Los días 30 y 31 de julio de 2019, Mendoza fue sede del Encuentro de Confederaciones Cooperativas Agroindustriales brasileñas y argentinas.
En la reunión, convocada por el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes), la Confederación Intercooperativa Agropecuaria Limitada (Coninagro) y la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas (Acovi), se coordinó una agenda conjunta para impulsar el empleo agroindustrial en cada país y aprovechar al máximo la ventana exportadora que se abre con el acuerdo Mercosur-Unión Europea (UE).
El cooperativismo en general y la integración de las cooperativas vitivinícolas en particular fueron los focos del encuentro, que trajo a Mendoza a los más altos funcionarios de esas áreas en Brasil y Argentina. Cabe destacar que se trató de la primera misión brasileña al exterior dedicada a aunar esfuerzos del sector agroindustrial en la región, tras la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre el Mercosur y la UE.
En el rubro vitivinícola, el encuentro reviste gran importancia ya que entre sólo dos de las varias cooperativas participantes -Fecovita de Mendoza, Argentina y Fecovinho, de Río Grande Del Sur, Brasil- agrupan a 10.000 productores y generan empleos para más de 1.000.000 de personas.
El éxito de la convocatoria y el interés manifestado por protagonistas del sector demuestra que las cooperativas agroindustriales de ambos países ya enfrentan con fortaleza el desafío de proveer alimentos a los casi 1.000 millones de consumidores de la Unión Europea.
Así lo destacaron los principales referentes del sector.
El mendocino Carlos Ianizzotto, presidente de Coninagro y uno de los principales impulsores del encuentro, destacó: “Este es el punto de partida: Argentina y Brasil tienen indudables ventajas en la producción y la agroindustria, no sólo para sus respectivos mercados sino para abastecer al mundo. Hoy hay extraordinarias posibilidades para hacerlo, pero también hay que resolver problemas en forma conjunta… Y el espíritu de este trabajo es ver cómo unirnos, igual que hacen los grandes productores, que se unen, se fusionan… Y esto es un gran ejemplo para nosotros los pequeños y medianos productores, que tenemos que asociarnos para adquirir escala y fortaleza. Está demostrado que las cadenas productivas globales incluyen a pequeños y medianos productores.”
A su turno, Eduardo Sancho, presidente de Fecovita y de Acovi -durante la recorrida que la delegación brasileña hizo por la planta de fraccionamiento y centro de distribución para la marca Toro en San Martín-, señaló que “la misión de Fecovita es darle sustentabilidad a los miles de productores que forman parte de la entidad, que hoy está llevando a cabo un desafiante plan de competitividad para generar mayor creación de valor en nuestra cadena cooperativa. Este importante encuentro con nuestros pares de Brasil fortalece la solidez del sistema cooperativo a nivel internacional».
Por su parte, Santiago Hardie, secretario de Coordinación y Desarrollo Territorial del Ministerio de Agroindustria de Argentina, puso de relieve que “es muy importante que las cooperativas de ambos países se integren y compartan experiencias. El modelo implementado por Fecovita, al igual que el brasileño, fomenta el desarrollo local con mirada hacia el mundo. Estos encuentros regionales potencian la exportación a nivel mundial, del Mercosur a la Unión Europea».
Durante la visita a la planta de San Martín, el presidente del Inaes, Marcelo Collomb, destacó: “En este encuentro con las cooperativas de Brasil tenemos la oportunidad de intercambiar experiencias y pensar en un trabajo de comercialización conjunta entre las entidades de ambos países; debemos pensar en trabajar juntos en la apertura hacia al mundo que se va a dar a partir del convenio firmado entre la Unión Europea y el Mercosur, porque necesariamente este proceso nos requerirá fortalecer la integración regional”.
Una cumbre de referentes del sector
Del encuentro de Confederaciones Cooperativas Agroindustriales brasileñas y argentinas realizado en Mendoza participaron los principales referentes de la industria vitivinícola y del cooperativismo binacional, tales como Carlos Ianizzotto (presidente de Coninagro), Eduardo Sancho (presidente de Fecovita y de Acovi), Marcelo Collomb (titular del Inaes), Santiago Hardie (secretario de Coordinación y Desarrollo Territorial del Ministerio de Agroindustria de Argentina) Fernando Schwanke (titular de Agricultura Familiar y Cooperativismo del Ministerio de Agricultura de Brasil), Helio Luis Marchioro (director de Fecovinho, la Federación de Cooperativas Vitivinícolas de Río Grande del Sur) y Márcio de Andrade Madalena (director de la Secretaría de Agricultura Familiar y Cooperativismo y Acceso al Mercado del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento de Brasil).
Fecovinho, un motor de la industria del vino en el Sur de Brasil
Helio Luis Marchioro, titular de la cooperativa Fecovinho, explicó que la entidad que lidera nuclea a 6 cooperativas de primer grado, para dar lugar así a una cooperativa de segundo grado (una federación de cooperativas) con 4.100 productores. Esta asociación representa el 25% de todos los productores agrícolas de Río Grande del Sur, la región brasileña donde se concentra la producción vitivinícola nacional. También destacó Marchioro que su Federación.
Según relató el referente cooperativista, Fecovinho ayuda a sus asociados brindándoles “contactos institucionales, organización, capacitaciones, captación de recursos, financiación externa y diseño de políticas”. A la vez, informó, “conformamos el frente vitivinícola en el Parlamento nacional, donde expresamos las inquietudes y reclamos del cooperativismo gaúcho”.
Sobre la conveniencia de trabajar junto a las cooperativas argentinas, Marchioro consideró: “Creemos que con el acuerdo Mercosur-UE tenemos un nuevo mercado con casi mil millones de habitantes, creemos que el cooperativismo del sector agropecuario del Mercosur tiene un potencial y una capacidad muy grande para acceder a este mercado… Algunas cadenas productivas, como por ejemplo la leche y la vitivinicultura, son un poco más sensibles al acuerdo, porque, como todos sabemos, en estas áreas en la Unión Europea tienen muchos subsidios. Pero para enfrentar ese desafío tenemos que unirnos para tornarnos competitivos, con productos diferenciados, y cada vez más unir al bloque Mercosur, para acceder a ese mercado con calidad y volumen de producción”.
La agricultura familiar, primer eslabón de la cadena productiva
La comitiva brasileña que llegó a Mendoza para estrechar relaciones con el sistema cooperativo local puso especial foco en lo que consideran el inicio de la cadena de valor productivo: la agricultura familiar. Tanto es así que, junto al ministro del área, Fernando Schwanke, tuvo un papel protagónico el joven Márcio de Andrade Madalena, director del Departamento de Cooperativismo y Acceso a Mercados de la Secretaría de Agricultura Familiar de Brasil.
De Andrade Madalena nos dio una primicia: los cuatro países del Mercosur, Brasil, Uruguay, Paraguay y Argentina, están preparando una misión conjunta a Israel para mostrar nuestras riquezas y posibilidades. Esa avanzada, agregó, será la primera de una serie de misiones oficiales del bloque a países y regiones considerados como potenciales clientes comerciales.
En cuanto a por qué el gobierno de Brasil eligió a nuestra provincia para enviar su primera misión de integración cooperativista, De Andrade Madalena dijo que ellos ven a Mendoza como “una referencia mundial del sector vitivinícola”. “Trabajamos con Mendoza por esa convicción; invitamos a todas las cooperativas del sur de Brasil, hicimos contacto con Coninagro para estar hoy aquí discutiendo a fondo sobre el sector vitivinícola y el cooperativismo”, agregó. No pudimos eludir la pregunta: ¿Qué vino le gusta más de Mendoza? Diplomático, De Andrade Madalena eludió dar marcas y exclamó: “¡el malbec!”. “Es el mejor del mundo… A mí me gusta mucho el tanat, porque nosotros y Uruguay tenemos muy buen tanat, pero el malbec de acá es insuperable”, reiteró.