El Departamento General de Irrigación (DGI) y la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar) firmaron un convenio para que técnicos asesoren a productores en la implementación y seguimiento de parcelas vitivinícolas piloto en los distintos oasis productivos de la provincia, con el objetivo de promover una utilización eficiente del agua adaptada a las necesidades y características de cada zona.
El Departamento General de Irrigación de Mendoza (DGI) y la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar) firmaron un convenio para promover la eficiencia de riego y uso de agua en el interior de las fincas. El objetivo es desarrollar parcelas pilotos en distintas zonas bajo riego de la provincia para aplicar allí las mejores técnicas de riego comprobadas que luego puedan ser replicadas por los productores de vid en cada uno de los oasis.
El convenio firmado se propone la realización de actividades conjuntas con la finalidad de que los productores asistidos por los Centros de Desarrollo Vitícola (CDV) de la Coviar en colaboración con el INTA, puedan implementar las técnicas de riego más eficientes.
Con este objetivo, los técnicos de la Coviar y los especialistas de Irrigación identificarán un mínimo de cinco parcelas en los diferentes oasis productivos de la provincia, en las cuales se realizarán mediciones de eficiencia de riego intrafinca y sus correspondientes recomendaciones de mejoras en el uso del agua. Una vez hechos los cambios y aplicadas las recomendaciones, los técnicos de los CDV monitorearán la posterior ejecución de la recomendación informada por el equipo de Irrigación.
Se utilizarán drones para georreferenciar las propiedades donde se harán los ensayos y mediciones de riego. Y se capacitarán a productores y a 30 técnicos de los Centros de Desarrollo Vitícola de la Coviar.
Como parte de este convenio, Irrigación se compromete a capacitar en la metodología de medición a técnicos de los CDV de Mendoza. Para ello se utilizarán drones para georreferenciar las propiedades donde se realizarán los ensayos de eficiencia de riego. Sumado a ello, un cuerpo de ingenieros de los CDV controlarán la implementación de las recomendaciones de riego que los especialistas de Irrigación formulen. En paralelo, se realizarán capacitaciones conjuntas a productores y unos 30 técnicos de los CDV sobre eficiencia en el uso de agua, mejoras en la finca, metodologías de medición, entre otros conocimientos técnicos necesarios para la implementación con éxito de esta iniciativa conjunta.
Estas parcelas piloto servirán como ejemplo y recomendación para otros productores de esas mismas zonas, para que puedan aplicar lo que allí está dando buenos resultados».
Sergio Marinelli, superintendente de Irrigación
«Para Irrigación es fundamental este convenio porque nos permite aprovechar al máximo la escasa oferta que hoy la naturaleza nos da de agua, por lo que hay que usarla muy bien. Ahora, además de medir cómo se riega en las fincas y dar recomendaciones a nuestros productores para aprovechar mejor de la poca agua que disponen, vamos a poder controlar y hacer un seguimiento para que se cumplan con estas recomendaciones hechas por los técnicos profesionales que intervienen», afirmó Sergio Marinelli, superintendente general del DGI. El funcionario destacó la creación a partir de este convenio de parcelas piloto en distintos oasis productivos de Mendoza que, dijo, «servirán como ejemplo y recomendación para otros productores de esas mismas zonas, para que puedan aplicar lo que allí está dando buenos resultados».
«El convenio firmado con Irrigación está muy alineado con uno de los objetivos del Plan Estratégico Vitivinícola (PEVI) en su actualización al 2030, que establece como prioritario trabajar en la integración y sostenibilidad de los productores primarios», dijo por su parte el presidente de la Coviar, José Alberto «Pepe» Zuccardi.
Es básico avanzar en una buena administración del agua para que los productores puedan trabajar con eficiencia y avanzar en calidad».
José Alberto «Pepe» Zuccardi, presidente de la Corporación Vitivinícola Argentina
Y agregó Zuccardi: «Es básico avanzar en una buena administración del agua para que los productores puedan trabajar con eficiencia y avanzar en calidad, y aplicar modelos de riego que a la vez puedan ser replicados por otros productores genera una trama y un vínculo que contribuye a la integración y sostenibilidad de más viticultores».
El acuerdo firmado entre Irrigación y la Coviar es la profundización de una agenda de trabajo y articulación entre ambas instituciones que comenzó con un convenio marco firmado en diciembre de 2019 entre ambas instituciones con el objetivo de avanzar en un uso más eficiente del agua para riego en Mendoza.