El ingeniero agrónomo mendocino Fabián Ruggeri, presidente de la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas de Argentina (Acovi), hizo públicos algunos valores que su organización de productores ha estado calculando, números que tienen un fuerte impacto en el costo de la cosecha actual, así como en los futuros precios que los viticultores recibirían de las bodegas por cada kilo de fruta y en el precio en góndola del vino que se elaborará. En entrevista concedida al periodista Pablo Pérez Delgado, conductor de el programa «El ventilador» de Radio Nihuil, el dirigente aseguró que sus asociados ya tienen garantizado el financiamiento bancario para levantar la cosecha, pero que aún no terminan de negociar las tasas de interés.
Cada año para esta época las distintas organizaciones de productores vitivinícolas salen a buscar créditos y subsidios tanto en el sector público como en la banca privada. Con la inflación y los costos de mano de obra y fletes actualizados, cada vez necesitan más dinero para vendimiar, por lo que la negociación de las tasas de interés de los préstamos y los plazos de pago adquieren una importancia crucial.
Con respecto a esta situación en Mendoza, Fabián Ruggeri, presidente de la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas (Acovi), expresó: «Los créditos para cosecha y acarreo para nuestros asociados, en principio, ya los tenemos asegurados, pero lo que estamos negociando ahora son las tasas de interés, porque están variando día a día, un día te suben dos puntos, otro día te bajan dos puntos, y así será hasta el día en que los otorguen… Pero nosotros ya los tenemos asegurados, aprobados por los bancos y garantizados por las SGR».
Acerca del costo de ese financiamiento, Ruggeri detalló: «Hoy la tasa neta para los préstamos está cercana al 95% anual, con lo cual te queda una tasa efectiva del 135% anual, lo que es una barbaridad, no hay economía en el mundo que pague eso, no hay actividad que pueda pagar esa tasa».
La cosecha 2024 estimada: 19 millones de quintales
Mientras se espera un pronóstico o evaluación de cosecha oficial, es decir del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), cada entidad de productores ha ido realizando sus estudios y cálculos sobre cuánta uva se recolectará esta temporada. Al respecto, Ruggeri analizó: «Las uvas han tomado un tamaño enorme, por el exceso de calor, no hay otra razón, este año tenemos agua, tenemos de todo, pero el calor es agobiante… Esta onda de calor de los últimos días viene a poner la frutilla del postre, pero en realidad si uno se fija hacia atrás cuántas noches no hemos dormido, ahí entendés… La noche es el problema, porque de día la planta procesa y soporta la alta tempertura, pero a la noche se tiene que recuperar, y con esta ola de calor no lo está haciendo.»
Y agregó el dirigente en relación al volumen de cosecha: «Nosotros siempre estuvimos previendo que se van a cosechar en toda Argentina alrededor de 19 millones de quintales, o tal vez un poquito menos, pero nunca van a ser los 15 o 16 millones de quintales del año pasado… Esto seguramente tendrá una repercusión en el previo de la uva… Pero todavía no hoy valor para el kilo de la uva… Si uno sacara la cuenta en función del precio al que está el vino hoy, la verdad es que los precios que deberían pagarse por la uva son innombrables, no tendrían lógica alguna… El vino tendría que estar 50 o 60 por ciento más arriba de lo que está ahora para alcanzar siquiera la mitad de la inflación con respecto al año pasado. Pero bueno, no hay un precio hoy día, estamos todos viendo qué es lo que se va a poder pagar por la uva, y justamente, por eso también necesitamos que el INV dé un pronóstico oficial, para tener una referencia, estamos a la espera».
Consultado sobre la vigencia y utilidad de mantener el acuerdo entre Mendoza y San Juan sobre cuánto vino y cuánto mosto conviene producir, Ruggeri manifestó: «Somos defensores acérrimos del acuerdo Mendoza-San Juan, tanto es así que lo venimos mencionando en los últimos días, y diciendo que este año va a ser más importante que nunca… Si ya tenemos problemas con los stocks de vino y no hacemos mosto, bueno, va a ser un caos… Y lo bueno del acuerdo también es que no tiene costo fiscal, no tiene que venir el gobierno a poner plata para comprar vino ni subsidiar nada».
La relación costo de cosecha-precio de la uva
En torno a los gastos que significarán para los productores la recolección de las uvas y el transporte hacia las bodegas elaboradoras, Ruggeri calculó: «Hay un costo muy básico, nosotros estamos calculando el costo por viaje: un flete básico, más el pago de las fichas y la atención de cosecha, va a estar entre los 370.000 y los 450.000 pesos cada viaje, dependiendo de la variedad… Es un numerazo. Un viaje son unos 100 quintales, y calculando que en una hectárea pueda haber 200 quintales, estamos hablando entre 700 y 900 mil pesos por hectárea, cosecha y acarreo».
Finalmente, el dirigente de Acovi se refirió a los primeros precios estimados a los que los viñateros deberían vender sus uvas que. Por ejemplo, una agrupación del Este provincial calculó y sugirió: la uva criolla mezcla, 35 centavos de dólar; las blancas A a 82 centavos de dólar; las blancas B a 43 centavos de dólar: las tintas A a 73 centavos de dólar; y las tintas B a 50 centavos de dólar. «Yo siempre digo -reflexionó Ruggeri-que nosotros primero somos productores, pero la realidad es que somos productores que nos pudimos agrupar y estamos en el mercado y sabemos lo que pasa en el mercado… Nos encantaría que existieran esos precios, sería fantástico para nosotros que existieran esos precios, pero no existen esos precios, no se podrían trasladar esos precio al vino en góndola…».
