Bodegas de Argentina firmó el 4/3 un acuerdo de cooperación con la Asociación Campo Limpio y con el Instituto de Sanidad y Calidad Agropecuaria Mendoza (Iscamen) para que las bodegas asociadas a la entidad se incorporen al denominado Sistema de Gestión de Envases Vacíos de Fitosanitarios, práctica regulada por una ley nacional, la 27.279. Dicha normativa establece que los productores que utilicen productos que pueden ocasionar contaminación o perjuicios a la salud están obligados a entregar los envases que los contienen en los centros de acopio. A través de este convenio, las instituciones firmantes también se comprometen a informar, colaborar en proyectos educativos de investigación y académicos, promover capacitaciones a productores y crear mecanismos de certificación de entrega de envases.
La cámara empresaria que nuclea a las principales bodegas exportadoras del país, Bodegas de Argentina, representada por su presidenta Patricia Ortiz, firmó un convenio junto al presidente del Iscamen, Alejandro Molero y el gerente de relaciones institucionales de la Asociación Campo Limpio, Juan Medina, cuyo objetivo es desarrollar actividades de complementación, asistencia y cooperación para difundir y avanzar en la adecuada gestión de los envases vacíos de fitosanitarios, en los términos de la Ley 27.279. Esta ley, impulsada por el Iscamen en 2016 establece que los productores están obligados a entregar los envases en los centros de acopio que se generan en la provincia, siendo el Iscamen y la Dirección de Protección Ambiental los organismos competentes para su aplicación.
A partir del convenio firmado, las tres entidades también se comprometen a informar, colaborar en proyectos educativos de investigación y académicos, promover capacitaciones a productores y crear mecanismos de certificación de entrega de envases por parte de los productores.
El programa de gestión de envases vacíos de fitosanitarios
El programa se inicia con el trabajo en campo, donde el Iscamen reparte gratis bolsones a los productores agrícolas de toda la provincia. Estos deben colocar en ellos los envases previamente lavados e inutilizados. En este paso, se realiza el triple lavado del envase, que permite la descontaminación de este para su procesamiento. La inspección visual permite categorizar a los envases en Tipo A y Tipo B.
Cuando estos bolsones son completados e identificados, son entregados por los productores en los Centros de Almacenamiento Transitorio (CAT) del Iscamen o son llevados a las mismas casas expendedoras de agroquímicos donde compraron el producto. Una vez en el CAT, los envases son compactados y procesados en fardos para su entrega a la industria plástica habilitada como operadora para el tratamiento de este tipo de productos. De acuerdo con la normativa, los productores tienen un plazo de entrega de los envases triplemente lavados de 150 días desde la fecha de compra.