Al noroeste de la provincia argentina de Salta, en la localidad de Cafayate, se encuentra uno de los museos más jóvenes de la región: el Museo de la Vid y el Vino, que otorga a los Valles Calchaquíes un atractivo turístico de primer nivel, integrado al circuito de la Ruta del Vino. Propone una muestra dinámica e interactiva sobre la historia y características de los viñedos en los Valles Calchaquíes y sus vinos de altura. Se trata de un espacio vivo, entretenido, pleno de estímulos visuales y sonoros, que contribuye al crecimiento cultural de visitantes de todas las edades. Dirigido por Adriana Rodríguez Balut, el 11 de marzo de 2021 cumplió 10 años, durante los cuales fue visitado por casi medio millón de turistas locales, argentinos y extranjeros.
El Museo de la Vid y el Vino se encuentra al noroeste de Salta, en la pintoresca ciudad de Cafayate, más precisamente en el predio del antiguo museo conocido con el nombre de «La Bodega Encantada«. Este sitio fue adaptado a las nuevas necesidades durante cuatro años, por un equipo interdisciplinario dirigido por Héctor Berra y Gustavo Borlasca.
El paseo incluye efectos escénicos, lumínicos, programas multimedia y presentaciones audiovisuales. En el recorrido se expresan los diversos contrapuntos entre la tradición y la tecnología, la poesía y el trabajo, la naturaleza y el hombre, los secretos ancestrales de la tierra y los procesos industriales actuales.
La directora del Museo, Adriana Rodríguez Balut, cuenta orgullosa a Enolife: «Desde que abrimos en 2011 hasta ahora, creció un 160% la concurrencia del público a actividades culturales». Y continúa: «Hemos recibido muchas visitas de artistas, por ejemplo cuando se filmó la película ‘Relatos Salvajes’, que utilizó como escenario a paisajes de Salta, la conferencia de prensa se hizo en nuestro Museo, con Leonardo Sbaraglia y todo el elenco; también, entre otros famosos, vino Sergio Goycochea para hacer una nota en su programa ‘Resto del Mundo'».
«Y hemos tenido el gran honor de tener a nuestro coterráneo César Isella (recientemente fallecido), cantando en vivo en el museo, en un espectáculo gratuito para toda la comunidad, celebrando sus 55 años de vida artística», concluyó Rodríguez Balut.
El Museo posee dos salas en donde se puede apreciar, por un lado, algo de lo que fue el antiguo lugar, y por el otro la modernidad del nuevo edificio. En cada sala se desarrollan dos ejes temáticos que acompañan al público para que conozca la historia y los procesos.
Sala 1: Memoria de la Vid
El nombre hace referencia de manera poética a la idea de que el vino conserva en su «memoria» el registro de la tierra, el agua y el sol; elementos que son responsables de la fecundación de la vid, su alimentación y maduración para la posterior cosecha.
El visitante camina por pasarelas en donde puede ver imágenes de Cafayate, sus paisajes y sus viñas.
El recorrido se inicia mirando el firmamento, en las claras noches de Cafayate. La escena se refuerza con la inclusión de un poético texto sobre un concierto de grillos y ranas, cantando sobre el ruido del río entre las piedras bajo la sombra de un algarrobo.
Luego continua y el visitante es invitado a conocer y valorar el elemento que le da sustento a las viñas: la tierra pedregosa pero fecunda de los Valles Calchaquíes.
Al seguir avanzando, la rampa alcanza su máxima altura. Desde allí se observa Cafayate en forma de maqueta. Gracias a un efecto lumínico, los visitantes podrán ver una recreación escénica de 24 horas en Cafayate.
Una vez que se conoce a la localidad desde la altura, la pasarela conduce a un mirador al cielo. Allí puede observarse la sucesión de días y noches a lo largo de un año y la cantidad de jornadas soleadas que se suceden en Cafayate.
Para completar la experiencia, el camino que se recorre es un curso de agua proyectado que se complementa con imágenes que muestran el poder del agua creando vida y obteniendo frutos de la tierra. Luego, la pasarela atraviesa una instalación escénica audiovisual que recrea un viñedo, la misma es un túnel de imágenes compuesto por una combinación de elementos escenográficos y escenas especialmente filmadas con la técnica Omnivision 360 °.
El fin del recorrido, las uvas cuentan poéticamente su relación con esta región y su historia de amor con la tierra, el agua y el sol de Cafayate.
Sala 2: Memoria del vino
Este es el espacio que antiguamente ocupaba la Bodega Encantada. En esta sala se encuentran el pasado, el presente y el futuro del vino de los Valles Calchaquíes.
Para hacer esta estructura, se respetó la arquitectura anterior de la antigua bodega, poniendo en valor sus antiguos materiales y revestimientos.
A medida que se avanza, el visitante se encuentra con un pintoresco personaje de 25 centímetros de alto, que aparece en distintos puntos del recorrido. Cuando las personas se detienen delante de él, este personaje virtual les informa sobre algunos temas y pone en valor elementos exhibidos.
A través de una docena de «Cubos de Interpretación Histórica» se cuenta la historia de la vitivinicultura en los Valles Calchaquíes, y el trabajo del hombre a través de los años. Cada uno de ellos encierra un capítulo de esa historia.
Más adelante, una sucesión de maquetas que replican a escala los ámbitos e instalaciones donde se realizan los procesos de elaboración del vino, ofrecen una experiencia dinámica: comprender los procesos modernos que se usan en la actualidad, en los Valles Calchaquíes para la elaboración del vino.
Luego aparece una creativa escenografía audiovisual que combina toneles con videoproyecciones en el interior de esos toneles, que relata al visitante las características de los más importantes varietales que se elaboran en la región.
Horario de atención del Museo de la Vid y el Vino a partir del 27/4/21: Martes a domingos, y feriados, de 9 a 18 hs.
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