A partir de un informe divulgado por el Observatorio de la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas (Acovi), a cargo de los economistas María José Mescolatti y Luciano Andino, se pueden demostrar los puntos por los cuales se han disparado los costos del 2018 al 2019.
El proceso de elaboración propiamente dicho, como punto de partida de la obtención del vino, implica costos unitarios, precios y margen por cada producto. El insumo primario, la uva, representa en todos los casos más del 87% del costo variable de producción, siendo determinante su precio en la estructura de costos de cada establecimiento.
Datos y conclusiones
- Vinos: La relación litros de vino/kilos de uva se estima en 76%, o sea que por cada kilo de uva recibida se elaboran 0,76 litros de vino. Visto de otro modo, se necesitan 1,315 kilos de uva para obtener 1 litro de vino “limpio”(están contemplados la borra y los desechos).
- Mosto: La relación litros/kilos de uva se estima en 78%, o sea que por cada kilo de uva recibida se elaboran 0,78 litros de mosto. O bien, se necesitan 1,282 kilos de uva para obtener 1 litro de mosto “limpio” (están contemplados la borra y los desechos).
- Para calcular la mano de obra empleada en la elaboración, se asume -según cálculos propios efectuados en distintas bodegas- que en una hora hombre se elaboran 165 litros de producto. Este indicador se aplica para la elaboración de los cinco modelos presentados. Si bien es un parámetro general y se sabe que la demanda de mano de obra en la elaboración varía dependiendo del tipo de producto que se elabore (no es lo mismo elaborar un vino tinto que uno blanco o mosto), se asume este parámetro como promedio para poder llegar a un indicador general de actividad mano de obra en elaboración.
- El precio promedio de la hora hombre se establece, según la tabla del Sindicato de Obreros y Empleados Vitivinícolas y Afines (Soeva), para el mes de mayo de 2019, en $98 por hora ($785,80 el jornal de 8 horas). No se contemplan cargas patronales ni adicionales.
- De acuerdo a estos parámetros, cada litro de vino elaborado insumiría 0,60 centavos de mano de obra.
- Para el cálculo de energía empleada en el proceso de elaboración se estima una relación de 0,176 kwh/litro para el vino y 0,106 kwh/litro para el mosto. Al igual que el parámetro de mano de obra, es un indicador general para cada tipo de producto (sea vino o mosto sulfitado) que tiene en cuenta las actividades de recepción de la uva, despalillado y estrujado, prensa, fermentación, guarda, clarificación, equipos de frío, filtros y bombas, iluminación y climatización. Dado el valor promedio del kwh para mayo, cada litro de vino cuesta en términos de energía empleada 0,39 centavos y cada litro de mosto cuesta en términos de energía empleada 0,24 centavos.
- El costo asociado a reparaciones, mantenimiento y epoxipado se estima en 0,44 por litro elaborado, según referencias del sector.
- Para calcular el margen bruto, los precios de venta de cada producto se toman de referencia del mercado de traslado de vinos, ya que no se considera el fraccionamiento del mismo.
– El costo total al que se llega se ha simplificado de forma de poder generalizar y generar parámetros que permitan obtener un indicador de costos del proceso de elaboración propiamente dicho, obteniendo vino como producto primario o crudo, sin considerar costos asociados al fraccionamiento o embotellado.
– No se consideran amortizaciones, impuestos, gastos administrativos y financieros.
– Se suponen precios de mercado.
Si se comparan los costos mencionados con los valores correspondientes a 2018, se puede observar los incrementos de los costos:
- Mano de obra: 33%
- Energía eléctrica: 87%
- Mantenimiento y reparaciones: 9%.
- En el mosto, el aumento del costo por litro en la energía eléctrica implementada ha aumentado un 89%, pasando de 0,13 centavos por litro en 2018 a 0,24 en 2019.
En cuanto a los tipos de producto, a continuación se detallan los márgenes brutos de costo, en el cual se observa un resultado negativo en todos ellos:
Ante este panorama, las autoridades de Acovi expresaron su preocupación. A continuación, sus opiniones:
Carlos Iannizzotto, gerente de Acovi y presidente de Coninagro, expresó: «Los números aquí expuestos presentan una alarma en cuanto a los resultados de margen bruto, y salvo el caso del vino blanco varietal, el resto presenta márgenes negativos.»
«En consecuencia, se observa que el sector en su conjunto se encuentra atravesando una compleja situación. Es así que desde el cooperativismo entendemos que las herramientas que propicien el asociativismo y la creación de vínculos de largo plazo entre los distintos eslabones de la cadena productiva pueden ser una alternativa, permitiendo que las crisis sean amortiguadas por toda la cadena en su conjunto, como así también que los beneficios sean aprovechados por todos los actores intervinientes. Esto permitirá que cada eslabón se plantee como un negocio sostenible en el tiempo, evitando la expulsión casi automática de pequeños establecimientos -y pequeños productores- que acentúen la concentración y extranjerización de la cadena».
«Recordemos que si bien los beneficios colocan tanto al productor como al elaborador integrado en una mejor situación respecto de quien no lo está, la falta de a crédito a tasas accesibles y acorde al ciclo de producción afecta a todos los actores por igual», concluyó Iannizzotto.
Por su parte, el subgerente de Acovi, Nicolás Vicchi advirtió: «Se observa un incremento notable de la energía eléctrica respecto del año pasado y también de los insumos de elaboración, siendo que la suma de ambos representa más del 40% de los costos de elaboración del vino (sin materia prima) como producto primario. Es más, para el caso de varietales la suma de estos ítems supera el 50%.»
«Si bien este año presenta oportunidades en cuanto a la calidad y sanidad de los vinos elaborados por la muy buena vendimia obtenida, los números aquí presentados sirven como indicador y alerta sobre el eslabón elaborador de la cadena vitivinícola.»
«Es importante mencionar también la situación que atraviesa el sector primario vitivinícola, con datos que al mes de mayo muestran importantes incrementos en los costos respecto al año pasado e ingresos en baja por disminución en el precio del producto.»
Para finalizar, el presidente de Acovi, Eduardo Sancho, sostuvo: «Resulta relevante, ante la situación actual, destacar los beneficios de la integración como el caso de la provisión conjunta de insumos, mecanismo que reduce los costos asociados a la compra y logística de los insumos necesarios para el proceso productivo. Por su parte, los productores integrados cuentan con la posibilidad de vender su vino a un precio superior al de mercado, como así también destacar el asesoramiento técnico permanente que reciben tanto productores como establecimientos elaboradores”
“Consideramos que se debe trabajar activamente en la búsqueda de herramientas que permitan a productores y bodegas invertir en tecnología que mejore los procesos productivos, de manera de lograr una mayor eficiencia y por consiguiente un margen de rentabilidad aceptable.»- concluyó el dirigente del cooperativismo vitivinícola argentino.
Ver en informe completo: http://www.acovi.com.ar/principal/wp-content/uploads/2019/08/Informe-Costos-de-Elaboracion-2019.docx
Fuente: Acovi