Según indican las cifras procesadas por el Laboratorio Estadísticos del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), crece el interés en el exterior por la segunda variedad tinta más plantada del país. En 2020, las exportaciones del varietal fueron récord en la última década, aumentando con respecto a 2010 un 65% en volumen y un 26,1% en valor FOB, por un total de U$S 8.974.000. Coincidiendo con la presente Semana del Bonarda Argentino, que se celebra con catas, recitales, bicicleteadas y distintos eventos con epicentro en San Martín, Mendoza, divulgamos a continuación el informe completo del organismo fiscalizador de la vitivinicultura nacional.
La bonarda es, en superficie, la segunda variedad tinta plantada en la Argentina después del malbec. Se considera que esta variedad llega a nuestro país a través de las corrientes inmigratorias de fines del siglo XIX, iniciándose su cultivo en la región de Cuyo.
Resulta fácilmente identificable en el viñedo por sus hojas típicamente planchadas, muchas de ellas enteras; brotes fuertemente coloreados y racimos medianos, compactos, con características bayas redondas.
Esta variedad ha sido utilizada durante mucho tiempo en nuestro país como base de vinos tintos comunes por sus altos rendimientos por hectárea y su sobresaliente aporte de color. Tiene gran aptitud para mejorar vinos de corte, especialmente con malbec.
Ante el descubrimiento de su potencial enológico, se reduce la producción por hectárea, logrando una calidad excepcional, por lo que comienza su desarrollo como varietal, del cual se elaboran vinos de alta calidad.
Produce vinos de colores intensos: marcados violetas o púrpuras que evolucionan al rojo rubí. Su aroma es intenso y suelen aparecer atractivas notas frutales de frutas rojas (frambuesa, frutillas, cassis o cerezas) y frutas negras (moras, ciruelas o arándanos). En boca es agradable y dulce, de buena intensidad. Sus taninos son suaves y hacen aterciopelado y elegante al vino.
Superficie
La bonarda está presente en la mayoría de las provincias vitivinícolas de Argentina: en el año 2020 registró un total de 18.153 ha cultivadas, lo cual representa el 8,5% del total de vid del país.
Respecto al año 2010, la superficie no ha variado, hay solo un 0,1% más de superficie de bonarda que al inicio de la década (+26 ha); no obstante la tendencia indica que el total cultivado va disminuyendo desde el año 2014.
En Mendoza hay un 0,2% menos de bonarda que en el año 2010, en San Juan un 0,3% menos y en el resto del país creció un 9,8%. La provincia de Mendoza tiene la mayor cantidad de bonarda del país, alcanzando en 2020 las 15.162ha (83,5%), seguida por San Juan con 2.210 ha (12,2%). El resto de las provincias solo cuentan con 781 ha (4,3%).
En la provincia de Mendoza la mayor superficie de bonarda se encuentra en el departamento de San Martín (24,8%), seguido por Lavalle (14,2%), Rivadavia (11,9%) y San Rafael (11,3%). El 53% del bonarda de Mendoza, se encuentra en la zona Este, 15,4% en la zona Norte y 14% en la zona Sur. Hay un 10% en la zona Centro y 7,2% en el Valle de Uco.
En San Juan los departamentos que más superficie registran de esta variedad son Sarmiento (27,7%) y Veinticinco de Mayo (20,9%), seguidos por Caucete (19,1%) y Nueve de Julio (7,7%).
Producción de uva
En 2020 la producción total en el país de la variedad bonarda fue de 2.123.369 quintales, lo cual representa el 10,3% de la cosecha total. Esta variedad ocupa el tercer puesto en el ranking de quintales cosechados, luego de Malbec y Cereza.
Como se puede observar en el gráfico de evolución, la producción es menor a la del año 2010, aunque ha ido aumentando, luego de una cosecha 2016 históricamente baja. En el último año la producción de la variedad bonarda fue un 10,4% menor a la cosecha del año anterior.
Comercialización
En el 2020 se comercializaron 79.782 hl de vino varietal puro de bonarda y 166.288 hl de bonarda en corte con alguna otra variedad. Considerando que el total comercializado de vinos varietales en el país fue de 5.071.538 hl, las ventas de vinos varietales con presencia de la variedad bonarda representaron el 4,9% de ese total. Las ventas totales de vinos varietales con bonarda (puro + cortes) han aumentado en los últimos dos años. En 2020 se comercializó un 7,9% más que en 2019.
En el año 2020 el 23% de los vinos varietales elaborados con bonarda se exportó y el 77% se comercializó en el mercado interno. Se observa una recuperación en las exportaciones de vino bonarda (puro y con cortes) en el último año, registrando en 2020 el mayor volumen enviado al exterior de toda la década.
Mercado interno
En el año 2020 se comercializaron 190.070 hl de vinos varietales elaborados con bonarda. El 31% corresponde a varietal puro y el 69% a cortes con otra variedad. Las ventas al mercado interno de vinos con bonarda han ido en disminución desde el año 2010 y se observa una caída del 3,1% en el último año, con mayor disminución en el varietal puro (-5,1%) que en los cortes (-2,1%).
El bonarda y sus cortes como vinos varietales tienen una participación del 7,6% en el total de varietales comercializados en el país en el año 2020.
La participación de los vinos elaborados con bonarda en el total de vinos varietales vendidos en el país, ha disminuido 40,4% en los últimos 10 años, pasando de representar el 12,7% en el año 2010 al 7,6% en 2020.
Principales cortes de vino bonarda en el mercado interno
El principal corte elaborado con bonarda como primer varietal que se despachó al mercado interno en 2020 fue bonarda-syrah (66,2%), seguido por el trivarietal bonarda-syrah-malbec (13,6%) y en tercer lugar se ubica bonarda-malbec (12,4%). Estos tres cortes concentran el 92,2% del total de vino despachado al mercado interno de bonarda con corte en 2020.
Respecto al tipo de envase de los vinos varietales bonarda comercializados en el año 2020 en el mercado interno, se observa que el 76,9% corresponde a botellas, el 22,3% a damajuanas y el 0,4% a bag in box. La botella ha disminuido un 13,6% respecto al año anterior, mientras que las ventas en damajuana aumentaron un 49,1%.
Mercado externo
Durante el año 2020 las exportaciones de vinos varietales elaborados con la variedad bonarda alcanzaron un total de 56.000 hl, por un valor FOB de 8.974.000 dólares. Las exportaciones de este varietal han aumentado en volumen un 65% y un 26,1% en valor FOB con respecto al año 2010.
El 39% del total exportado en 2020 de vinos de bonarda corresponde a varietal puro y 61% a cortes con otras variedades. Las exportaciones de varietales puros de bonarda han crecido en el mercado externo un 71,5% en el último año y también han aumentado los cortes con otras variedades un 78,1%.
La participación de vinos bonarda y sus cortes en el volumen total de varietales exportados en el país en 2020 es del 2,2%, mientras que en 2010, esa participación era del 1,7%. El volumen de las exportaciones de vinos bonarda, tanto puro como sus cortes del año 2020 es el mayor de toda la década.
El principal destino de los vinos varietales puros bonarda en 2020 fue Canadá, seguido por Rusia. Luego figuran Brasil, Francia y Estados Unidos. En tanto que, para el bonarda con cortes los principales destinatarios fueron: Irlanda, Reino Unido, República Checa, Paraguay y Bélgica.
Principales cortes de vino bonarda en el mercado externo
El principal corte exportado en 2020 de bonarda como primer varietal es Bonarda Malbec (59,3%), seguido por Bonarda-Syrah (11,8%) y Bonarda-Malbec-Syrah (9,1%).
En cuanto a la modalidad de envío de los vinos varietales elaborados con la variedad bonarda, predominan los envíos fraccionados respecto al granel.
El 54% del total de vinos varietales exportados en 2020 producidos con bonarda fueron fraccionados y el 66% granel. Aumentaron las exportaciones de fraccionados un 29,2% y las de granel un 188,2% respecto al año 2019. En 2020 se exportó un 13,5% más de vino bonarda fraccionado que en 2010 y un 258,3% más de granel.