Según el informe recién publicado del Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV), las importaciones de vino de China cayeron 19,3% en valor y 16,5% en volumen durante el primer trimestre de 2020 con respecto al mismo período del 2019. En plena crisis comercial generada por el coronavirus, el único país que aumentó su volumen de ventas al gigante asiático fue Argentina, con un notable crecimiento del vino a granel, atenuando así la baja general de las compras de vino del país oriental.
En plena crisis comercial generada por la irrupción del coronavirus, las importaciones chinas se situaron en los 125 millones de litros (-25 millones) y en los 438,4 millones de euros (-105 millones), con un precio medio que bajó un 3,3% hasta los 3,52 €/litro. Estos datos agravan el mal momento que ya venían registrando las importaciones chinas de vino, que cayeron durante 2018 y 2019.
Pese a que la caída registrada en este primer trimestre de 2020 es clara, observamos una evolución muy diferente por meses:
Los datos de enero fueron pésimos, con descensos que rondaron el 50% (-42 millones de litros y -150 millones de euros) y con notables pérdidas en todas las categorías y generalizadas por países proveedores, si bien estamos comparando con un enero de 2019 que fue especialmente bueno.
La tendencia fue radicalmente opuesta en febrero, cuando China incrementó sus importaciones de vino un 25,7% en volumen (+8 millones de litros) y un 56% en valor (+57,3 millones de euros), gracias al enorme aumento del vino envasado, sobre todo australiano, español y francés.
Y llegamos a marzo, mes en el que muchos esperaban una fuerte caída de las importaciones, entre otros motivos, al ser el mes en el que entraron en vigor las restricciones comerciales en ciertos países a raíz del coronavirus. Sin embargo, los datos de marzo muestran un crecimiento el 24,5% en el volumen de vino importado por China (+9,1 millones de litros), si bien gran parte de esta subida corresponde a unas compras de vino a granel realizadas a Argentina.
La buena marcha del granel argentino también en valor, no compensó en todo caso la fuerte caída del valor de envasados y espumosos (que también bajaron en volumen), pero logró que el número de la caída fuera mucho mas leve lo que hizo que, para el conjunto de productos, China redujera un 8,3% su gasto en dicho mes (-11 millones de euros) respecto al mismo período de 2019.
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Volviendo a los datos del primer trimestre de 2020, la caída en volumen (-25 millones de litros) estuvo marcada en gran medida por los tres principales proveedores: Australia, Chile y Francia, perdiendo cada uno cerca de 10 millones de litros, en todos los casos cayendo en torno al 25%. España, cuarto proveedor, cayó la mitad que la media de mercado, un 8,5%, perdiendo solo 1,2 millones de litros. Algo mayor fue el descenso de Italia (-14%, -1,3 millones), con datos negativos también para Sudáfrica y Estados Unidos, mientras que las compras a Argentina se dispararon un 713% (+8,2 millones de litros) por el ya mencionado impulso del granel.
En términos de valor, Francia concentró gran parte de la caída global al perder 64 millones de euros (-37%) para un descenso total de las importaciones chinas de 105 millones, lo que confirma la crisis del vino francés en China, ya observada durante 2019. Australia, primer vendedor, solo perdió un 3,8% de sus ventas (-6,5 millones de euros), con mayores caídas porcentuales para Chile (-20,3%) e Italia (-13,3%), que pierden 16 y 4,8 millones respectivamente. España repite quinto puesto con un descenso del 9,7%, también la mitad que la media, dejando de facturar algo más de 3 millones de euros. Destaca la fuerte subida de precios de Australia (+25,6%), y la bajada de Francia (- 16%), que no impidió que vendiera menos vino que en el primer trimestre de 2019.
Argentina creció a muy buen ritmo en valor (+42%, +2,1 millones de euros), aunque mucho menos que en litros ya que su precio medio global se desplomó un 83% (de 4,42 a 0,77 €/litro), ya que graneles muy económicos protagonizaron este crecimiento.
Por tipo de vino, el envasado lideró claramente las importaciones chinas pese a caer en torno al 20% en estos tres meses, registrando descensos de 22,3 millones de litros y de casi 90 millones de euros.
Las compras de vino espumoso cayeron de forma similar en términos relativos, algo más del 20%, mientras que el enorme aumento del granel argentino en marzo suavizó la caída trimestral, que fue solo del 4,8% en volumen (-1,8 millones de litros), más acusada en valor (-28%, -11,4 millones de euros) al bajar bastante de precio.
Solo aumentaron las compras en vino en formato bag-in-box, pese a ser el que más se encareció.
En definitiva, el coronavirus ha tenido ya consecuencias económicas terribles. Se ha perdido parte importante del consumo en hotelería, en especial durante la celebración del año nuevo chino. Y una parte muy importante de estas ventas no se recuperarán durante la segunda parte del año.
Cuánto puede afectar la crisis del coronavirus y otras amenazas (Brexit, aranceles Trump, etcétera) en el comercio chino -y mundial- de vino en 2020, es algo que no puede saberse, pero sí sabemos que está afectando a las ventas, a los pedidos y a la logística, con menor transporte entre países. Y todavía tenemos que ver cuál puede ser la expansión de estos efectos en otros mercados. Por cierto, todo dependerá en gran medida de la duración de la crisis y las posibilidades de tener un segundo semestre notablemente mejor. Hay efectos que no podrán recuperarse, pero quizás todo el problema se vea en noviembre y diciembre con otros ojos.
Ver informe completo: Caen las importaciones chinas de vino envasado, que compensan con más granel en marzo
Fuentes: Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV) y Aduana de China
