Concluyó recientemente un encuentro que, en su cuarta edición, reunió a expertos del mundo vitivinícola para debatir sobre las innovaciones y tendencias que vienen en el panorama global del vino. En esta nota, un resumen de las reflexiones, datos y conclusiones presentadas por conocidos referentes como Raimundo Swett, director de ProChile; Mario Lazzaro, gerente de ProMendoza; Mike Barrow, pionero en el uso de criptomonedas en el sector y representantes de Vinventions, DVA Argentina, Satoshi Tango y otras empresas enfocadas en la investigación y el desarrollo acorde a las nuevas demandas de los consumidores.
Se realizó la cuarta edición del encuentro internacional y virtual sobre innovación en la industria vitivinícola, Wine Innovation Summit (Cumbre de Innovación en el Vino), con eje principal en las tendencias y sustentabilidad.
La apertura estuvo a cargo de Raimundo Swett, director comercial de Prochile en Argentina, con 50 oficinas comerciales en los principales mercados del mundo. Swett comentó que «Chile tiene vigente 31 acuerdos comerciales con 65 economías del mundo, de esta manera llega a 86% de PBI mundial, 63% de la población mundial. Es decir, Chile es un mercado de 19 millones de personas, pero más de 5 billones de consumidores, y el vino es uno de los productos más emblemático que tenemos. En 2021, la industria ha exportado 1.641 millones de dólares de vinos envasados, 313 millones de dólares de vino a granel y 6 millones de dólares más relacionados a la industria vitivinícola».
Desde la mirada de Prochile, la innovación es el pilar fundamental para un cambio sustentable. En relación a la importancia que tiene la sostenibilidad, para Chile es una obligación actual, y debe ser una política en el tiempo. En 1994 Chile sancionó la ley sobre medio ambiente que es actualizada constantemente.
Por otra parte, Swett detalló que «en la actualidad hay 78 viñas certificadas con el código de sostenibilidad de Wine of Chile«. Y agregó que «ve una gran oportunidad para estar en la mesa de los principales mercados, a partir de la tendencia de consumo en que el 79% de los consumidores está cambiando sus preferencias de compra, 85% de los minoristas han visto crecimiento de consumo en la góndola de productos con certificaciones sustentables, y el 90% de los mismos cree va a seguir creciendo a futuro».
A su turno, Mario Lazzaro, gerente general de la Fundación ProMendoza, informó que «Mendoza en el 2021, en vinos, exportó 795 millones de dólares a 133 destinos Estados Unidos, Gran Bretaña, Brasil, Canadá y Países Bajos».
Por su parte, Luis Romito, coordinador de la Comisión de Sustentabilidad de Bodegas de Argentina, entidad que nuclea a 200 bodegas socias que en conjunto exportan a unos 130 países, generando alrededor de 900 millones de dólares en divisas, hizo referencia al creciente interés de las bodegas asociadas en gestionar y certificar como bodegas sustentables.
En el bloque sobre innovación agrícola, la ingeniera agrónoma Vanesa Vignera Crop, nutrition business manager de Incentia-DVA Argentina, expuso que «Incentia es una línea que nace con visión holística, integrando en los cultivos la protección, nutrición y cuidado del medio ambiente de una forma ordenada y sostenible». Además, resaltó la importancia en el cuidado del medio ambiente y la falta de alimentos a nivel mundial, que impacta directamente en la producción agrícola. Y coincidió con Sweet acerca de que lo cambios de los consumidores están enfocados en buscar productos más sanos y frescos.
En relación a la protección de los cultivos, Cecilia Acosta y Rocío Nadin, de Bodega Argento, destacado productor orgánico de Argentina, contaron su experiencia con una de las plagas que afectan a las viñas de Mene doza, que son las hormigas. Esa bodega realiza acciones planificadas de biocontrol con distintas alternativas, siempre buscando el equilibrio para no afectar el ecosistema y lograr paliar el daño que estos insectos provocan en las vides
La tecnología en las fincas llegó de la mano de la especialista Carla Grosso, head farmer sales de Kilimo, y del agrónomo Mariano Dorado, de Chandon y Terrazas de los Andes, quienes compartieron la experiencia de la agtech aplicada al riego eficiente en vides. Dorado se refirió a los desafíos que tienen las bodegas en cuanto al riego, en gestionar la provisión de agua en grandes superficies, disminuir los costos operativos asociados al riego y eficientizar la operación para optimizar el uso de la energía y los costos del recurso humano en la operación. Y el último desafío, insistió, es certificar la sustentabilidad.
Por su parte, Mike Barrow, emprendedor, bodeguero y experto en criptomonedas norteamericano afincado en Mendoza desde hace 15 años, presentó 4m3.bio, un proyecto de biofabricación a partir de los residuos de la cosecha (sarmientos, escobajos y orujos), y a partir de un hongo inoculado que genera un material similar al telgopor, que se puede utilizar como envase de vinos, evitando usar plásticos, madera y cartón para las cajas de vinos.
Marta Arranz, enóloga y especialista en WQS de Vinventions España, se refirió a las tendencias en tapones sustentable de vino y presentó SUBR. «Es un tapón micronatural, es un cierre que combina lo mejor de la naturaleza y la tecnología de vanguardia. Forma parte de una nueva categoría de cierres microglomerados sustentables, fabricados a base de gránulos de corcho y materiales naturales, biodegradables y de origen vegetal.»
Fernando Buscema, director ejecutivo del Catena Institute of Wine y CEO de Qualab, desarrolló su visión de cómo a partir de la innovación disruptiva se pueden cambiar las reglas de juego. «La teoría ‘Jobs to be done’, es decir la tarea que tenés que hacer, significa que no deberíamos definir en qué negocio estamos por el producto que producimos, si no por la tarea que tiene que hacer el consumidor. Lo segundo que se propone es que, en el servicio o producto que ofrecés, el consumidor contrata o despide según su interés».
Buscema planteó el por qué de la elección de los consumidores, y destacó tres perfiles de consumidor: el sibarita, que es quien busca una experiencia sensorial placentera; el experto, que es aquel que busca una experiencia para saber más, y, por último, el fee raider, que es aquel que busca impactar. Para todos estos perfiles, el vino compite con otros productos o experiencias ajenos al negocio del vino.
Por el lado de los recursos humanos y el rol de la mujer en la industria vitivinícola, Federico Azeglio, director regional para el NOA, Cuyo y Patagonia de Adecco Argentina, comentó que la dotación de mujeres en la industria creció 30% en el último año, en sectores como líneas de fraccionamiento, enología, laboratorio, agronomía, poda y cosecha.
Acompañantes y sponsors
Acompañaron la iniciativa de Wine Innovation Summit el Ministerio de Economía de Mendoza, Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), ProMendoza, Bodegas de Argentina, Instituto Nacional de Vitivinicultura de Uruguay (Inavi), la Embajada de Uruguay en Argentina y Coviar.
Por su parte, los sponsors del encuentro fueron Kinto, Satoshi Tango, Esker, Pi Data Strategy & Consulting, Incentia Crop Nutrition, DVA Argentina y Vinventions.
La tecnología y el planeta criptomonedas
A partir de la pandemia, el e-commerce pasó a ser una nueva herramienta en la venta de vinos para las bodegas. Luciano Rafowicz, sales manager Latam en Summa Solutions & Brandlive by Infracommerce, comentó que el comercio eléctrónico creció un poco más del 30% desde la pandemia.
Rodrigo Exequiel Garcia Durá, developer business de Pi Data Strategy & Consulting, y Sebastián Aveille, director de pymes de Microsoft Argentina, abordaron la transformación digital a partir del uso de datos a través de la inteligencia artificial, para ser más eficientes en el uso del agua y fertilizantes en los viñedos y así reducir costos. Y prever con alertas tempranas las heladas en fincas o posibilidad de granizo utilizando las herramientas de Microsoft.
Ignacio Indaburu, head of Operations de Satoshi Tango, señaló: «Podemos pensar en las criptomonedas como una forma de dinero moderna que combina las mejores propiedades del mundo material con las funciones que nos brinda la digitalización, la informática».