El Observatorio Vitivinícola Argentino (OVA) analizó hacia qué mercados fue nuestro vino fraccionado y la participación porcentual de cada país. Durante los primeros 6 meses de 2020, las exportaciones argentinas crecieron el 4,2% en el volumen de litros, pero cayeron 4,6% en la facturación en dólares, en comparación con el mismo período de 2019. Esto se debe a que el precio promedio de exportación tuvo un descenso en el semestre, situación que se repite en la mayoría de los países competidores con Argentina.
Según datos de la consultora Pentatransaction, analizados por el Observatorio Vitivinícola Argentino (OVA), durante el primer semestre de 2019 Argentina exportó 147.997 millones de litros, mientras que en los primeros 6 meses de 2020 las ventas externas crecieron a 154.188 millones de litros, lo que mostró una variación positiva del 4,2% en volumen.
Si observamos las variaciones punta a punta, podemos ver que, para diferentes países, han sido de una gran magnitud, como es el caso de Paraguay, Francia, Países Bajos y China, entre otros. Pero, no es lo mismo que dicha variación provenga de Estados Unidos, nuestro principal importador, o que provenga de Malasia, un cliente ubicado en la posición número 45 en la lista de importadores de 2019.
Promedio ponderado
Con todo, para que el análisis no fuese lineal, el OVA hizo un promedio ponderado de la variación. Es por ello que tomó en cuenta la variación entre enero y junio de ambos años y ponderó la participación porcentual que significó para Argentina las importaciones de cada país durante 2019.
Con esta nueva variable incremental, el OVA llegó a la conclusión de que las variaciones fueron estables respecto del año anterior. Los casos que más sobresalen son Estados Unidos, Paraguay, con un 2,1% y 2,6% respectivamente, y China con un 1% negativo.
En la siguiente tabla, se puede ver, en la última columna (datos en rojo) la variación porcentual ponderada del semestre, donde se tuvo en cuenta no sólo el movimiento que se produjo en los primeros seis meses de ambos años, sino también la participación que tuvo el mercado de destino en las exportaciones totales de vinos fraccionados argentinos.
Esta nueva variable, compuesta por la participación de las exportaciones del 2019 y la variación porcentual, apalancará la variación porcentual teniendo en cuenta si el importador es de gran peso o no para las exportaciones de Argentina. Por ejemplo, el apalancamiento será mayor en el caso de Estados Unidos, y prácticamente nulo en el caso de Malasia.
Cuando se habla de exportaciones por valor, hasta junio del corriente año, pudimos divisar que se registraron exportaciones por U$S 350.139.414, un 4,6% menos respecto del mismo período del año anterior, ya que en 2019 las ventas de vinos fraccionados habían registrado ingresos por U$S 366.878.735. Considerando la misma metodología descripta anteriormente, ponderando por la importancia de cada mercado en términos de participación durante, el caso más llamativo es del China que una disminución de 1,4%.
A la vez, sobresalen Países Bajos, Canadá y Gran Bretaña (0,7; 0,5 y 0,3, respectivamente) como los mercados de mayor peso, donde no sólo Argentina creció en volumen sino también en valor y en participación.
Respecto a los precios promedio con los que Argentina llegó a cada mercado (y el valor promedio general), es posible notar que hubo aumentos y disminuciones de todo tipo; pero, como se dijo anteriormente, no es lo mismo que ocurra un aumento de magnitud en Estados Unidos que en un país donde Argentina no tiene mayor incidencia o demasiado baja.
Es por ello que la variable de variación del precio fue ponderada por la participación en las cantidades exportadas durante 2019. En promedio, el precio que recibió Argentina durante el primer semestre del año ha sido de un 8,4% menor al del mismo semestre del año pasado, mientras que la nueva variable de incrementos nos indica que las principales caídas de precios promedio ocurrieron en Paraguay y Estados Unidos, lo que mostró una disminución del -1,3% y -2,2%, respectivamente.
¿Qué pasó en EEUU con los países competidores de Argentina?
Si bien el precio promedio del litro de vino argentino ha caído en Estados Unidos, el principal cliente de nuestros vinos, también ha ocurrido algo similar con el precio de la mayoría de nuestros competidores directos, como ocurrió con Chile y Australia. El caso más llamativo ha sido el de Francia, que, según datos de TradeMap, ha caído en su precio promedio un 15% comparando ambos semestres, lo cual es un claro indicio de que dicho comportamiento en la variable de los precios promedio puede ser explicado por una caída general en la preferencia por precios más bajos en la demanda de Estados Unidos y no tanto por la oferta de los países líderes (entre los que se encuentra Argentina).
Claramente, el crecimiento de los volúmenes exportados de vinos fraccionados está atado -como ha sucedido en mayor medida con las exportaciones de vinos a granel- a la disminución del precio promedio, lo que también se ve reflejado en los países competidores. Entonces, podríamos simplicar que la demanda creció en volumen gracias a la disminución del precio promedio.
¿Pero qué sucedió con los países competidores de Argentina en todo el mundo en el mismo período analizado?
Corrieron una suerte similar a la de nuestro país. Durante los primeros seis meses, según datos de TradeMap, la mayoría de los países competidores de Argentina exportó más litros fraccionados a todo el mundo, pero recibió menos dólares, entonces, el precio promedio del litro también les disminuyó.
El precio que han recibido los principales competidores de Argentina, también ha caído, en promedio un 5%, salvando el caso de Italia que es el único exportador fuerte que ha visto un incremento en su precio promedio del orden del 3%. Nuevamente, el caso más llamativo es el de Francia, cayendo un 12%, una cifra similar a lo que le sucedió en EEUU.
En conclusión, observamos un incremento en el volumen exportado y una variación negativa del precio promedio debido, obviamente, a la disminución de la facturación, como a la mayoría de nuestros competidores. El peso de las variables macroeconómicas como el tipo de cambio, costos de logística, inflación, retenciones y el precio que se pacta en dólares también determinarán el comportamiento del segundo semestre, sin olvidar el contexto global de la pandemia.
Fuente: Observatorio Vitivinícola Argentino (OVA)