La tendencia a la desalcoholización de vinos está en auge y genera grandes oportunidades de negocio. En la Feria Simei organizada por la Unión Italiana Vini (UIV), que tiene lugar del 12 al 15 de noviembre en Milán, Italia, las tecnologías dedicadas a este proceso están recibiendo una atención sin precedentes. A pesar de la prohibición vigente en Italia sobre la desalcoholización de los vinos, los fabricantes italianos y las empresas extranjeras están apostando por estas innovaciones tecnológicas para impulsar la producción y comercialización de vinos sin alcohol, un segmento que está creciendo rápidamente en mercados internacionales como Estados Unidos, Alemania y los países nórdicos europeos.
Según destacaron desde la Unión Italiana del Vino (UIV) -entidad organizadora de la Feria Simei que se realiza desde el 12/11 en Milán- las tecnologías para la desalcoholización son las que están registrando mayor interés en la exposición.
Los más interesados son los 70 compradores estadounidenses que representan a las principales empresas vitivinícolas, desde Constellation Brands hasta Francis Ford Coppola, pasando por Jackson Family, un gigante con viñedos en EEUU. También generaron atención en países como Canadá, Francia, Sudáfrica, Chile, Australia e Italia, a pesar de que en este último aún no está permitida la elaboración de vinos desalcoholizados.
Randy Ullom, enólogo y vicepresidente del gigante californiano del vino Jackson Family Wines, puso en evidencia la mirada diferente -pragmática y no ideológica, la que suele ser frecuente en Italia- sobre el tema de los vinos desalcoholizados en el país norteamericano: «En Estados Unidos preferimos llamarlos low sugar más que low alcohol«.
A esta opinión se une David Crippen, director de Enología de Bear Creek Winery, la sexta mayor empresa vitivinícola familiar de Estados Unidos, que pasó por Simei precisamente para estudiar la oferta de este tipo de maquinaria: “Casi todo el equipo que tenemos en la bodega es italiano y el salto de calidad que han dado los vinos italianos en los últimos 40 años está probablemente relacionado con estas tecnologías».
En la Simei 2024, la tendencia productiva Nolo (no y bajo alcohol) es un boom y los fabricantes de estos equipos son de Italia, país líder en tecnologías para el vino, que quiere seguir participando en el mercado, a pesar de la prohibición de desalcoholización aún vigente.
El primer día de la feria -12/11- se presentó oficialmente Libero, una de las últimas innovaciones para la producción a gran escala de vinos desalcoholizados. Un equipo de ciclo continuo capaz de eliminar el alcohol del vino, que Omnia Technologies ha denominado así porque “es capaz de hacer disfrutar del vino sin restricciones”.
“Desde el inicio de la feria -dicen desde el grupo italiano, que cuenta con 400 ingenieros y técnicos en 39 sedes de producción- hemos notado un interés sin precedentes, especialmente desde España, Grecia y Estados Unidos. También los productores italianos expresan curiosidad, pero su situación de estancamiento no les permite arriesgarse más”.
El mendocino Guillermo Russo, gerente comercial de Omnia Technologies para toda América, dijo en entrevista con Enolife que «Libero, el equipo que presentamos que está bajo el paraguas de la marca Permeare, tiene mucho futuro porque su proceso de desalcoholización es distinto al de otros competidores. Nosotros podemos decir que ‘realmente desalcoholizamos vinos’, lo cual es muy importante porque el proceso se realiza a partir del producto terminado, es decir del vino. Y esto permite preservar sus aromas, sabores y texturas esenciales, ofreciendo la calidad que los amantes del vino esperan en opciones con bajo o nulo contenido alcohólico.»
«Básicamente -agregó el empresario mendocino-, para contarlo de manera fácil, el sistema hace pasar el vino a través de membranas y lo separa en dos partes por ultrafiltración, dejando por un lado el vino y por el otro el agua y el alcohol. Y luego, mediante torres de destilación, se separa el alcohol del agua, y el agua separada se vuelca al vino. Entonces obtenemos dos productos, un vino desalcoholizado y alcohol.»
También la empresa Vason, con 50 años en el campo de la industria enológica, los días de feria ha tenido constantes visitas de empresas de España, Argentina e incluso de India. “El mercado está ahí, en dos años el interés ha crecido -dijo el presidente, Albano Vason-; claro que sería muy diferente si Italia pudiera competir en igualdad de condiciones, tanto en viña como en bodega”. La empresa expuso en Milán la MMR (Master Mind Remove), una máquina diseñada para la desalcoholización, incluso para bodegas de pequeñas y medianas dimensiones.
Desde la demanda hasta la oferta, pasando por la producción, en los pabellones de Simei en Milán, el vino desalcoholizado es el «elefante» en la sala: “El año pasado –dijo el director delegado de Mionetto, Alessio del Savio– gracias a la matriz alemana Henkel, producimos y vendimos 2 millones de botellas de espumoso, y este año hemos duplicado y llegamos a 4 millones. Todas vendidas, especialmente en Alemania, EEUU, los países nórdicos y Europa del Este”.
Fuente: Propias y de la oficina de prensa de UIV