Ante la sequía y la necesidad de ahorrar cada vez más agua, técnicos del organismo administrador del agua en Mendoza, junto a expertos de la Universidad Nacional de Cuyo, desarrollaron un sistema con tecnología de vanguardia que permitirá recuperar y sanear aguas provenientes del uso doméstico, por ejemplo la que se usa para lavar los platos y la ropa, y reutilizarla para el riego de cultivos de césped y viñedos. Estas aguas, una vez depuradas y separados los componentes grasosos, son inocuas e inodoras, aptas para el riego agrícola.
Con la firma de un convenio entre los directivos del Departamento General de Irrigación de Mendoza y del Liceo Agrícola, colegio perteneciente a la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo), se implementará el nuevo sistema como experiencia piloto en el predio del establecimiento educativo, ubicado al oeste del Parque General San Martín, en la Capital provincial.
El superintendente de Irrigación, Sergio Marinelli, junto a la directora del Liceo Agrícola, Celia Núñez, rubricaron el convenio por el cual las instituciones que representan se comprometen a poner en práctica un proyecto elaborado por técnicos de Irrigación y asistido por expertos del establecimiento educativo dependiente de la UNCuyo.
El proyecto emerge de la necesidad de combatir el contexto de sequía implementando ideas innovadoras a partir del agua reutilizada. En este caso, aguas grises (que son las provenientes del uso doméstico, como el lavado de platos y de ropa).
Qué son las aguas grises
Se conoce como aguas grises a las aguas residuales domésticas. Provienen de baños, duchas y cocinas y se canalizan, por lo general, a un tanque de compensación. Los sistemas que actualmente son utilizados para el tratamiento de aguas grises domiciliarias son poco eficientes, esa situación causa problemas en el ambiente debido a que este tipo de aguas residuales contaminan los mantos acuíferos y pueden ocasionar graves problemas de salud, además de emanar olores penetrantes y putrefactos. Si se realiza un adecuado tratamiento de aguas grises, el agua puede volver a utilizarse para regar las plantas, ya que conservan nutrientes como fósforo y nitrógeno, que son una excelente fuente de alimento para las plantas.
El sistema está compuesto por cañerías que portan mangueras que llevan el agua a la raíz de la planta. Es importante destacar que el Liceo Agrícola ya posee experiencia en la conducción de este tipo de aguas a través de cañerías que luego pasan por un separador de grasas y un bioreactor.
Con este sistema, primer prototipo de riego subsuperficial en la provincia, se prevé regar césped y vides. Entre otras ventajas esta forma de regar no presenta malos olores, no posee pérdidas por evaporación del agua y no existe la posibilidad de contacto con humanos.