El 27 de mayo pasado, representantes de las Grandes Capitales del Vino se reunieron por internet para analizar la coyuntura y las perspectivas del enoturismo. Una de las propuestas surgidas desde Mendoza fue desarrollar rápidamente un protocolo único a nivel global que le permita al turismo vitivinícola convertirse en una de las primeras actividades turísticas en reactivarse después del confinamiento.
Mendoza forma parte de la red de las Grandes Capitales del Vino desde el año 2005. Está representada por el Ente Mendoza Turismo (Emetur) y por ProMendoza. Ambas entidades participaron de la reunión virtual llevada a cabo el pasado miércoles 27 de mayo. La presentación fue realizada por Jimena Fernández Arroyo, directora de Promoción Turística del Emetur. Además, estuvieron presentes por Mendoza Romanella Paggi, de la agencia turística Ketek, y Gabriel Fidel, consultor especializado en enoturismo.
En la reunión participaron representantes de las 11 ciudades que actualmente conforman la red: Adelaida (Australia), Bilbao/Rioja (España), Burdeos (Francia), Casablanca/Valparaíso (Chile), Ciudad del Cabo/ Tierras Vitivinícolas del Cabo (Sudáfrica), Lausana (Suiza), Maguncia (Alemania), Mendoza (Argentina), Oporto (Portugal), San Francisco/Valle de Napa (Estados Unidos) y Verona (Italia).
Las exposiciones fueron las siguientes:
Burdeos, Francia: Catherine Leparmentier, secretaria general de las Best Wine Capitals, quien dijo que hace 10 días retomaron las actividades enoturísticas, luego de 2 meses de aislamiento obligatorio.
Verona, Italia: Roberta Garibaldi, profesora de la Universidad de Bérgamo, Italia, directora del Instituto de Investigación y Tendencias (Food Tourism Research & Trends) de la Asociación Mundial de Turismo Gastronómico (World Food Travel Association). Contó que «El 87% de las bodegas italianas considera al enoturismo una parte importante de sus ingresos». Su modelo de negocios cuenta con una sólida base de visitantes locales -detalló-, lo que le da una fortaleza en comparación a otras regiones que se enfocan especialmente en el turismo extranjero. Resaltó la importancia de implementar un sistema de reservas obligatorias y de incrementar las actividades al aire libre, como los paseos en bicicleta y picnics. En este sentido, el Estado italiano está apoyando la compra de bicicletas para ofrecer alternativas al uso de los medios públicos de transporte como medida de prevención.
Mendoza, Argentina: Jimena Fernández Arroyo, directora de Promoción Turística del Emetur. Relató cómo desde el 20 de marzo se acata una cuarentena obligatoria con suspensión de las actividades turísticas y cierre de fronteras interprovinciales e internacionales y que, a pesar de ello, se pudo realizar la vendimia y elaboración con rigurosos protocolos de operación, y seguir comercializando vino en tiendas y por delivery.
Fernández Arroyo mencionó luego las iniciativas público-privadas, que incluyeron encuestas para conocer las expectativas de los turistas, trabajos en comisiones conjuntas para el desarrollo de protocolos y campañas promocionales de los atractivos turísticos mendocinos a través de redes sociales.
Sudáfrica: Elmarie Rabe, representante de la zona vitivinícola Stellenbosch, cercana a Ciudad del Cabo. Informó que su país declaró la cuarentena obligatoria el 27 de marzo. También pudieron terminar la cosecha y realizar básicas operaciones en bodega, tarea que luego no lograron monitorear porque se prohibió todo tipo de traslado de personas o productos, así como la venta de cualquier tipo de alcohol para beber. Están a la espera de que en junio se autorice nuevamente la comercialización de vino, pero considera que faltan varios meses para reactivar el enoturismo. Por el momento, se encuentran desarrollando protocolos y consideran que «la confianza es la nueva moneda de cambio», ya que los turistas van a buscar experiencias y establecimientos que les brinden confianza para poder disfrutar de sus programas. Su foco es impulsar el redescubrimiento de la zona por los habitantes de cercanías. Para ello, están desarrollando iniciativas como búsquedas del tesoro que vinculen a distintos establecimientos del área.
Burdeos, Francia: Lydie Bordes, de la Cámara de Comercio de esa ciudad, explicó que, desde hace dos semanas en Francia se retomaron las actividades en las bodegas. Algunas abrieron al turismo pero no recibieron un flujo interesante de visitantes, por lo cual muchos establecimientos han decidido no reabrir porque los costos son mayores que los beneficios. Desde la Cámara se está acompañando a las empresas a realizar las gestiones para obtener las ayudas ofrecidas por el gobierno y así poder reactivar sus operaciones.
Por el momento se les permite a las personas trasladarse hasta 100 kilómetros de su domicilio y reunirse en grupos menores a 10 personas. Por ello, las bodegas están desarrollando propuestas para impulsar el turismo de cercanías, teniendo en cuenta los protocolos de salud correspondientes como por ejemplo que la copa utilizada se la lleven a su casa, no permitir la interacción de los visitantes con el personal técnico de la bodega y privilegiar las actividades en el exterior o áreas muy bien ventiladas.
Oporto, Portugal: João Falcão, gerente de Vinitur. Contó que su región también se está enfocando en las actividades al aire libre. Quieren impulsar el uso de biclicletas y la revalorización del «slow tourism» (turismo lento o pausado), que es un concepto que incluye disfrutar de la tranquilidad y la naturaleza. Son concientes de que Oporto queda un poco alejado de los grandes centros europeos y que necesitan que se reactiven los vuelos aéreos para que lleguen los turistas extranjeros, y por ello están trabajando ahora en desarrollar los protocolos. Ya tienen un sello llamado «Clean and Safe» (limpio y seguro), que identifica a los emprendimientos turísticos, empresas de excursiones y agencias de viajes que implementan y respetan protocolos de higiene y limpieza para prevenir y controlar el Covid-19.
Adelaida, Australia: Caroline Densley, Experta en alimentos, vinos y viajes culturales. Añadió que su país también implementó protocolos y quienes no los cumplen tienen una multa de 5.000 dólares australianos.
El consultor mendocino Gabriel Fidel, invitado especial del Emetur a la reunión virtual, destacó la importancia de trabajar en estandarizar protocolos internacionalmente desde las Grandes Capitales del Vino e hizo hincapié en el posicionamiento que esto puede traer a la red.
Gabriel Fidel resumió su participación en la reunión de esta manera: «Desde nuestra parte propusimos que Great Wine Capitals desarrolle un protocolo internacional para todas las regiones vitivinícolas, que permita incorporar todos los elementos que tienen que ver con la bioseguridad. Y para que el enoturismo de todo el mundo pueda venderse como una actividad que da respuestas certeras a la seguridad que hoy busca la gente. Y para que los gobiernos apoyen esta actividad. Pero, sobre todo, que permita posicionar al enoturismo frente a otros productos turísticos que existen en el mundo. Con este protocolo podemos ser la primera actividad turística en comenzar la apertura de la pospandemia. Me parece muy importante trabajar en coordinación, compartir experiencias e implementar medidas en común».
Rioja, España: Marta Echavarri. Expresó que están retomando lentamente las actividades. Durante el aislamiento realizaron diversas acciones para mantenerse en la mente de los turistas. Algunas fueron el sorteo de 15.000 visitas a bodegas de la región, degustaciones virtuales y la posibilidad de conocer sobre los vinos de Rioja gratuitamente por internet a través de la Rioja Wine Academy, actividades a las que asistieron mas de 9.000 personas. El foco está puesto en poder reabrir de manera segura, y para ello se van a privilegiar las actividades al aire libre. Desde la DOC Rioja están también formando a las bodegas para que puedan desarrollar su comercio electrónico y mejorar su presencia digital.
Para cerrar la conversación, Catherine Leparmentier, invitó a pensar en la creación de «clubes de vinos» en las distintas bodegas, que ofrezcan todo el año beneficios a quienes viven en su zona de influencia cercana para fortalecer así la relación y generar una base constante de clientes.
Fuente: Emetur