El fenómeno meteorológico denominado DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que castigó en los últimos días de octubre a la Comunidad Autónoma española de Valencia, sectores de Castilla-La Mancha y otras regiones cercanas dejó 222 muertos y 78 desaparecidos hasta el momento. Además, arrasó en total unas 40.000 hectáreas de cultivos entre frutales, hortalizas y viñedos, la mayor parte de éstos de la valorada uva moscatel de las DO Utiel-Requena y Valencia. En muchas de las viñas aún no drena el agua acumulada, lo que causa un efecto de asfixia en las plantas y, con la cosecha actual completamente levantada, afectará la brotación de la vendimia 2025.
La dana ha afectado de lleno a la zona productora de uva moscatel en la Comunidad Valenciana y a otras variedades en viñas de las denominaciones de origen (DO) de Utiel-Requena y Valencia, aunque con la uva ya recogida, los daños dependerán del número de parcelas que hayan resultado arrasadas.
Las primeras estimaciones de la compañía aseguradora española Agroseguro sitúan en 20.000 las hectáreas afectadas en esta comunidad autónoma, sobre todo de cítricos, caquis, uva de vino y hortalizas, con un impacto de 159 millones de euros en lo que respecta al valor potencial de las producciones dañadas.
Mientras las bodegas y los viticultores comprueban el estado en el que han quedado las tierras agrícolas tras el paso de la dana, las imágenes satelitales no dejan ninguna duda de que este fenómeno meteorológico pasó de lleno por la zona productora de uva moscatel de Valencia, situada en la parte central de la provincia.
Así lo relató el presidente de la DO Valencia, Salvador Manjón, quien detalló que se trata de una zona delimitada por los municipios de Chiva, Cheste, Godelleta, Montroy, Monserrat, Real de Montroy y Turís.
El nivel de daños dependerá de si el agua ha arrasado el viñedo y de la cantidad de barro que haya quedado, explicó Manjón, quien agregó que están trabajando en recabar toda información en colaboración con el Colegio de Ingenieros Agrónomos.
En principio, el agua de lluvia que haya caído no debe ser un problema grave, según el representante de la DO Valencia, sino que, al contrario, puede «resultar beneficioso porque ha empapado la tierra y la viña va a tener recursos para generar madera». El problema está en las tierras que se ha llevado el aluvión, ya que, en esos casos, «no hay nada que rascar» y esa viña «estará perdida», expresó Manjón.
«Luego habrá que ver la cantidad de barro que tienen algunos viñedos, que en principio en principio tampoco debería ser malo, pero claro, no es malo si tienes 20 centímetros, pero si tienes un metro, te va a ahogar la planta», comentó.
Comprobación de daños en Utiel-Requena
La comarca de Utiel-Requena ha sido una de las más afectadas por la dana. Sus tierras se enmarcan en la DO del mismo nombre, donde los técnicos están ahora recopilando la información de los daños que han podido sufrir los viticultores y los bodegueros.
También en la zona de Utiel-Requena hay viñedos amparados por la DO Cava, que de momento no ha tiene notificaciones de que haya sufrido daños.
Fuera de la Comunidad Valenciana, la parte occidental de Andalucía fue la más afectada por el temporal y en Cádiz y Jerez de la Frontera se registraron hasta 120 litros de agua en 12 horas, según señaló la organización agraria UPA.
Consecuencias para la vid
Gran parte de las viñas habían entrado ya en «dormancia» o «dormición» (como se denomina al período dentro del ciclo biológico de un organismo en el que el desarrollo, crecimiento y actividad física se suspenden temporalmente, o sea el mecanismo que le permite a la planta pasar el invierno) y, con toda la uva ya cortada, las producciones de este año no vieron afectadas, según explicó el investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España, Diego Intrigliolo.
De cara a la cosecha del año que viene, puede producirse una merma en la brotación de la uva en aquellas viñas en las que se esté produciendo un encharcamiento durante más de una semana, porque esto asfixia a la planta, algo que puede suceder en zonas llanas en las que el suelo no esté drenando, ha explicado el experto.
El otro punto importante es la erosión del suelo que ha provocado la dana, sobre todo en las zonas de más pendiente, lo que reduce la cantidad de suelo disponible, pero, además, provoca una pérdida de nutrientes, continuó Intrigliolo.
Respecto a la posible aparición de plagas o insectos por la humedad, el investigador consideró que, a priori, no es algo que pueda suceder en esta época del año.
En algunas comarcas del interior de Valencia, la fuerza del agua arrancó miles de vides y otros cultivos que, por el contrario, venían de atravesar uno de los años hidrológicos más secos de la historia, que había causado la muerte de plantaciones por déficit hídrico. A medida que esa agua bajaba a la costa inundó cientos de explotaciones de cítricos, caquis, hortalizas, etc. que si se mantienen anegadas durante un número excesivo de horas podría provocar la muerte del arbolado. Por supuesto, la cosecha de mandarinas, naranjas y caquis (que se encontraban en plena recolección) de los campos más perjudicados se perderán, reduciendo en un buen porcentaje la producción de esta campaña.
Además, la dana se agravó debido al granizo -que causó daños de hasta el 100% de la cosecha en explotaciones de Alfarp, Catadau, Llombai, Carlet y Godelleta- y a los tornados -que elevaron las pérdidas agrarias en sitios como Alginet, Benifaió y Carlet, por caída de frutos, corte de ramas e incluso de árboles- A los siniestros en producción y plantación, hay que sumar los graves desperfectos en caminos rurales e infraestructuras agrarias, tales como acequias, muros, paredones de contención, riego por goteo, almacenes, instalaciones de depósitos, pozos de riego, invernaderos, maquinaria y galpones agrícolas y ganaderos.
Confirman que los daños están cubiertos por seguros
La Agrupación Española de Entidades Aseguradoras de los Seguros Agrarios Combinados (Agroseguro) comunicó que «los daños provocados por la dana están cubiertos por el sistema de seguros agrarios». Informó también acerca del refuerzo de atención a los asegurados. Y señaló que han habilitado una dirección de correo electrónico específica para atender las consultas de los asegurados, y han reforzado los equipos de atención telefónica.
Agroseguro desea, «en primer lugar, manifestar sus condolencias a los familiares y allegados de las víctimas y mostrar su solidaridad y apoyo a todos los afectados», ante esta dana que ha provocado «además de cuantiosos daños materiales, víctimas mortales y otros daños personales«.
Agroseguro recordó que «todos los riesgos asociados a esta DANA están incluidos entre las coberturas del sistema español de Seguros Agrarios Combinados».
Las declaraciones de siniestro comenzaron ya a recibirse, luego de que los agricultores y ganaderos asegurados pudieron acceder a sus explotaciones y constatar los perjuicios provocados por las tormentas. En cualquier caso, y ante la gravedad de los acontecimientos, Agroseguro envió un mensaje de tranquilidad a los asegurados, ya que los partes de siniestro podrán remitirse transcurridos varios días.
Refuerzo de las medidas de atención a los asegurados
Para atender a los afectados por la dana y resolver las dudas que les puedan surgir, Agroseguro reforzó los equipos de atención a los asegurados, que pueden ponerse en contacto a través de las siguientes vías de comunicación:
- Correo electrónico específico en este enlace.
- Teléfonos en las direcciones territoriales afectadas:
- Levante (Comunidad Valenciana): 96 369 44 95
- Sureste (Murcia y Almería): 968 23 18 00
- La Mancha (Albacete): 926 23 08 43
Una vez realizadas las evaluaciones de daños, Agroseguro agilizará el pago de las indemnizaciones, para realizarlo en el menor tiempo posible y así dotar de liquidez a los agricultores y ganaderos afectados.
De hecho ya ha comenzado a planificar los trabajos de evaluación de daños en las zonas afectadas, que se iniciarán una vez el agua se haya retirado, y que contarán con técnicos procedentes de diferentes zonas del territorio nacional.
Fuentes: Efeagro, Agroseguro y Vinetur