Un informe elaborado por el Observatorio de la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas de Argentina (Acovi) analiza y compara los costos de cosecha manual, asistida y mecanizada para cada tipo de uva, concluyendo que en 2020, con respecto a 2019, el aumento promedio de los 3 tipos de cosecha fue de un 34,3%. En particular, la cosecha manual subió 28%, la asistida 33% y la mecánica 42%.
Una de las conclusiones del informe de costos de la cosecha 2020 según tipo de cosecha y tipo de uva, realizado por el Observatorio de Acovi, arroja que
en el caso de la uva blanca común la cosecha asistida resultó más económica que la cosecha manual para cualquier nivel de rendimiento por hectárea. No obstante, si se la compara con la mecánica, esta última resultó más conveniente a partir de los 320 qq/ha aproximadamente.
En cuanto a la uva tinta común, ocurre algo similar: la cosecha asistida resultó ser un sistema menos costoso que la cosecha manual. Sin embargo, para rendimientos mayores a 280 qq/ha, la cosecha mecánica se mostró como el método más conveniente desde el punto de vista económicao.
Para la uva tinta varietal, se estima que la cosecha mecánica conviene a partir de un rendimiento de 240 qq/ha aproximadamente.
Respecto a 2019, se observó en 2020 un desplazamiento en el punto de inflexión a partir del cual la mecanización de la cosecha resulta ser una alternativa conveniente. El año pasado, ese punto de inflexión se estimó en valores cercanos a los 280 qq/ha para uva blanca común, en 260 qq/ha para uva tinta común y 220 qq/ha para uva tinta varietal. Este fenómeno es generado por el encarecimiento relativo de la cosecha mecánica respecto a los demás sistemas analizados, debido al incremento en el tipo de cambio que afecta directamente al costo de alquiler de la maquina cosechadora.
Cosecha manual
Este sistema tradicionalmente utilizado en la vitivinicultura de Mendoza requiere una importante cantidad de mano de obra para su desarrollo y continúa siendo el de mayor utilización en la actualidad, debido a factores tales como su adaptabilidad a distintos sistemas de conducción, y también el hecho de no requerir maquinaria adicional para su consecución (tractor u otros equipos).
En relación a los costos totales del ciclo productivo, este sistema de cosecha representa el 20% de los costos para un productor de uva blanca común y el 18% en el caso de un productor de uva tinta común.
Un factor determinante a la hora de utilizar este sistema de cosecha es el precio de la ficha. Este año, el incremento en el precio pagado fue inferior al porcentaje de incremento del salario de un obrero de viña, motivo por el cual los incentivos para llevar a cabo esta tarea por parte de los cosechadores fueron menores.
El costo de cosecha manual se incrementó un 28% interanualmente, debido principalmente al incremento en el costo del flete (+50%) y en el precio de la ficha (+15%), conceptos que representan el 75% del costo. El factor mano de obra (el costo asociado al pago de las fichas a los cosechadores) representa el 45% del costo total de cosecha. En 2019 este factor representaba el 50% de los costos.
El costo de cosecha manual para uva tinta común se incrementó un 30% interanualmente. Esto se produjo mayoritariamente por los incrementos en el costo del flete (+50%) y en el precio de la ficha (+21%), explicando estos conceptos el 77% de los costos. El factor mano de obra (asociado al pago por los tachos cosechados) representa el 51% del costo total de cosecha, mientras que en 2019 representaba el 55%.
Para la uva tinta varietal, el costo estimado para la temporada 2020 es de $245/qq (en el caso de un rendimiento de 120 qq/ha), observándose un incremento de 40% respecto al año pasado y representando el costo de la ficha el 57% del costo de cosecha en 2020. Por su parte, el costo de acarreo de la uva es el 21% del total
En el caso de la uva blanca común, el costo de cosecha se incrementó un 28% respecto a 2019.
Cosecha asistida
Este sistema, en el cual el personal que se encarga de la recolección de la uva es asistido por bines y/o carros, permite mejores condiciones laborales traduciéndose en un sistema más eficiente y productivo.
La estimación muestra que el costo de la cosecha asistida es un 1,6% menor que la cosecha manual. Este costo se incrementó un 33% interanualmente, debido a aumentos en el precio de la ficha (+15%) y el flete (+50%). Estos dos conceptos explican el 68% del costo total de cosecha. El costo de mano de obra asociada a los cosechadores resulta menor que en la cosecha manual (37% vs 45%).
Para un productor de uva tinta común, cosechar hoy con el sistema asistido cuesta un 3,2% menos que bajo el sistema manual tradicional, y se incrementó un 34% respecto a marzo de 2019. Esto se produjo principalmente por aumentos en el precio de la ficha y el flete, que explican el 69% del costo total. El costo de mano de obra asociada a los cosechadores resulta menor que en la cosecha manual (42% vs 51%).
Si se estima el costo de la cosecha asistida para un escenario de uva varietal de 120 qq/ha, el resultado para 2020 se ubica en $226 por quintal, un 7,6% menos que la cosecha manual. Este sistema de cosecha muestra un incremento en su costo de 41% respecto al año pasado.
A su vez se puede mencionar que el costo de cosecha asistida representa el 19% de los costos anuales de producción en el caso de la uva blanca común y el 18% en el caso de la uva tinta común.
La cosecha asistida se posiciona como el sistema de menor costo para el productor primario permitiendo, además, mejorar las condiciones de trabajo para el empleado, reduciendo la cantidad de mano de obra requerida y la probabilidad de ocurrencia de accidentes laborales.
Se destaca la importante incidencia que tiene la mano de obra y el flete en los costos de cosecha manual y asistida representando aproximadamente $7 de cada $10 destinados a la cosecha ($4 corresponden al pago de fichas y $3 al flete, en promedio).
Cosecha Mecanizada
Este sistema utiliza máquinas cosechadoras y por tanto requiere muy poca presencia de mano de obra, pero resulta ser un sistema sólo adaptable a espaldero y requiere que la explotación cuente con ciertas especificaciones en cuanto a su estructura y poda para maximizar los resultados.
Por otro lado la cosecha mecanizada supone una tarifa fija por hectárea pero existen prestadores de servicio que optan por cobrar por hora de trabajo, lo cual puede encarecer la cosecha teniendo en cuenta la cantidad de uva en el viñedo y la dificultad para operar. También influye en el costo la facilidad que tiene la bodega para receptar la uva ya que las maquinarias son capaces de trabajar las 24 horas del día si es necesario.
Los resultados muestran que la cosecha mecánica resulta un 32,6% más cara que la cosecha manual. El costo de cosecha mecánica se incrementó un 42% interanualmente debido principalmente al aumento en la cotización del dólar. En este escenario se observa que el flete representa el 23% del costo total de cosecha, siendo el ítem que más incremento sufrió en el último año.
Esto se debe principalmente a que el costo de alquiler de la máquina cosechadora se encuentra denominado en dólares, siendo vulnerable a variaciones en el tipo de cambio (la cotización del dólar oficial se incrementó un 53% entre marzo de 2019 y marzo de 2020). Este sistema de cosecha representa el 24% de los costos totales de producción en uva blanca común y en uva tinta común.
Para el caso de la uva tinta común, la cosecha mecánica se incrementó un 41% interanual debido principalmente la variación en la cotización del dólar. Respecto de la cosecha manual, la mecánica resulta un 41,2% más cara.
Al igual que en el escenario de uva blanca común, el costo del flete fue el que mayor incremento registró, con un 50% de aumento interanual.
En cuanto a uva tinta varietal, se estima un costo por quintal para 2020 de 335 qq/ha, siendo un 36,7% más cara que la cosecha manual y exhibiendo un incremento interanual de 41%.
Por último, resulta de interés destacar que, en base a lo consultado, los acontecimientos asociados a la pandemia del Covid-19 en general no afectaron el ritmo de la cosecha. Se debe mencionar el hecho de que si bien en algunos casos se reportaron dificultades debido a falta de información o información errónea, se lograron subsanar rápidamente permitiendo que la cosecha continuara normalmente.
Informe completo: Costos cosecha 2020 – Acovi
Concluyendo el análisis, Acovi propone un «Convenio de Corresponsabilidad Gremial», que se trata básicamente de «establecer una tarifa sustitutiva diferenciada para cosecha asistida. Ampliar y potenciar las líneas de financiamiento existentes con el objeto de promover tanto la creación de empresas de servicios como así también la expansión de las ya existentes. Promover nuevos mecanismos de integración entre productores y bodegas posibilitando, por ejemplo, la compra de la maquinaria necesaria para llevar adelante este sistema de cosecha.»
Fuente: Observatorio Acovi
