La Federación de Cooperativas Vitivinícolas Argentinas (Fecovita), el principal grupo del sector en el país y una de las cooperativas más grandes del mundo, con 5.000 productores integrados y una elaboración y comercialización de 270 millones de litros de vino al año, ofreció un almuerzo por el fin de cosecha para 2.000 asociados e invitados en la Bodega Toro de Maipú.
Eduardo Sancho, titular de la empresa; Sergio Moralejo, subsecretario de Agricultura y Ganadería de Mendoza, y Martín Hinojosa, presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), en sendos discursos de tono general optimista, coincidieron en destacar el protagonismo excluyente de los viñateros, la conveniencia de trabajar juntos el Estado y la empresa privada y la necesidad de mejorar la rentabilidad de los productores para que no abandonen las fincas y haya mayores cosechas.
En el marco de la celebración del fin de la cosecha 2022 y de los 40 años desde la fundación de Fecovita, con la presencia de unos 2.000 productores, la entidad cooperativa llevó a cabo la 4ta. edición de su «Almuerzo de Productores» en el predio de la Bodega Toro en San Martín.
En el encuentro participaron legisladores nacionales y provinciales; el presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), Martín Hinojosa; el subsecretario de Agricultura y Ganadería del Gobierno de Mendoza, Sergio Moralejo; el director del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes), Alejandro Russo; el arzobispo de Mendoza, Marcelo Colombo y el presidente de Fecovita y anfitrión Eduardo Sancho.
Fecovita lidera el mercado argentino de vinos fraccionados, con el 30 % de participación. Elabora y comercializa 270 millones de litros al año. Es además el primer exportador de vinos a granel, el segundo exportador de mosto concentrado y el cuarto exportador de vino fraccionado, hacia 40 países del mundo.
Eduardo Sancho: «No somos una actividad que tenga ruedas y pueda irse»
«Tenemos un gran desafío para poder seguir con nuestra actividad, el país requiere una estabilidad económica que nos permita contar con previsibilidad y generar financiamiento; los productores necesitan invertir para tecnificarse. Somo un sector pujante, nos mueve la esperanza y la visión de un futuro mejor», manifestó en su discurso Eduardo Sancho, titular de Fecovita.
En la misma línea, Sancho prosiguió: «En nuestro sistema las inversiones aportan al desarrollo y la producción genuina y no especulativa. El espíritu cooperativo de Fecovita está arraigado a las economías regionales y la realidad del país. No somos una actividad que tenga ruedas y que pueda irse, somos la suma de miles de productores que se levantan al alba para trabajar en su finca luchando contra todas las adversidades climáticas y económicas. Por eso estamos comprometidos entre nosotros y con el futuro de la provincia y del país del país. Nuestros resultados están en las fincas y en el desarrollo de esta gran empresa que todos conformamos».
Necesitamos más diálogo para generar las políticas públicas de corto y largo plazo en materia de infraestructura, gestión y eficiencia del agua».
Eduardo Sancho, presidente de Fecovita
Asimismo, Sancho destacó el camino recorrido por su empresa en conjunto con organismos provinciales y nacionales, para impulsar el desarrollo de la vitivinicultura a través de financiamiento de largo plazo para cosecha y acarreo. Por otra parte, reiteró la predisposición de Fecovita para «fortalecer el diálogo constructivo junto a los distintos organismos y al conjunto de la sociedad para crear y generar las políticas públicas de corto, mediano y largo plazo en materia de infraestructura, gestión y eficiencia del agua, que contribuyan a hacer crecer el sector vitivinícola que está íntimamente ligado a las economías regionales del país«.
Martín Hinojosa: «Hay que pensar en integrarse, en vender más sin achicarse»
El tunuyanino presidente del INV eligió un discurso conciliador y unificador, también destacando el protagonismo de los productores que se esfuerzan contra las dificultades económicas y las adversidades climáticas.
«El camino es la integración, el asociativismo, el desarrollo de una economía de escala -remarcó el funcionario nacional-; hay que empezar a pensar m´ás en vender que en achicarse, más en la demanda que en la oferta… Siempre estamos viendo cómo nos achicamos, cómo una contingencia climática no mejora la rentabilidad, es una locura pensar de esa manera. Tenemos unos vinos de supercalidad, tenemos que tratar de exportarlos más, venderlos mas, pero integrar, y la integración tiene que empezar en el proveedor de uvas, tiene que ser parte fundamental del negocio».
Yo creo en la fórmula ‘bodegas + productores’, no en ‘bodegas vs productores’.
Martín Hinojosa, presidente del INV
Sobre las opciones de financiamiento que ofrece el Estado nacional, Hinojosa resaltó: «Hoy, a través del BID y del plan Proviar, está esa posibilidad, y hay que trabajarla junto con el asociativismo y las cooperativas, porque ese es el camino para crecer… Sin asociarse, sin integrarse, creo que el camino hacia el achicamiento productivo va a seguir».
Finalmente, el titular del organismo fiscalizador de la vitivinicultura argentina hizo un llamado al diálogo y el trabajo conjunto entre viñateros y bodegueros: «Tenemos que trabajar juntos el sector público y el privado, escucharse, analizar las mutuas necesidades, y ser parte de la solución; hay herramientas para usar, pero si no te sentás, si no trabajas en conjunto, si no ves hacia dónde va la vitivinicultura en el mundo, porque también hay que tener en cuenta eso, que no somos el ombligo del mundo… Si tenemos un mercado interno muy fuerte, hay que saberlo defender, pero a la vez aprovechar la oportunidad de exportar mucho, podemos vender mucho afuera porque tenemos la calidad…»
Y remató Hinojosa: «Yo creo en la fórmula ‘bodegas + productores’, no en ‘bodegas vs productores’, y con la aplicación de esa formula la integración es un buen negocio, partiendo de la simple consigna del abastecimiento».
Sergio Moralejo: «Para el vino hacen falta 4 años de trabajo, no hay magia»
A su turno, el subsecretario de Agricultura de Mendoza, Sergio Moralejo, expresó que «cuando comenzó la pandemia, hubo quienes dijeron que no se iba a poder terminar la cosecha, y se pudo», y atribuyó el mérito a los productores.
También, con cierto tono crítico hacia el gobierno nacional, manifestó que «los productores vitivinícolas demuestran que trabajando se puede salir adelante, en lugar de depender de un sistema asistencialista». «Para ver un vino hacen falta cuatro años, no hay magia», remató.
Y anunció Moralejo que en el transcurso de los próximos días el gobierno provincial anunciará una línea de créditos, en el marco de un plan a 10 años, para proteger las 16.000 hectáreas en la provincia que habitualmente corren riesgo de verse afectadas por las heladas.
Postales
Virgen de La Carrodilla
El ingreso de la imagen de la Virgen de la Carrodilla, venerada en Mendoza como la Patrona de los Viñedos.
Fue recibida de pie, con los pañuelos blancos y su himno tradicional y aplaudida por los 2.000 comensales dentro de la enorme carpa de Bodega Toro.
Ahora, una réplica de la imagen original emplazada en la Iglesia de la Carrodilla, tendrá su lugar en la bodega de San Martín.
