Según la estadística del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) el 2020 cerró con un incremento en el volumen de las exportaciones vitivinícolas argentinas de 26,7% en comparación con 2019. Argentina fue el país que más creció, seguido por Italia, Nueva Zelanda y Portugal. De los países destino de los vinos argentinos, Estados Unidos y Gran Bretaña siguen siendo los principales. China aumentó un 145%, pero el dato más relevante es que España se convirtió en el país que más importó nuestros vinos, con un incremento de 412,1% con respecto a 2019. En segundo término se posicionó República Checa, con un crecimiento del 139,7%.
Durante el 2020 se exportaron 395 millones de litros de vino, lo que implica que se vendieron 83 millones de litros más que el año 2019. Representa, además, el volumen más alto de los últimos 12 años. De ese total, 202 millones correspondieron a fraccionado y 193 a granel.
Esto le permitió a Argentina escalar varios puestos en el ránking mundial de países exportadores de vinos, pasando al cierre de 2020 al 8º lugar en fraccionados y al 6º en vino a granel, según los últimos datos publicados por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV)
Las ventas al exterior de vinos fraccionados tuvieron un aumento de 5,7% y las de granel de 59,8%.
En la comparativa interanual, las ventas al exterior de vino fraccionado sin mención varietal crecieron un 18,2% y las de varietal un 4%. En cambio, las de espumoso, algo esperable en un año de pandemia, en el que hubo poco espacio para celebraciones, cayeron un 8,2% y las de otros vinos (especial y
gasificado) disminuyeron un 48%. Esta misma situación impactó en todos los países exportadores de espumantes, con notorias caídas de volumen y valor.
En tanto, las exportaciones de granel sin mención de varietal se incrementaron un 44,9% y las de varietal, un 84,2%, siendo esta categoría la gran locomotora de las exportaciones argentinas.
Países destino
Estados Unidos sigue en primer lugar, pero con una caída del 7,8%. Gran Bretaña, como segundo comprador, sigue creciendo y este año lo hizo en un 35,8%. El tercer comprador es Canadá y también crece. España, China y República Checa son los 3 destinos que más crecieron, destacándose España con un 412,1%.
Argentina exporta a más de 125 países: los principales destinos para el vino fraccionado fueron EEUU, Gran Bretaña, Brasil, Paraguay, Canadá, Países Bajos e Irlanda. Mientras que para vinos a granel fueron China, España, Canadá, Gran Bretaña, México, Estados Unidos y República Checa.
España
Con respecto a España, el año 2020 arrancó con una importación de 41 millones de litros de granel argentino en los meses de febrero, marzo y abril de 2020, convirtiéndose en su principal proveedor y creciendo un 961,8% en valor.
Así, en el primer semestre de 2020, las importaciones españolas de vino crecieron un 193% en términos de volumen, hasta los 64,4 millones de litros, que suponen 42,4 millones de litros más que en la primera mitad de 2019. De esos 64,4 millones, 46,6 millones de litros corresponden a importaciones de vino a granel, y casi 41 millones, a granel argentino.
República Checa
Otro caso a destacar es el de República Checa, con un crecimiento del 139,7% respecto del 2019. Según datos de la OEMV, en el 1er. semestre de 2020 Argentina fue junto a Hungría el principal protagonista del crecimiento global de las importaciones de República Checa al multiplicar por 10 sus ventas, hasta los 3,2 millones de litros (+916%), lejos de los
309.000 registrados en el mismo período de 2019 debido al enorme desarrollo del granel. También el crecimiento fue en valor con un 237,9% en el primer semestre de 2020 respecto al de 2019.
Cabe indicar que en el 2020 países como España, Chile, Francia y Australia disminuyeron sus exportaciones en valor y volumen con caídas significativas.
Si bien el comercio mundial de vinos ha sufrido pérdidas durante el periodo de pandemia en el valor total FOB por más de 2.000 millones de euros , debido a cambios en la modalidad de consumo y por el mix de productos exportados, nuestro país sólo perdió un 1,2%, mientras que el promedio mundial de caída se estima fue de 5,8%.
Fuentes: INV y Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV)