pájaros y rayos del sol jugando a las escondidas con las montañas. Álamos susurrantes, una que otra bicicleta y ellas llevando vida: las acequias. Las de siempre, las eternas.
Está ubicado al pie de los Andes, en el corazón del Valle de Uco, y se especializa en la producción de uvas y vinos malbec. Este paraje rural, en el que viven apenas 10.000 personas, se convirtió en el primer “Pueblo del Vino” de la Argentina.
Cuenta con un clima ideal para la producción de vinos de calidad y con bodegas boutique que reciben la visita de miles de turistas al año. Además, es un sitio lleno de historia, relacionado con la campaña libertadora del General San Martín.
Desde la Ciudad de Mendoza, la manera más sencilla de llegar hasta La Consulta es por la Ruta 40. El recorrido es de 105 kilómetros. Al llegar a la zona de Tunuyán, girar hacia el oeste, por la Ruta Provincial 92, y luego al Sur, por unos 25 kilómetros hasta llegar al destino.
Allí, seguramente, una copa de un buen vino mendocino te estará esperando. De fondo, el cantar del agua en las acequias, celebrando el final del viaje.
Fuente: Prensa Gobierno de Mendoza