El pasado 29 de agosto se celebró el Día internacional del Cabernet Sauvignon, la cepa más plantada y el vino varietal más consumido a nivel global. En la ocasión, la tradicional bodega argentina Trapiche, del grupo Peñaflor, puso en escena su actualizada colección de este varietal, que incluye vinos elaborados en Mendoza y Neuquén.
El último jueves de agosto de cada año, que en 2024 cayó en el día 29/8/24, se festeja el Día Internacional del Cabernet Sauvignon, el vino más consumido a nivel global, que proviene de la uva más plantada. Esta variedad es famosa en todo el mundo por su gran adaptabilidad a diferentes regiones vitícolas y por su alto nivel de reconocimiento del consumidor, dos características que la vuelven muy prestigiosa. Se trata de una variedad originaria de Francia, más precisamente de la región de Burdeos, que nació del cruzamiento natural del Cabernet Franc y el Sauvignon Blanc, de ahí su denominación.
En Argentina, este vino varietal es el segundo más preferido por el público, después del clásico malbec mendocino, y las vides que lo producen se adaptan a las diferentes características de los distintos terroirs, y en casa sitio ofrece un estilo característico, pero con un factor común que es su madurez plena y su equilibrio.
Si hay suelo, no hay techo»
El lema de Bodegas Trapiche
Para celebrar este varietal, Trapiche, bodega líder en la elaboración y exportación de vinos en Argentina, presentó su selección de Cabernet Sauvignon, con 12 etiquetas provenientes de distintas regiones de Mendoza y Neuquén.
Entre las etiquetas principales se encuentra el Trapiche Terroir Series Laborde, el cabernet más premiado de la bodega, con su mejor puntaje de 97 puntos según el reconocido crítico James Sukling, para las añadas 2017 y 2020. Este vino también alcanzó el mismo puntaje en la guía de vinos sudamericanos Descorchados. Este Cabernet es un vino de color rojo granate profundo que, según expersos catadores y críticos, «expresa aromas de frutos rojos maduros y pimienta negra… Luego de un tiempo, se encuentran notas de cereza, acompañadas de especias y roble. En boca, su estructura es densa y con toques especiados que entrega taninos ricos y aterciopelados».
Otros de los destacados de la bodega es el Cabernet Sauvignon Trapiche Medalla, línea creada en homenaje a los 100 años de la bodega. Es un vino de color rojo intenso que expresa aromas complejos con notas de mermelada de ciruela, pimientos verdes, pasas de uva, tabaco y un delicado toque de roble. De sabor equilibrado, en boca es muy persistente, con taninos suaves y maduros.
Por último, la bodega destaca el Cabernet Sauvignon Trapiche Reserva, línea insignia del gran hito alcanzado este año por la marca, tras convertirse en la Bodega Oficial del Inter Miami CF, el club estadounidense de fútbol donde juega Lionel Messi. «De un intenso color rojo, este vino expresa aromas a moras, especias tostadas y cedro. Pleno y redondo, en boca se perciben taninos aterciopelados y un final en boca con notas de tabaco y humo», opinan los expertos.
La colección de Trapiche se completa con Fond de Cave, Fond de Cave Reserva, Fond de Cave Gran Reserva, Perfiles Grava, Trapiche Puro, Trapiche Impuro, Trapiche Origen, Trapiche Gran Medalla y Expedición Sur –su nueva línea patagónica.
Cabe señalar que el Cabernet Sauvignon de la bodega ha logrado conquistar el mercado internacional, siendo más del 60% de lo que comercializa y de lo que se exporta a diferentes países del mundo.
Acerca de Bodegas Trapiche
Trapiche, ubicada en Maipú, Mendoza, es una bodega líder en la elaboración y exportación de vinos, llegando a más de 80 países.
A través de su historia, ha buscado interpretar la fortaleza de la viticultura en el país, especializándose en obtener lo mejor en cada terroir, creando vinos únicos. Esta diversidad tiene su origen en más de 1.200 hectáreas de viñedos propios y en el trabaja con casi 300 productores independientes que brindan sus mejores exponentes. Para Trapiche la calidad, la innovación y la diversidad han sido siempre los pilares que marcaron el camino a seguir. Si hay suelo, no hay techo, es su lema.
