Este año 2024 los empresarios y bodegueros mendocinos marcaron una fuerte presencia en la Feria de Maquinaria Vitivinícola Simei de Milán, Italia -que se realizó del 12 al 15 de noviembre-, en buena medida alentados por la expectativa de una pronta apertura de importaciones por parte del gobierno argentino, con menos impuestos, regulaciones, restricciones y burocracia. Para ellos, la posibilidad de bajar costos con la compra en el exterior de equipos e insumos a precios competitivos significa afianzar sus negocios y seguir dando empleo en el pujante sector vitivinícola.
Uno de los interesados en conectar a Mendoza con la industria italiana y traer los nuevos desarrollos tecnológicos a la provincia es Silvestre Airoldi, fundador y copropietario de la empresa de servicios y ventas de maquinarias e insumos Sucopack, quien lleva recorridas 7 ediciones de la feria Simei. En esta entrevista exclusiva con Enolife en Milán, el emprendedor, voz autorizada, ofrece su visión sobre las diferencias y la complementariedad entre las industrias del vino de ambos países, sobre cómo en los últimos difíciles años los italianos nos «bancaron» y sobre la prometedora puerta que se abre para importar a corto plazo la avanzada tecnología vitivinícola y de bebidas italiana.
Entrevista: Pedro Straniero, editor de Enolife (Media partner de la Feria Simei Milán)
Los últimos años -con la economía y las relaciones comerciales de la argentina cerradas al mundo, la escasa posibilidad de producción local por falta de material, capacitación, tecnología o insumos- los proveedores de la industria vitivinícola (entre otras) se vieron imposibilitados para brindar maquinarias específicas, repuestos o asistencias de alta calidad. A esto se sumaron altos gravámenes de importación, barreras para arancelarias, burocracia e imposibilidad para pagar al exterior. En este sentido, mantener la actividad de las bodegas y reparar equipos ha sido una tarea muy complicada y en algunos casos imposible. Así lo destaca Silvestre Airoldi, unos de los propietarios de Sucopack, empresa ubicada en San Martín, Mendoza y que trabaja para todo el Cono Sur.
Sin embargo, pese a las dificultades -reconoce Airoldi en el marco de su presencia en la Feria de máquinas y equipos Simei de Milán, Italia– los fabricantes de ese país nunca dejaron de confiar en las posibilidades argentinas, mostrando comprensión y otorgando relativas facilidades para el pago de sus productos de exportación, de fuerte presencia en las bodegas, aceiteras y otros establecimientos industriales argentinos.
Sucopack, desde el fraccionamiento al contenedor
Sucopack es una empresa mendocina, de alcance global, dedicada a acompañar a sus clientes en los procesos de fraccionamiento, control de calidad en línea, terminación de producto, como así también en el proceso de logística de carga a través del cuidado del producto en el contenedor y su control de temperatura durante el viaje al destino final.
La compañía desarrolla una estrategia comercial basada en estar a la vanguardia en tecnología de fraccionamiento, control de calidad de insumos, producto terminado, logística y asistencia post-venta. Con su base de operaciones se encuentra en pleno corredor bioceánico -Ruta 7, General San Martín, Mendoza, Argentina, se dedican también al asesoramiento técnico y comercial para toda Sudamérica a empresas de los rubros Wine & Spirits (bottle and can), bebidas en general (cerveza, gaseosas, aguas, aguas saborizadas, jugos, leche, aperitivos, licores), Food, Aceites, Químicos y Personal Care.
Enolife: -Silvestre, esta Feria Simei de Milán es la séptima a la que venís, siempre buscando novedades para llevar a Mendoza ¿Notás inquietud en las empresas que exponen aquí sobre la situación económica argentina?
Silvestre Airoldi: -La verdad es que hemos vivido unos últimos años complicados, en los que hemos tenido que explicar a las empresas italianas los porqués de nuestras dificultades, las necesidades que teníamos, las razones de los gobiernos argentinos anteriores que no entendían esta industria, lo que nos estaba pasando a las empresas que vendíamos maquinarias y servicios, la frustración de las bodegas que no podían tener las tecnologías que necesitaban para crecer…
Les hemos pedido ayuda, tratando de que siguieran apoyando a nuestras empresas y bodegas… Algunos lo entendían y otros no, obviamente; igual, nosotros en los últimos años siempre les hemos traído un mensaje positivo, haciéndoles ver que los tiempos mejorarían y que realmente tendríamos la oportunidad de comprarles repuestos e insumos en mejores condiciones, en tiempo y forma… Y mientras tanto, mientras hacíamos esta docencia en Italia, nos la arreglábamos en el país como podíamos, con mucho esfuerzo…
Pocos conocen el detrás de escena en la industria, todo lo que se hace en silencio en una bodega, hay gente maravillosa que ha mantenido las máquinas como ha podido en todo este tiempo. Todos ven el producto terminado en una góndola, pero pocos ven el esfuerzo de la gente que trabaja en el mantenimiento, de los enólogos que no tienen todo lo necesario para poder hacer realmente el vino que quieren hacer.
-¿Y este panorama complicado está cambiando ahora, con las nuevas políticas económicas de este gobierno?
-Bueno, ahora por lo menos hay una esperanza de que se pueda comprar un repuesto, o arreglar una máquina… De hecho, ya hay menos restricciones, menos dificultades para los pagos. Ya en marzo de éste año (2024) se permitió nacionalizar y luego pagar en 4 cuotas (30/60/90 y 120 días desde la oficialización), en junio se cambió a 30 y 60 empezando a generar confianza del rumbo. En agosto se permitieron los pagos a 30 días tanto para máquinas, repuestos o servicios, y a las pymes se les dio la posibilidad de dar un 20% de anticipo y lo demás en 30 o 60 días.
Esto generó una confianza y puso los ojos de muchas empresas en el país. Si a esto le sumamos que se está por terminar con el Impuesto País, es un escenario prometedor y favorable para muchas empresas que necesitan máquinas, servicios y otras que quieren invertir. Los exportadores italianos están empezando también a tener una flexibilidad en la forma de pago y también se están usando instituciones como la Agencia Italiana de Crédito para la Exportación (SACE) que garantiza las operaciones entre empresas de ambos países. Esto, hace 11 meses era impensado, y me voy de la feria con todo el apoyo de nuestras empresas aliadas.
-¿Cuáles son esas empresas?
Nosotros trabajamos con exclusividad en máquinas con Grupo Arol, Robino & Galandrino, Cames, Cavagnino & Gatti, equipos de control AT2E, APE Impianti, Digital Control y Sincera Sistemi (ésta última ya la trabajabamos y en esta SIMEI logramos la exclusividad). Ahora sumamos nuevas representaciones oficiales y exclusivas de Officine Pesce, Mori, Gamba SRL, Enolmeccanica Vallebelbo, Bandejas CMP.
Con el grupo italiano Arol, que es número uno en taponadoras a nivel mundial y que nos ha abierto muchísimas puertas, no solamente en el vino sino en otros productos, trabajamos desde el 2015. Robino & Galandrino es líder mundial en el sector de capsuladoras y bozaladoras. Cavagnino & Gatti en la tecnología de etiquetado para vinos, licores, cerveza, aceite, vinagre, refrescos, agua, jugos, envases de alimentos, productos químicos, cosméticos y otros sectores.
La empresa francesa AT2E nos provee todos los equipos de control de calidad. Ape Impianti, de líneas completas para el embalaje que es muy importante para nosotros en la parte seca. Con Sincera Sistemi tenemos sellado con lacre sintético y lacre tradicional para las botellas.
Además acabamos de asociarnos a CMP, una empresa de bandejas plásticas bajo la marca Vinplast, para el apilado y almacenamiento de botellas de vino y champagne de modo horizontal, que pronto tendremos disponible. Y en breve sumaremos cápsulas para vino y espumantes, bozales y botellas de vidrio al mercado.
También trabajamos con Omar R&G que tiene máquinas e instalaciones para el embotellado; Unimac Gherri para el llenado y taponado de envases de vidrio con tapas twist-off; y Guala Closures de cierres anti-rellenado y de aluminio para bebidas.
-Contanos sobre la historia de tu empresa…
-Trabajamos en la industria vitivinícola desde el año 2003. Yo estudié comercio exterior pero desde 2005 me dediqué a los equipos de tapado a rosca y al control de calidad del tapado… En el año 2015 se forma Sucopack, en ese momento yo estaba solo y me asocié con un amigo mío de toda la vida, Iván Tordi, hemos hecho la primaria juntos, la secundaria, la universidad, es como un hermano. Y con Federico Ruiz que es mi primo hermano, ingeniero y trabaja conmigo desde 2008 aproximadamente.
Cada uno de nosotros trae mucha experiencia en la industria vitivinícola desde antes de formar Sucopack y todos en diferentes áreas. Iván como especialista en logística y cuidado de cargas; Federico cómo electrónico enfocado en la parte de equipos y máquinas; y yo desde la industria del tapado a rosca y control de calidad. En el 2015 todos coincidimos en que veníamos de experiencias fallidas y nos juntamos para crecer y afianzar la empresa.
–¿Cómo trabajan desde su base en la planta de San Martín?
-Nosotros tenemos la fábrica en San Martín frente al autódromo, justo sobre la ruta 7. Pero en el 2015 empezamos fabricando mantas térmicas en un garaje. Para llegar hasta aquí hemos hecho un esfuerzo realmente muy grande. Es un camino que conlleva experiencia, práctica, conocimiento, y siempre existe la posibilidad de llegar a ser un grande de la industria. Uno aprende a querer más lo que tiene cuando realmente le ha costado conseguirlo. Hoy tenemos un predio de 7.500 metros cuadrados, dos depósitos, y ahora estamos en la construcción de un tercero depósito, con oficinas y un salón para recepción… Desde ahí nos movemos hacia Chile, Bolivia, Uruguay, Paraguay y Perú. Desde Mendoza trabajamos para Sudamérica con las máquinas, con las mantas térmicas, con los termógrafos, analizando a ver qué más se puede hacer.
-Desde el 2015 a la fecha han hecho un largo camino y han ido sumando representaciones y empresas… ¿Además de la vitivinicultura, con qué otras industrias trabajan?
-Actualmente estamos trabajando mucho con la tapa rosca. Trabajamos con empresas como Coca-Cola, Campari, Gancia, en otros sectores aparte del vitivinícola. Y ofrecemos servicios y asesorías en cuanto al tapado a rosca en la parte vitivinícola. Somos uno de los pioneros. Tenemos equipos franceses para controlar la calidad. Y contamos con gente muy capacitada para ello en Italia y en Francia.
-¿Cuánta gente trabaja en Sucopack?
-La empresa involucra a 24 personas. Dentro del departamento técnico hay 4 técnicos y 2 personas más que ayudan en la logística y el post venta; en ventas hay 6 asesores y estamos por sumar seguramente más personas al área. Hace 2 años, además, sumamos un departamento de seguridad e higiene, un post venta ordenado y un crecimiento en la fábrica de mantas térmicas que nos da la venta en un % importante del mercado.
En el área de Logística y Control de temperaturas, tenemos a 5 integrantes en fabricación y luego personal abocado a la venta y colocación de insulados, jacket pallet y dataloggers.
En el área de post venta incorporamos ya hace 2 años a la ingeniera Marisa Caponetto que ha realizado un gran trabajo junto a los comerciales de cada zona. Dos de los comerciales están ligados al área de enología, habiéndose sumado la enóloga Magalí Yael finales del año pasado para llevar, no solo la parte comercial, sino también la empresa tenía un proyecto de sacar su vino y Magali tenía todas las intenciones de llevar adelante algo así.
Tener gente capacitada en el área de enología fue primordial a la hora de comercializar el Turbowine, que es un equipo que fabricamos nosotros para romper el sombrero en tanque durante la fermentación y en donde nos permite asesorar en cada bodega de manera correcta según su estructura y necesidad. Estamos muy contentos con el equipo de trabajo que se está formando.
-¿Cómo funciona el Turbowine?
-Es un equipo que toma el dióxido de carbono que se libera durante la fermentación del tanque o pileta de mosto, lo aspira, lo pasa a través del equipo y lo vuelve a inyectar otra vez en la pileta a través de una cánula. Y eso te rompe el sombrero del mosto en 8 minutos. Con este equipo ya no se necesitan más bombas ni punzones. O sea, ahora con el equipo, realmente en 8 minutos movemos una pileta de 40.000 o 50.000 litros.
Tiene varias ventajas adicionales: no necesita instalació, permite un ahorro energético considerable, su manipulación es muy práctica para los operarios ya que tiene una pantalla táctil de fácil lectura, aumenta el rendimiento de los equipos de frío, evita la contaminación cruzada y aumenta la extracción de polifenoles, entre otras cosas.
Del Turbowine ya hemos vendido 120 equipos. Lo están usando más de 200 enólogos en Mendoza, y hemos fabricado ahora 40 equipos más para vender en esta temporada. Lo hemos hecho nosotros con una tecnología que vimos en el exterior, empezamos a desarrollarlo y al final lo terminamos fabricando en serie porque no lo podíamos importar. Así es que realmente nos fue bien con eso, y necesitábamos un enóloga porque, además, teníamos ganas de elaborar un vino utilizando ese equipo.
-¿Y qué vino elaboraron con Magalí y el Turbowine?
-Sacamos hace dos semanas atrás el vino de Sucopack que se llama Rojo Corazón Malbec. Lo hizo Magalí, que cuando ingresó manifestó su interés por hacer un vino, y salió tal como ella lo soñó.
El vino está hecho con uvas de Maipú y Tupungato, lo elaboramos en la bodega de Leo Viani, bajo la vigilancia permanente de Magalí. Hicimos sólo 13.000 botellas, y está embotellado y listo para salir al mercado desde hace dos semanas.
-Viniste a Milán con otro colaborador tuyo, Ariel Alaniz, contame cuál es su rol en la empresa…
Ariel empezó trabajando en Mendoza con Rodolfo Montilla, cuando Rodolfo tenía la empresa de embotellado móvil, él fue el pionero en embotellar móvil en Mendoza. Él es nuestro jefe comercial, así que yo consideré necesario que viniera conmigo para ver lo que hacemos acá, para poder vender en Argentina, es su primer viaje.
-Ustedes llegaron a Italia en una misión organizada por la Cámara de Comercio Italiana en Mendoza… ¿Cómo fue esa alianza?
Yo estoy muy agradecido con la Cámara de Comercio Italiana en Mendoza por su apoyo permanente en los últimos años. Pedro Baziuk padre y Pedro Baziuk hijo son dos personas realmente fabulosas, muy generosas. Y este año sumaron a su equipo a Oliverio Gabrielli, que fue quien nos acompañó en el viaje, con quien estamos también muy agradecidos. Te dan esa posibilidad de escucharte y ver qué cosas nuevas se pueden hacer. Hicimos un trabajo en conjunto para venir con otras empresas, con María Graciela Drago, jefa de producción de Bodega Altavista; Santiago Henríquez, jefe de mantenimiento de Bodega Malma; Fernando Tinto, gerente de producción de Luigi Bosca.
–¿Qué has sumado? ¿Cuál es la importancia y el rédito de haber estado este año en la Simei Milán?
-Lo primordial es que hay un cambio del 100% en la mirada hacia Argentina, al mercado argentino. Yo veo que ellos quieren estar presentes con sus productos en Argentina. También se conjuga que en Europa ha habido unos años de baja en las ventas. Y están viendo al mercado argentino, y también al sudamericano, con buenos ojos para ir a invertir. Porque si no tenés las ganas de este lado no hay caso, por más que uno reme como remamos nosotros durante 10 años, y la verdad es que nos costó mucho. Ahora, de hecho, me llevo acuerdos para importar equipos de cuatro distintas empresas para hacer showrooms en las bodegas, algo que nunca habíamos podido hacer.
A todos les he comentado el cambio en la economía del país, cómo se hacen los pagos ahora desde la Argentina al exterior, y les he pedido reafirmar el acompañamiento, estamos en esa etapa en la que necesitamos un empujón. De hecho, Sincera Sistemi SRL nos van a apoyar enviándonos lacre, para que podamos empezar a vender y que se haga la rueda que nos falta. Ese apoyo te lo dan solamente cuando ven que vas a hacer las cosas bien.
En síntesis, hoy nos vamos con la exclusividad de los productos de Sincera Sistemi SRL, un acuerdo que veníamos trabajando pero no teníamos exclusividad hasta ahora. También llevamos la exclusividad de los productos de Gamba, de todas sus máquinas y equipos para el lavado de tanques. Y la de Vetrobalsamo Spa Warehouse, una fábrica de botellas de vidrio que tiene 8 líneas de botellas, 3 para vinos blancos y 5 para vinos tintos.
Así que son cuatro empresas de las que hemos obtenido exclusividad para sus productos -una la vamos a revelar en poco tiempo- y reafirmamos los acuerdos con otras tres empresas con las que veníamos hablando: Officine Pesce, que hace máquinas para bajas velocidades en vino, licor y aceite, que son de alta calidad y con un precio realmente muy bueno. Barida International SRL, que hace máquinas para los métodos champenois y charmat.
-Para llegar aquí y hacer tan buenos contactos y negocios debés tener un equipo muy sólido con vos, ¿Cómo trabajan?
-Sí, claro, quiero destacar que sin el grupo de personas con las que trabajamos, no podríamos estar presentes en esta feria y continuar con la idea de sumar tecnología y capacitarnos día a día para dar mejores servicios. Detrás de una empresa se necesita un equipo de trabajo y nosotros realmente tenemos muy buena gente con nosotros y pensamos en seguir sumando capital humano. El trabajo de mis socios ya sido sin dudas prioritario y determinante para tener una empresa sana, creciendo y con mejores posibilidades.
Los proveedores de servicios, insumos y máquinas y además tenemos que saber que fuera de las empresas hay instituciones, embajadas, departamentos comerciales que apoyan a las empresas que viajamos, que tenemos intención de capacitarnos, que exportamos e importamos y con las que debemos empezar a estar más cerca. Si bien no todas las instituciones trabajan hoy al 100%, esperemos que también empiece esto a ser un cambio.
Nosotros como empresa nos hemos encontrado con la Cámara de Comercio Italiana de Mendoza que ha sido muy importante para Sucopack y también para otras empresas del sector, como así también para los clientes finales, porque ayuda conectar con tecnología y calidad. El año próximo, la Cámara tendrá importantes desafíos y las empresas debemos estar apoyando este desarrollo también.