La bonarda es una de las cepas más tradicionales de Mendoza, y la segunda variedad tinta más cultivada después de la malbec. Introducida en el país con las corrientes inmigratorias de fines del siglo XIX, su cultivo se inició en la región de Cuyo. Uno de sus sellos característicos es la profundidad de su color.
Desde hace 10 años, productores y bodegueros de la zona donde más se cultiva y elabora trabajan intensivamente para reposicionarla. A fines de noviembre de 2019 se constituyó el “Consejo Asesor Permanente Ad Honorem del Plan Bonarda Argentina”, integrado por conocidos bodegueros, enólogos, productores y técnicos de todo Mendoza.
El denominado «Consejo Asesor Permanente Ad Honorem del Plan Bonarda Argentina» es un órgano consultivo permanente que funciona dentro de la Fundación Bonarda Argentina. Está conformado por más de 40 bodegueros, enólogos, productores y técnicos.
Sobre la génesis de este proyecto, cabe mencionar que hace casi diez años, la Municipalidad de General San Martín estableció como política de Estado el desarrollo y promoción de la cepa Bonarda Argentina, poniendo en marcha un plan con diferentes acciones, que incluyen desde la asistencia técnica a productores y bodegas de la zona para que elaboren vinos bonarda de alta gama, hasta actividades específicas para posicionar al varietal en el mercado. Este llamado «Plan de Promoción y Desarrollo de la Bonarda Argentina» nació a cargo del entonces presidente del Concejo Deliberante de San Martín, Bartolomé «Barto» Robles, quien recientemente asumió como senador provincial en Mendoza por el Partido Justicialista.
“Hace casi 10 años comenzamos a desarrollar el Plan Bonarda Argentina y desde entonces hemos trabajado en conjunto los sectores público y privado, logrando buenos resultados”, indicó el senador Robles.
Entre los logros, Robles destacó la cantidad de etiquetas de bonarda de alta calidad que existen en la actualidad (más de 60 de todo el país), un número significativamente mayor al que había cuando se inició el Plan. También puso de relieve los esfuerzos realizados para que las bodegas hayan podido exportar sus bonardas, tales como una misión comercial inversa de China; la asistencia técnica brindada a bodegas de la zona Este y la permanente participación en ferias de vinos con la marca «Bonarda Argentina».
“Hicimos historia hace más de 9 años y estamos haciendo historia nuevamente, uniéndonos todos para continuar apoyando la promoción del varietal bonarda, con muchos de los más reconocidos enólogos, bodegueros, productores y técnicos de Mendoza, a través de este Consejo Asesor que forma parte de la Fundación Bonarda Argentina”, agregó Robles.
El acta de formación del Consejo fue firmada por representantes de las bodegas Zuccardi, Morcos, Giménez Rili, Almahuar, Crotta, Lucero Corzo, Tierra de Andes, Nieto Senetiner, Durigutti y Lamadrid, Pócima Wines, Niven Wines, Altillos de Medrano, Vinecol, Los Haroldos, Luna Roja, Pecne Te, Pasionarte, Los Noques, El Sueño Vineyard; además, por el productor y bodeguero Carlos Clément, el enólogo Hugo Zamora, el ingeniero agrónomo Tommy Hughes y los periodistas Enrique Chrabolowsky, Marcelo López y Claudia Farina.
Cabe destacar que enviaron notas de adhesión al Consejo las firmas Colonia Las Liebres-Altos Las Hormigas y la ingeniera agrónoma Cristina Pandolfi, quienes también integran el Consejo Asesor.
El bonarda en datos y cifras
Wines of Argentina (WofA), entidad que desde 1993 promueve la marca y la imagen país de los vinos argentinos por el mundo, dando a conocer todas las regiones productoras de Argentina, describe en su página web al bonarda como «una uva de gran potencial que produce un vino franco, honesto, de buen cuerpo y color, con aromas frutados de frambuesa y sutiles acentos anisados. Cuando interviene en vinos de corte, aporta intensidad cromática y notas frutales. Su buena estructura le permite ser añejado en barricas con buenos resultados».
Su gran potencial -detalla Wofa- se evidencia por su adaptabilidad a regiones calurosas. Del total cultivado en Argentina, el 60% se encuentra en la Zona Este de Mendoza, una región templada ubicada a unos 700 metros de altura sobre el nivel del mar.
Y expone los siguientes números:
De informes extraídos del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) también podemos aportar los números que muestran la importancia del bonarda en cuanto a la producción en lo que va del 2019, tanto en la Provincia de Mendoza y sus diferentes departamentos, como en todas las regiones vitivinícolas del país, considerando la totalidad de los varietales existentes.